Más seguridad, más medicamentos, nadie puede acercarse. Me catalogaron de "peligroso".
—Yo no soy el peligroso— repetía una y otra vez sin levantar la vista, sabiendo que ellos iban a estar viéndome.
—Yo no lo maté.
Esta vez no hay luz de luna, esta vez no hay ventanas, esta vez no estoy en mí cama. Esta vez, ellos no necesitan el espejo para poder salir.
No poder dormir bien, o directamente no dormir.
No poder hablar, sabiendo que ellos hablan por mí.
La puerta es abierta de golpe, tres personas entrando, tres personas armadas.
—Yo no soy el peligroso— levanté la vista y ahí estaban. Porte elegante mirando con pena. Postura altanera con sonrisa macabra.
—Ellos lo son, ellos son los peligrosos.
Tres personas entraron, tres personas armadas.
—Nos dejaste tomar el control, nos dejaste estar en este plano.
Tres personas entraron, tres personas armadas.
—No hiciste nada para ayudarlo, dejaste que lo matemos.
Tres personas entraron, tres personas armadas.
—El control el suyo nuevamente.
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Tres personas entraron, pero ninguna volvió a salir.
Éramos tres en mi cuerpo, éramos 3 en mi mente.
Éramos... Tres personas entraron, tres personas armadas... Las tres personas dispararon
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Moneda de 3 caras
Ficción GeneralNuestra perspectiva en diferentes situaciones. Nuestras acciones en diferentes ocasiones. Somos un cuerpo. Somos tres mentes. Soy yo. Soy ellos. Ellos son yo. Somos nosotros. No somos, soy. *Capítulos cortos"
