Un nuevo encuentro

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Tres semanas, eso había pasado, tanto tiempo y tan poco de alguna forma.

-¿Cómo que no tienen nada?- gruño, viendo al pelinegro presionar las teclas con furia. Aun con su rostro inocente, cuando Pete se encontraba inclinado sobre el escritorio mirando con ira al contrario, el miedo podía sentirse.

-yo...lo siento, en serio- Job se lamentó- pero el tipo es un camaleón. No pude dar con él, aun cuando todo el departamento lo busca, es imposible.

-¡No lo es!- grito enderezándose, toda la oficina se giró a verlo- no lo es- repitió, pero esta vez en un tono más bajo- solo...complicado.

-¿Complicado?- Arm, otro de los cerebritos del área de informática soltó girándose en su silla- estamos hablando de una de las mentes más brillantes de toda Asia.

-¡Brillante, por dios!- coloco ambas manos en su cadera viéndose aún más molesto- el tipo es un psicópata, solo eso.

-deberías reconocer que es bueno- murmuro Job nuevamente, Pete solo lo observo de lado- por algo logro secuestrarte y tenerte cautivo todo ese tiempo.

-eso solo fue suerte – se giró dándoles la espalda, le ponía de mal humor no poder dar con él. Salió del sitio caminando por un extenso pasillo, las oficinas del área de búsqueda y rastreo eran un fastidio, un grupo de nerds que eran buenos solo con sus computadoras y ni aun así lograban atraparlo. Si los malditos Hackers no podían dar con V ¿Quién podría? Salió del edificio y observo el cielo, era de noche otra vez. Sus días se desvanecían mientras buscaba al tipo ¿Lo encontraría algún día? sintiendo su móvil vibrar lo sacó del bolsillo trasero de sus jeans y respondió- dame buenas noticias.

- lo siento amigo- digo la voz conocía- no tuve suerte.

-¡Por dios Ken! Es solo un maldito tipo ¿Cómo puede desaparecer?

-puede si lo quiere, él sabe lo que hace- Pete suspiro, ni siquiera su contacto de china podía serle de ayuda.

-me importa una mierda, quiero encontrarlo ¿Entiendes? Tiene que aparecer ¿Escuchas?

Hubo un momento de silencio, Pete aprovecho para echar una mirada a su alrededor. El edificio estaba en un área apartada de la ciudad camuflada como un antiguo taller cerca del puerto, algo que esperaba desmotivar a los curiosos.

-¿Qué te hizo realmente?- la pregunta lo perturbo ¿Qué le hizo? Lo uso, se aprovechó de él y lo volvió un idiota. – dices que te torturo, pero la forma en que actúas...nose, realmente no logro entenderlo.

-no tenes que entenderlo Ken, tenes que darme lo que necesito- soltó presionando sus dientes juntos - y lo que necesito es encontrarlo.

Una sombra se movió cerca del sitio, pudo verla trasladarse delante de una vieja edificación que utilizaban como depósito. Su cuerpo vibro ante eso, no sabía como pero...lo sentía, era él.

-lo siento Pete, sé que no queres hablar de eso, solo...- la sombra se movió nuevamente, un leve brillo lo confundió ¿Estaba tratando de llamar su atención? Sintiéndose perdido dejo de oír a la persona al otro lado de la línea y comenzó a avanzar hacia el depósito.

-lo siento Ken, debo irme, después te llamo.

-pero, Pete...

Cortó el llamado y guardo el teléfono en su bolsillo, debía investigar. Estaba intrigado, una parte de él le decía que ese era V, pero su mente aún estaba confusa ¿Qué haría él ahí? Pete había sido claro, quería la cabeza del castaño y no pararía hasta obtenerla. Su superior le indico lo valioso que él era para su caso y como de importante era tomar al famoso Sumet preso político, pero recordar lo que había pasado entre ambos lo enervaba. V había abusado de él, aun si en algún momento él lo disfruto...eso estaba mal.

The rape (vegaspete)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora