Lazy sunday

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Sinopsis: Una de esas tardes donde parece que por más que lo intente, Ox no puede relajarse, sin si quiera entender qué lo perseguía. Buscará todas las alternativas disponibles, hasta finalmente aceptar una ayuda en específica. 

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Algo estaba mal. Algo no se sentía normal.

No podía completamente adivinar de qué podría tratarse. Solamente sabía que era un sentimiento que lo estuvo persiguiendo todo el día, y no lo ha dejado estar tranquilo, haciendo que cada hora de su domingo sea un total, aburrido y tortuoso silencio.

Intento distraerse con varias cosas, intento perder su mente entre sus pasatiempos favoritos y placeres que lograran hacerlo olvidar el extraño sentimiento por un momento: Durmió hasta largas horas de la mañana, cocino sus platos favoritos, leyó libros, investigo un tema que siempre le había llamado la atención, vio un par de series de entretenimiento, salió a caminar, inclusive se reunió con sus amigos para un ameno almuerzo. Bebió quizás una o dos copas de ponche, y volvió a caminar de regreso a su hogar cuando el almuerzo termino.

Pero aún tras todo lo que había realizado, no había podido ignorar por completo el sentimiento que lo atormentaba.

Simplemente no podía estar tranquilo. ¿¡Por qué!?

Siguió cuestionándose esta vez tirado en el sofá, únicamente viendo el techo. Ox resopló con cansancio. Más mental que físico. Una salida con sus amigos solía dejarlo pleno, pero esta vez, no había nada de sentimiento tras de todo. Había hecho sus cosas favoritas y se sintió feliz mientras las hacía, pero no podía olvidar que algo no se sentía correcto. Por más que tratara de ignorarlo, no se sentía presente en ninguna de las actividades que estaba realizando. Como si la pasión y el amor que tenía por todas las cosas y muñecos que los rodeaban, se había... Desvanecido.

El conejo resoplo girándose sobre el sofá. Volteando a ver al reloj de la sala que avanzaba con cada segundo. Aún era de tarde... Hizo tantas cosas, y el tiempo ni siquiera había avanzado tanto. Aún tenía toda la tarde del domingo para hacer... ¿Qué?

–Maldición... Odio esto ¿Qué sucede? –Se habló para sí mismo girándose boca abajo. Hasta le gustaría solo quedarse dormido, pero tampoco se sentía taaan cansado para dormirse.

Aun así, cierra su ojo, bloqueando todo el mundo de su vista. Podría mejor pretender que no existía... Podía pensar que solo era una hoja de otoño revoloteando en el aire, movida por las corrientes de viento y elevándose sobre el gran cielo celeste. Sí... Aquello era tranquilo...

Una alarma entonces suena arruinando toda su paz. Oh, geniaaal ¡Y ahora qué-!

Levanto su mirada para ver su teléfono vibrando sobre la mesa de la sala. Estiro su mano para agarrarlo, pero no era suficiente. Aghh... No quería levantarse.

–Vaamoos, ven a mi–Murmuro contra el sofá sin dejar de estirar su brazo hacia la pequeña mesa. Entonces viendo que era una batalla perdida, resopló resignado. –Ya qué... –Y se tiro de lado hasta suelo, donde rodo por los pocos centímetros de distancia hasta chocar contra la mesa, logrando que el teléfono se resbalara y cayera sobre su cara. –¡Ja! ¡Lo logre sin levantarme!

Aparta su celular del rostro para ver la notificación de Mandy: "Recuerda mañana nuestra reunión. ¡Deben estar terminadas todas las carpetas con nuestro papeleo!"

De la impresión, el alcalde se sienta de golpe–¡Es cierto! ¡La reunión de mañana! –Exclama inclinándose al frente para levantarse con algo de angustia, recordando que aún tenía trabajo pendiente que no había terminado y era PARA MAÑANA

US [Oneshots Oxlou]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora