Pietro o Bucky

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¡Hola a todos mis lectores! Cómo pueden ver en el título estamos en un dilema ¿Pietro o Bucky? Y no, no me refiero a que elijan que personaje es mejor, porque ambos lo son. De seguro pensaran: ¿Y a qué se refiere entonces? Pues bien, déjenme explicarles. Se me a ocurrido una idea genial (o eso espero) y está consiste de un pequeño juego (que podría tener más capitulo si así lo quieren, pero de momento comencemos con este) ¿De qué se trata el juego? ¡Fácil! Deberán adivinar que personaje protagoniza este One-shot ¿Pietro o Bucky? Espero sus comentarios, y porque creen que es el personaje que escogieron.

Me he dado de cuenta que solo tres personas votan en mis One-shots constantemente, y e hecho este juego precisamente para ellas (porque creo que todas son chicas, si me equivoco, lo siento😅) y no me malinterpreten, adoro que ustedes estén siempre al pendiente de mis actualizaciones, no importa la cantidad sino la calidad y ustedes: sienita24  Riggs1 y msmarvelous89 son mi calidad.

Por supuesto todos los demás lectores pueden participar, pero anunciaré el verdadero protagonista cuando estás tres personas hayan comentado.

¿Aceptan el reto?
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¿Alguna vez han sentido que todo está perdido? ¿Qué tienes un nudo en el estómago y no sabes que hacer? ¿Jamás has sentido que tu vida gira en torno a nada y que cada día que pasa es en vano?

Que no has avanzado

Yo si lo he sentido. Y es horrible. En realidad, lo estoy sintiendo.

Se siente como si viera al mundo evolucionar y yo me quedara estancada en un pasado inservible.

Quizás me sienta así porque literalmente estuve toda mi vida encerrada en la oscuridad de una pesadilla fantasmal que solo daña mi mente.

¿A qué me refiero? Pues a HIDRA.

No tengo nombre, identidad, nacionalidad o cualquiera de esas cosas. Se podría decir que soy libre. Libre de una sociedad corrompida por la venganza y la sed de poder.

Eso era el mundo para mí. Solo una cárcel que me impedía moverme a voluntad como la cápsula en la que reposa mi cuerpo todos los días, en la que me torturan como un conejillo de indias o una asquerosa rata de laboratorio.

Pero todo cambio cuando lo conocí, él me enseñó la luz que por tantos años me negaron ver. Él también tenías sus demonios, pero no lo culpo, yo viví mucho tiempo en la oscuridad, tanto que ya me sentía parte de ella.

A esta hora siempre había silencio en el cuarto en donde se encontraba la cápsula en la que reposaba, ya los científicos habían hecho todos los experimentos del día contigo y habían decidido pasar al siguiente.

Mi cuerpo dolía, como si hubieran insertado cientos de agujas en mí. Oh espera, si lo hicieron.

Escuché pasos acercarse, y lentamente abrí los ojos, a pesar de sentir como mis párpados pesaban hice el intento de ver quién se aproximaba.

Sus ojos azules me observaron como si su vida dependiera de ello ¿Que quería?

-Hoy es el idea- hablo lentamente.

Ladee la cabeza en señal de que no entendía a qué se refería, lastimosamente la mascarilla que le daba aire a mis pulmones me impedía hablar.

-Hoy escaparemos de aquí, te lo prometo- puso la palma de su mano en el pequeño vidrio de la cápsula, de dónde solo se podía ver mi rostro ser tapado a la mitad por aquella marcará de oxígeno que evitaba que me ahogara con el líquido verde que me envolvía.

Me quedé unos segundos mirando su mano en el vidrio, como si estuviese hipnotizada ¿Por qué me quería ayudar?

Apoye la palma de mi mano en el sólido material, justo en el mismo lugar en la que estaba la suya, conectándonos a través del cristal.

-Te voy a sacar de aquí- hablo lentamente como si temiera que no lo entendiera- ¿Estas lista?

Asentí.

Dio un paso para atrás y con su brazo izquierdo golpeo el recipiente, el impacto fue fuerte gracias a la fuerza que poseía pero aún así solo creo una grieta de dónde solo escapaban un hilo del asqueroso líquido.

-Esto será un reto- menciono para si mismo.

Por lo visto el hombre frente a mi no tomo en cuenta de que apenas golpeara la cápsula se activaría una alarma que volvió roja la habitación

-Mierda- se quejo tomando impulso para volver a estampar su puño contra la coraza.

Repitió su acción una y otra vez, sin mucho éxito, el material de la cápsula era realmente duro y lastimosamente su brazo no había sido revestido con el mismo material.

Negué en el momento en que su mirada desesperada choco con la mía, era como si estuviera a punto de perde el control.

-No voy a dejarte- sentenció y negué una vez más señalando a un punto de la pared en donde había una especie de espejo, allí se encontraban los controles- ¿Por qué no lo pensé antes?

Cerré los ojos cansada por el dolor que invadía cada célula de mi cuerpo. Escuché un estruendo cómo de vidrios rotos cayendo al suelo y seguido de eso la puerta de la cápsula se abrió haciendo que cayera al suelo en un sonido seco.

-Es hora de irnos- anuncio tomándome en sus brazos, abrió los ojos y arranque la máscara de mi rostro.

Hace mucho tiempo que no respiraba el verdadero oxígeno que proporcionaba la naturaleza.

-¿Por... Qué me... Ayudas?- pregunto entrecortadamente y con la voz ronca al tener la garganta seca.

-Te lo diré cuando salgamos de aquí ¿Puedes caminar?

-No- susurré, hace mucho que no caminaba y mis reflejos aún no reaccionaban del todo.

-¡Alto allí!- grito un guardia apareciendo de repente- ¿Con que aquí estabas?- apunto a mí salvador, el cual me dejó un momento en el suelo y derribo al sujeto de un golpe.

Mi vista se nublo tanto que deje de percibir lo que ocurría a mí alrededor, solo fui capaz de sentir sus músculos brazos alrededor de mi antes de desmayarme.

No sé cuanto tiempo paso pero cuando desperté estaba en un lugar desconocido siendo rodeada por muchas personas.

Pensé lo peor.

-Tranquila, estás a salvo- hablo un hombre rubio al darse cuenta de que recobre la consciencia- mi nombre es Steve Rogers y no voy a hacerte daño.

Lo observé de arriba a bajo. Él no era quien me salvó.

-Al fin despiertas, bella durmiente- bromeo otro hombre a su lado, no pude evitar mirar el círculo azul en su pecho, pero el tampoco era quien me ayudó a escapar.

Paseé mi mirada por todos los presentes, había seis hombres incluyendo a uno de piel roja y dos mujeres, pero no estaba él.

Una de las chicas salió rápido de la habitación, emocionada.

-Cumpli mi promesa- escuché a mi lado y al voltear lo vi- _______.

¿_______?

-Ese es tú nombre- dijo como si leyera mis pensamientos.

________. No sonaba tan mal.

-¿Y cuál es tu nombre?

-...
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Adivinen.

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