🐻🗡️

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Detrás de los grandes ventanales y los brillantes muros de hormigón blanco se podía ver los destrozos, las decoraciones echas pedazos en el piso y ciertos cristales igual de rotos.

Vegetta, Quackity y Luzu estaban en la puerta, era una situación de emergencia así que los dioses le habían dado el permiso para entrar, el problema ahora es quien lo haría.

Podrían ver a Vegetta devastado, mordiendo la punta de su pulgar mientras miraba la casa, solo podía pensar en Rubén y eso mismo nubla su razonamiento.

Luzu estaba molesto, tal vez consigo mismo o con la situación pero su rostro solo mostraba irá, frustración, sed de sangre.

Quackity por otro lado solo terminaba de comerse su manzana. Podrían pensar que no le importaba la situación pero la conocía muy bien, tenía una proximidad a los sentimientos de Rubén pero cada quien lo Lidia de diferente manera.

—Bien, aquí voy— Quackity dió un paso adelante cuando Vegetta lo detuvo.

—Que vas a hacer?.

—sacarlo de ahí, claramente— y sin más entró.

Cuidaba sus pasos para no lastimarse o terminar de romper algo, levantaba lo que podía y se acercó a dónde la mesa de madera se encontraba.

Podía verle ahí, sentado en una esquina con las botellas de vino vacías, una en su mano a medio terminar mientras susurraba cosas irreconocibles.

—Rubius— llamó su atención, el nombrado levantó la mirada, su mirada estaba desorientada, mirándole con asombro mientras que el menor se acercaba más.

—Quackity! Si vienes a ver a ti-titi no está, de seguro no tarda en llegar— las manos de Rubén temblaban, desviando la mirada de su contrario mientras se abrazaba a si mismo.

—Rubius, detente— Quackity tomó la botella, alejándola del mayor haciendo que el híbrido de oso se levantara— Titi no va a volver.

—joder, tu también?! Ya dejen de decir eso! El está bien y volverá a casa.

Quackity podía ver las garras de Rubius, conocía bien cuan violento podría ponerse la situación y estaba preparado, su hacha hacha estaba lista en su inventario para que en cualquier momento pueda usarla.

—Titi está muerto, Rubén, murió para salvarnos.

—él está vivo! Puedo escucharlo y volverá, volverá a casa conmigo— el mayor se acercaba más y más al menor, su cara era de enojo puro, mostrando sus colmillos cada que hablaba— volverá conmigo porque soy el único que le quiere, que si cuida de él!.

—enserio le querías? O te gustaba el hecho de que haría cualquier cosa por ti? Que solo una petición y era tuyo— Quackity sonrió— te gustaba tener un esclavo, Rubén.

—hijo de puta!— se abalanzó hacia el menor, tratando de atacarle mientras que soltaba un gran gruñido.

Podía escucharse los gritos de Vegetta y Luzu fuera de casa, por alguna razón ya no podían entrar al lugar y tenían por Quackity.

El menor saco su hacha del inventario, esquivando el ataque del oso agachándose y haciéndole tropezar con la parte sin filo del hacha.

El cuerpo de rubius choco contra el suelo, tan rápido como se puso boca arriba sintió el peso del menor encima suyo, sentado en su pecho mientras que el hacha amenazaba con cortar su cuello, el brillo morado del arma le sorprendía y las letras en dorado le llamaban la atención.

Axe of peace

—pero cómo es...

—posible? Ustedes los depredadores creen que siempre nos paralizaremos ante sus ataques— sintió el filo del hacha presionar contra su cuello— he lidiado con seres más grandes que tú, Rubius, no me asustas ni un poco.

La cara sería del mayor tranquilizaba a Quackity, dejo a un lado el hacha pero aún se mantenía encima de él, impidiendo que se moviera por completo.

—Es muy egoísta de tu parte hacer que Vegetta se preocupe de esa manera— Rubén desvío la vista— el también la está pasando mal y solo estás aquí, dándole más preocupaciones.

Podían verse las lágrimas amenazar con salir de los ojos de Rubén al igual que los golpeteos en los cristales de la casa con la voz apagada de Vegetta de fondo.

—esto es lo que haremos ahora— empezó a hablar Quackity— te dejare ir con una condición.

Rubius le miro atentamente.

—ve y quédate con ese hombre, necesitan tiempo juntos.

Esperó a que el oso le dijera que si, cuando se levantó vio a su contrario salir corriendo de la casa para poder encontrarás con el de ojos morados.

Ambos se abrazaban mientras se susurraban palabras de consuelo el uno al otro. Quackity salió del lugar, quedando junto a luzu quien me miraba sorprendido.

—cada día me sorprendes más, Quacks— dijo el castaño mientras rodeaba con su brazo el cuello del de beanie azul.

—no es la primera vez que tengo que lidiar  con padres alcohólicos y creo que no será la última.

Heeeeeey hola, que tal estamos, ya lloraron lo suficiente con el final? Yo no

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Heeeeeey hola, que tal estamos, ya lloraron lo suficiente con el final? Yo no.

Participaron en las nevadas quest? Yo lo intente pero alch nunca ganó nada así que meh.

Btw tenía que escribir sobre titi y es una excusa para poner interacciones de Quackity y schlatt en twt.

Mmmmm migajas

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Mmmmm migajas.

Dato de la roca: realmente este libro no es un luckity pero como todos lo guardaban en listas de luckity dije meh, si no puede con ellos, únete.

✧⁠*⁠。QuackBowl.⁠。⁠*⁠♡ [One-shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora