Los diarios de Elijah y Klaus Mikaelson (Klaus,Elijah y tú). Actualizada

18. Todo de vuelta

Narra Elijah:

Me levante más temprano que de costumbre ¿la razón?, hoy iríamos a hablar con Marcel, la verdad no sé qué le paso a Klaus ya que ellos eran muy buenos amigos o más que eso Marcel era un miembro de la familia Mikaelson y por alguna extraña razón había decidido apoderarse de la ciudad que nos pertenecía, baje y Silas ya estaba desayunando con Kol.

-Buenos días-dije tomando un pan tostado

-Buenos días-respondieron a coro

Terminamos de desayunar ya que nos teníamos que ir para ver a Marcel y conducir hasta New Orleans iba a ser algo cansado unas horas quizás, salimos de la casa y Silas abrió la puerta de piloto de su coche, Kol la de copiloto así que me tocó ir atrás. Mientras íbamos en camino Silas miraba atentamente el camino era muy cuidadoso que me sorprendió su paciencia para hacerlo, después de varias horas llegamos a la casa de Marcel, era grande pero ninguna se comparaba a la mansión Mikaelson. Salimos del coche y caminamos hacia la puerta Kol golpeo esta con la mano derecha y se escucharon unos pasos, esta se abrió dejándonos ver a Marcel quien sonreía con algo de sorpresa.

-Silas, Elijah y Kol que gusto me da verlos por aquí, pasen-se hizo a un lado y entramos

-Gracias Marcel-dijo Silas

-¿Quieren algo de tomar?

-Un bourbon-dije sonriendo

-Enseguida, y ¿a qué me debo su visita?-dijo sirviendo mi trago

-Venimos a hablar sobre respecto a Klaus-dijo Silas, pensé que no serían tan directo pero si lo fue, en ese momento me cuestione si había sido buena idea haberle pedido a Silas que nos ayudara, no conocía sus métodos de negociación y por lo visto no los usaba sutilmente, Kol también permanecía mirando a Silas de manera extraña como si no pudiera creer que Silas hubiera hablado de forma rápida.

-¿Es una broma?-dijo Marcel riendo, pero esa sonrisa se borro al ver la cara de Silas, era impresionante que no se había inmutado y solo seguía ahí con las misma expresión mirando a Marcel

-¿Te parece que estoy bromeando?-dijo Silas en tono tan neutral que logro hacer que me tensara y esperara lo peor, del otro lado de la calle se encontraba el bar de Marcel lleno de todos sus vampiros.

-No le voy a regresar nada, ni siquiera por haber mandado a uno de los brujos mas poderosos, esta es mi ciudad ahora y no me la quitaran-en ese momento sentí que todo estaba listo para una guerra, Silas no se había movido ni dicho nada, la tensión se podía sentir sabia que en cualquier momento uno de los dos atacaría solo era cuestión de predecir quien.

-¿Ni siquiera como regalo de bodas?-dijo Silas y Kol y yo nos quedamos sorprendidos y un tanto aliviados

-¿Se casara?-estaba sorprendido-Pero él no me querrá ahí

-Claro que si-dijo Kol-Cuando sepa de tu regalo, claro que estas invitado eres parte de la familia Mikaelson.

Y así Marcel acepto regresarle todo a Klaus e iría a la boda nos quedamos platicando en el bar hasta que tuvimos que irnos, conducir de vuelta seria largo esta vez fui yo el que condujo y Kol fue en el asiento de atrás.

-Te confieso que tuve demasiado miedo allá, pensé que Marcel se iba a lanzar conta ti-dije y Silas me miro con una sonrisa

-Yo pensé lo mismo, solo esperaba que no salieran sus vampiros del bar-dijo Kol asomando la cabeza por el espacio de los asientos

-Quería hacerlo decir todo lo que pensaba-dijo Silas, sabia a que se refería él podía entrar a las mentes de los demás y leerlas a voluntad, me preguntaba si alguna vez había entrado a la mía o a la de ______-Y solo dije lo de la boda para tranquilizarlo, sabia que estaba a punto de atacarme, así que decidí calmar las cosas-dijo viendo hacia el frente, asentí y seguimos hasta llegar a la mansión. Cuando entramos nos dimos cuenta de que estaban ahí comiendo.