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Entonces Taeyong sostiene la cintura de Ten y la levanta suavemente sobre la piscina. Ten, impulsado por la sensación de estar flotando, envuelve a Taeyong con ambas piernas y comienza a acariciar su cabello húmedo una y otra vez...

Después de lograr sentarlo en las escaleras, Taeyong finalmente puso sus labios contra los suyos para comenzar a chupar y a succionar. Era de los que decía "Ten" "Ten" entre cada beso y también de los que no dejaba de expresar cuánto lo amaba con una típica y lenta voz dulce. Ten levantó los ojos borrosos por el calor y comenzó a mirarlo: la cara de Taeyong llena de agua, era de verdad hermosa. Su cabello dorado fluía por lo largo de su nariz afilada, haciendo una atmósfera más que sensual alrededor de él.

Ten perdió la cabeza casi de inmediato y comenzó a hacer un beso un poco más codicioso que al inicio. Mezclando su saliva con la suya hasta hacerla derramar finalmente por su barbilla...

De repente, solo se separó y dijo:

—Estás arrepentido de haberte enlazado conmigo... ¿No es así?

Pronto, sin embargo, Ten pareció comenzar a arrepentirse de haber preguntado algo como eso. Aunque no parecía que ese fuera el caso, su corazón se sentía terriblemente pesado todo el tiempo. Quizá era debido a que la conversación con el abuelo de Taeyong le había hecho acumular mucha presión alrededor del pecho o quizá era solo porque estaba nervioso, pero en realidad ahora no puede elegir sus siguientes palabras aunque ya las había ensayado antes. Además, lo había pensado: ¿No se enlazaron debido a la situación urgente de Dongwan? Después de eso y como esta el asunto de que ambos tenían un niño, casarse fue lo más natural.

Él quería hacerlo, pero cuando miraba hacia atrás, se impresionaba de lo mucho que esto parecía algo de "Lo hicimos porque no se podía evitar".

—Vaya, ¿Por qué pensaste eso?

Taeyong lo agarró de la muñeca y preguntó esto en una voz muy baja. Tenía una expresión dura, completamente diferente de la de hace unos segundos. Ten suspiró.

—... Cuando lo pienso, parece que nos enlazamos para salvar algo ¿me entiendes? Y si es así, y si tu abuelo sabe tanto como parece, entonces es normal que no confíe en lo nuestro.

La frente de Taeyong estaba toda arrugada mientras Ten le confesaba sus preocupaciones con una cara bastante amarga. Dijo que no, varias veces...

—Ten, ¿No te lo dije antes? —la voz apagada se extendió peligrosamente sobre el agua.— Si hubiera conocido que eres un Omega, te hubiese enlazado a mí de inmediato.

Silencio.

—Yo te amo, Ten. Incluso aunque creía que eras un beta. —Taeyong susurró, con los labios húmedos ahora sobre los de Ten.— Pensaba ¿Y qué tiene si no es un omega? Beta y todo, te hubiese sostenido hasta que perdieras la cabeza. Te hubiera dado tantas feromonas como para hacerte explotar y luego, de alguna manera, encontraría la forma de marcarte. Omega o beta, ya no tenías escapatoria de mí...

Taeyong se confesó, con una cara demasiado sombría para su gusto. Sin embargo, al contrario de eso y de lo que estaba diciendo, su voz era amable... Tan tierna que ni siquiera notabas que tenía oscuridad.

—Lo que mi abuelo preguntó, lo que dijo... Fue porque cree conocerme bien y no piensa que sea del tipo de hombre que va en serio con alguien.

—Seguramente no eras de esos.

—No, no realmente... pero tú me hiciste cambiar. De alguna manera, eso es lo que quiero que vea.

Ten, quien enfrenta la sonrisa brillante de su esposo, no sabe que responder ante esta nueva información. Era dulce, la forma en la que se veía y como le hablaba, siempre era terriblemente dulce. ¿Y qué haces cuándo alguien te está tratando así de bien?

love, sunoo│𝘁𝗮𝗲𝘁𝗲𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora