Distancias Peligrosas

Gran comienzo de clases

Jugamos durante un rato pero luego Nahia me dijo que estaba cansada así que decidimos volver a Tagus.

Conclusiones de esa noche:
Aleix me caía bastante bien, se notaba que era un chico al que le gustaba la fiesta y quería averiguar con quien se había metido en aquella habitación después de hablar conmigo.
Aegan simplemente era un completo idiota que se creía con derecho a manejarlo absolutamente todo.
Y Adrik... bueno, por ahora sólo me parecía un microondas con piernas.

Al día siguiente me desperté temprano, era el primer día de clases así que tenia que llegar puntual para aparentar formalidad.
Me duché, me vestí y me arreglé el pelo lo mejor posible antes de salir rápidamente para buscar el aula donde tenía la primera clase: Literatura.
Una vez estuve allí sentada vi que había más gente de la que hubiera esperado, muchos estaban comentando todo lo que habían hecho en la fiesta, otros incluso llevaban puestas unas gafas de sol supongo que para intentar dormirse un ratito sin que nadie se dé cuenta.

—Bueno, espero que pongáis de vuestra parte, seáis estudiosos y sobretodo que hagáis bien las tareas que os mande para llevar esta asignatura de la mejor forma posible. —Dijo la profesora paseando la mirada entre todos los alumnos presentes.

Y antes de que pudiera continuar con lo que parecía un discurso, alguien abrió la puerta llegando con casi diez minutos de retraso.
Todos giraron la cabeza para ver de quién se trataba y allí estaba: Adrik cara de somnoliento Cash.

Se acomodó la mochila que llevaba colgada de un hombro y pasó entre la gente para ir a sentarse.
Adivináis donde? pues sí, justo en el asiento vacío que había a mi lado, porque mi intención era sentarme sola para concentrarme más.
Dejó caer su culo contra la silla y la mochila en el suelo mientras miraba al frente.

—Vaya señorito Cash, justo a tiempo, ahora mismo iba a decir cuál es el primer trabajo que tendréis que hacer. —Soltó la profesora con un especial entusiasmo que no le había notado unos minutos atrás.

—Genial. —Se limitó a decir Adrik mirándola con indiferencia.

—Está bien, por parejas tendréis que elegir un libro que os guste y poneros de acuerdo para recrear un fragmento de ese libro, podréis practicarlo y en unos días deberéis representarlo aquí, delante de todos.

Vale, no es que yo fuera una persona tímida, pero interpretar a algún personaje delante de toda esa gente no me hacia una especial ilusión. En fin, qué remedio.

—Lo hacemos juntos?

—Qué?! —Creo que me quedé pálida al escucharlo, porque Adrik levantó un poco la comisura derecha en lo que parecía una sonrisa para burlarse de mí.

—Que si hacemos esto juntos. —Señaló a la profesora y me miró. —Lo que acaba de explicar.

—Ah si, sí, claro, no creo que haya inconveniente tampoco conozco a nadie más de esta clase. —Murmuré rápido antes de aclarar mi garganta.

—Bien. —Asintió él volviendo a mirar al frente.

La profesora estuvo hablando durante el resto de la clase de cómo iba a ser la dinámica de esa asignatura y repartiéndonos algunos papeles informativos.
Al terminar Adrik se levantó colgándose su mochila de nuevo en el hombro.

—Me gusta mucho leer, no sé tú pero yo tengo bastantes libros así que lo haremos esta tarde en mi apartamento. —Dicho eso, esquivó a la gente que se estaba levantando de sus asientos y salió del aula rápidamente.