Querido diario:
Hoy inicie el día como cualquier otro, la alarma sonó y como siempre la ignore, pero debido a la insistencia de la pequeña y escandalosa bocina finalmente abrí los ojos, quite las sábanas de mi cuerpo, básicamente rodé al borde de la cama baje mis piernas e incorpore el resto de mi cuerpo para quedar sentada; ¡Dios mío! enserio no quería levantarme, nunca quiero hacerlo, pero hoy me sentía completamente derrotada... PERO esas deudas no se pagarán solas ¿o sí?Me levante, acomode mis lentes frente a mis ojos e hice mi rutina diaria, ya sabes, baño de 5 minutos (pero sin lavarme el cabello esta vez), cremas para la cara, bloqueador solar para que mi piel no se ponga roja, lavarme los dientes, un poco de maquillaje, blah blah blah.
Hace más de una semana que la psicóloga me recomendó llevar esta rutina de cuidado personal y este diario virtual para "llevar el control de mi vida", ayer me pidió que fuera más específica con lo que escribía. Honestamente no entiendo como esto va a ayudarme, pero ella es la experta y haré lo que me diga; excepto una cosa, me sugirió usar ropa más colorida... Hermana eso no va a pasar, solo me gustan tres colores, el rojo, el negro y el blanco, aunque dos no son colores como tal; además mi ropa no tiene nada de malo, me encargo de personalizarla yo misma en mi tiempo libre o cuando estoy aburrida, encontré un pasatiempo en rediseñar mis prendas.
Y como hoy era un día algo nublado me puse unos jeans negros de tiro medio con la silueta de una serpiente en la pierna izquierda, una blusa estampada que llegaba un poco más abajo del borde del pantalón, vaya, que si levanto los brazos deja ver mi abdomen, lo complemente con una camisa de franela y sobre esta me puse una chamarra de mezclilla que teñí de negro y pinte el logo de Hellfire en la parte de atrás (también tiene parches y pines por todos lados), finalmente me puse unos botines con un poco de tacón porque me acompleja mi estatura... Solo diré, que soy más alta que Lady Gaga. Me mire en el espejo, me gustaba como me veía; para finalizar me puse anillos, collar, las pulseras de siempre, un cinturón de estoperoles y una cadena ¿Debería dejar de colgarme tantas cosas? Pasé mis manos por mi dorado (teñido) cabello para peinarlo un poco y en ese momento me arrepentí de no lavarlo, disimulé mi flojera poniéndome un gorrito gris que no cubría del frío, solo era un adorno.Baje a la cocina y unte mermelada en un par de panes haciendo un sándwich improvisado por la prisa. Acomode mis cosas en la mochila mientras sostenía el sándwich en mi boca.
Estaba completamente lista para salir; me colgué la mochila, me coloque los audífonos, tome mis llaves y salí de casa con prisa, tarde como siempre, pero sin sueño ni hambre jeje... Afortunadamente el autobús pasó rápido y es desde ahí donde estoy escribiendo todo esto.* * *
La alarma de esta cosa me recordó que debo escribir.
Pues, cuando llegue y abrí la tienda inicie mis actividades normales de limpieza, pero hoy me tomé mi tiempo sacudiendo el polvo de todo, no quiero que estas antigüedades se vean más viejas de lo que son, incluso las cosas más pequeñas, aunque esas están dentro de una vitrina.
El olor a humedad es más fuerte estos días. Cada verano es lluvioso en esta ciudad y el edificio en el que trabajo se encuentra en el centro, donde están los edificios más viejos y decadentes, parece que la humedad se cuela por las paredes ese olor se mezcla con el de los muebles y libros antiguos. Lo único que hago para disfrazar esa peste a cosas viejas es prender incienso, así puedo mantener la atmósfera del lugar sin ese aroma a casa abandonada.
Todo es viejo aquí, poco a poco siento que el lugar empieza a consumirme y que pronto me convertiré en uno más de los crujientes muebles, de los amarillentos libros, de los opacos utensilios de metal o en uno más de los horrendos cuadros en la manchada pared, esas manchas que tratan de disimular con capas y capas de pintura, más que tienda de antigüedades parece bodega de acumuladores extremos pero trato que todo se vea ordenado de alguna manera, cada cosa tiene su lugar y existe un espacio para todo, incluso para mí, ya sea en esta tienda o en otro lado.
Después de todas mis actividades de limpieza y quejas diarias no tengo más que hacer, me mantengo ocupada viendo series, escuchando música, leyendo o en redes sociales, no viene mucha gente por aquí y los que entran creen que es un museo, dan unas vueltas y se van, muchas veces los ignoro, solo los sigo con la vista hasta que se van, para asegurarme que no se lleven nada o si mueven algo dejarlo en su lugar.
ESTÁS LEYENDO
Yo te diré (En Edición)
AcakSiempre creí en la suerte y el destino pero nunca pensé que estuvieran de mi lado, digo vida no era mala pero quería algo más y cuando la oportunidad estuvo ante mi tuve que tomarla. Ahora trabajo para una de las series más famosas del momento St...