Chatnoir En Acción

Amok, parte 4

Adrien nuevamente estaba en la salida de la escuela, allí Melanie se le acercó para recordarle el itinerario que tenía el rubio el día de hoy, si bien era un enorme fastidio para el, pero era algo que tenía que hacer si quería que su padre le diera permiso de pasar un rato con sus amigos. Ambos se fueron hacia la limusina hasta que Adrien nota a Lila a un par de metros de ellos.

-¡Lila! -le llamo Adrien llamando la atención de la mencionada -¿Quieres que te llevemos? -le ofreció Adrien de forma amable.

Lila por un momento vio a Adrien hasta que desvía la mirada hacia Melanie quien le guiño un ojo a esta.

-Eh... no Adrien, pero gracias -le agradeció Lila algo sonrojada pero casi de pronto comenzó a llover.

-¿Estás segura? -le volvió a preguntar Adrien mientras que el resto de los alumnos se apresuraban para llegar a sus moradas.

-Si... la lluvia no parece tan intensa -le respondió Lila hasta que de pronto comenzó a intensificarse.

Lila sin más de otra, acepto el aventón que Adrien le ofreció, ella estaba en medio de Adrien y Melanie, y mientras que el rubio estaba platicando con Nino por chat, Melanie estaba sentada mirando fijamente a Lila con una mirada profundamente seductora mientras que la castaña trataba de no mostrarse sonrojada, cosa la cual era increíblemente difícil con la mirada de Melanie.

-De acuerdo... -dijo Adrien para acto seguido colgar la llamada y guardar su teléfono -Melanie, ¿Te dijeron algo sobre el itinerario? -le pregunto el rubio girandose hacia su secretaria la cual rápidamente quita su mirada seductora y la cambia a una más serie mientras revisaba el itinerario.

-Varias de tus actividades son al aire libre, así que lo más probable es que las cancelen, pero no sabemos eso con mucha exactitud, por lo que me comunicaré para ver si se posponen o si hay una alternativa -le respondió Melanie.

-Esta bien, supongo que tenemos tiempo para dejar a Lila a su casa, ¿No? -le comento Adrien.

-De que tendremos tiempo lo vamos a tener -le confirmo Melanie.

Lila por unos instantes se sintió aliviada de que al fin se iba a librar de la secretaria de Adrien, por lo que ella decide esperar pacientemente para llegar a su morada e adentrarse en su habitación para ahogar sus incesantes gritos con una almohada.

Pasaron unos cuantos minutos hasta que la limusina se detuvo en un semáforo, cosa la cual molesto un poco al guardaespaldas quien iba conduciendo, pero este mantuvo la compositora y se mantuvo inexpresivo. Sin embargo, esto no era lo mismo para Lila, ella estaba roja a más no poder ya que Melanie estaba seduciendo nuevamente a la castaña, sin embargo, los coqueteos de esta terminarían cuando un muy leve temblor ocurre, algo que sorprendió a los presentes.

Todos en la limusina estaban por restarle importancia hasta que sucede nuevamente pero esta vez con un poco más de fuerza, cosa la cual preocupo más a los presentes, pero en especial al guardaespaldas, por lo que este mira por su retrovisor izquierdo, viendo así que no había nada, por lo que este se va hacia el retrovisor derecho encontrándose con lo que parecía ser una pareja acercándose en moto hasta que en unos instantes llega hacia la limusina.

-¡HÁGANSE A UN LADO! -grito el conductor bastante alterado.

El guardaespaldas se extraño por eso hasta que el pequeño temblor se vuelve a presentar, por lo que este se regresa al espejo retrovisor viendo así como algunas personas salían de sus vehículos mientras que la criatura de hace días corría entre ambos carriles haciendo a un lado cualquier vehículo que no fuera de su interés.

El guardaespaldas rápidamente baja de vehículo y va hacia la puerta de Adrien la cual abre rápidamente al rubio de manera un poco brusca para acto seguido dirigirse hacia la otra puerta y sacar ambas chicas de la limusina.