IV

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-¿De verdad tienes que irte?- dijo Minho mientras sostenía la mano del contrario- Lamento mucho lo que mi padre dijo esta tarde, todo lo que pasó, es culpa mía por creer que esta vez me escucharía, no debí exponerte a todo esto, podemos intentarlo mañana nuevamente, y así todos los días hasta que nos de una oportunidad-
El otro quien tenía la mirada gacha, alzó sus ojos encontrándose con los de Minho.
-No es tu culpa Min, nada de esto es tu culpa- dijo mientras intentaba ocultar las lágrimas que comenzaban a salir.
A pesar de la poca luz que había en aquel lugar, Minho pudo ver aquellas lágrimas que recorrían las mejillas del contrario, tomó pues sus manos pocisionándolas en ellas, para limpiar todo rastro de tristeza.-En mi interior sabía que no funcionaría, y aun así me arriesgué-
-Entonces déjame ir contigo Jungwoo, no quiero dejarte solo-
-No Min, tu hermana te necesita, va a casarse, no puedes perderte su momento especial, ¿sabes lo mucho que ella te ama?-

-¿Y entonces en donde quedamos nosotros?- dijo Minho con la voz entrecortada-
-Mientras vivas aferrado a la aprobación de tu padre, un nosotros dejará de ser contado- habló Jungwoo dejando escapar lágrima tras lágrima.
-Jungwoo, podemos estar bien, puedo volver contigo a la ciudad, y dejar todo esto atrás, mi hermana lo entenderá, y más tarde intentar convencer a mi padre, por favor- acercó al rostro del pelinegro, tomándolo en sus manos
Jungwoo negó sin dejar de llorar.
-No Minho, no hagas esto más difícil, aunque quisiera hacerlo, tu no me amas, jamás lo has dicho, dudo que algún día lo hagas, y eso es lo que más me duele-

-Se que lo haré, dame tiempo para demostrarte que puedo devolverte todo lo que me has dado, me aterra estar sin ti-

-Solo te aterra la idea de que deje de amarte-

Retiró las manos de Minho de su rostro, para tomar el suyo, acercó una vez más sus caras, sintiendo la respiración del contrario, besando sus labios por última vez.
-Espero que algún día puedas amar de verdad, así como te amo, y dejes de buscar la aprobación de quien hace mucho tiempo dejó de estar para ti-

Se fue en el carro que había traído desde la ciudad, en donde vivió con Minho por 4 años, dejando atrás a su primer amor.

Minho quedó devastado, en aquel Manantial sin creer que todo lo que había construido durante tanto tiempo, en cuestión de horas se derrumbó. Le dolía el hecho de que a pesar de todo Jungwoo tenía razón, ¿y que más podía hacer?
Se limitó a llorar en silencio incluso si estaba solo, no quería que el Manantial se preocupara por el, y dejara de llenar su estanque, para llenar su corazón que se encontraba vacío. Si no podía amar a Jungwoo, ¿cómo le demostraba a su padre su idea del amor? Siguió lamentándose por tener un corazón incapaz de devolver amor, a quien le entregó hasta su alma.

Pronto dejó de llorar, y encontró paz en el sonido de la noche, a pesar de ser oscura, la luna lo acompañaba, dándole un brillo de esperanza. Tal vez mañana ame por primera vez.

>Cortito pero honesto, ya que quería darle un poco de desarrollo al personaje, para que se pueda entender la historia más adelante<☆

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