Una Verdad

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Llegaba la hora para que iniciara la ceremonia, iban entrando la población para tomar asiento en el coliseo, la vista de él era asombrosa, en el centro se apreciaba un gran espacio en forma circular, en donde el suelo es hierba cortada perfectamente, con una decoración adecuada para la ceremonia, las gradas eran de mármol blanco y los pasillos contaban con algunas plantas muy bien conservadas.

Mientras iban pasando, los guardias no descansaban, había personas peleándose por lugares más cercanos al centro, por lo que trataban de mantener una calma, Jared solo veía desde lejos para poder ver todo el ambiente y no hubiera peligro alguno.

- Comandante, no está muy alejada de los otros, ¿Qué espera hacer aquí?- se acercó un lobisón por detrás cuestionando a Jared.

- Cierra el hocico, no cuestiones mi trabajo cuando tú no haces nada.

- ¿Abastecer al reino es no hacer nada?

- Trabajas de algo diferente, por lo que no me puedes cuestionar.

- Me agradaría decirte lo mismo, pero te ofendes- Jared solo se marchó de donde estaba para acabar la conversación, aún tenían que esperar 1 hora más.

Julissa salió de la habitación para caminar un rato sola, Mateo se quedaría con la bebé entonces tendría 1 hora para estar andando en los pasillos, esperaba que Mateo no se comportara así en la ceremonia, no quería pensar mal sobre la familia de su esposo, pero sospechaba algo de Rania, cuando la conoció de niña podía ver qué pasaba algo por su mente, también sabía que las raíces de su familia eran de brujos; Rania era tan... ¿deprimente?

- Su majestad – Julissa volteo para ver a Jared que iba caminando apresuradamente- Dentro de poco empezara la ceremonia.

- Jared, cariño- Julissa la agarró del brazo para que se acercara a ella, Jared no reacciono al instante hasta que se dio cuenta que estaba bastante pegada al cuerpo de la reina; trato de zafarse, pero la fuerza de Julissa era mucho mayor, siguieron caminando siendo agarrada por ella.

- Su majestad en 20 minutos empezara la ceremonia tenemos que dirigirnos al complejo.

- Aún queda un poco de tiempo, caminemos un rato más – las dos se mantuvieron juntas todo el trayecto, se quedaron en silencio y que cada quien pudiera estar en sus pensamientos, Julissa se encontraba más tranquila al estar con una amiga.

- Majestad...

- Soy Julissa, Jared.

- Julissa, porque te encuentras sin tu esposo – se pararon en una ventana, y observaron lo que ocurría afuera; un montón de gente formada para poder entrar al coliseo – supongo que se atrasara un poco más la ceremonia, son bastantes personas que quieren ver la coronación – vio la cara de su compañera la cual se notaba distraída.

- Vez, aún tenemos tiempo – sonrió de repentinamente jalando a Jared para seguir adelante – cuéntame, fue complicada la organización de la ceremonia.

- No tanto, a pesar de que la princesa Rania pidió muchas cosas para que se celebrara la coronación, no eran cosas difíciles de conseguir y ordenar.

- Rania siempre ha sido muy voluble y obstinada para lo que ella hace, todo es para no fallar, ¿verdad? – Jared la mira seria.

- No es adecuado hablar cosas de una persona a sus espaldas.

- No es algo malo lo que digo, ella realmente será una buena reina – claramente Julissa no lo decía para criticar, nunca haría tal cosa, reconocía la responsabilidad que tenía Rania, solo que le preocupaba su persona – Si no llegas a ser feliz en un momento de tu vida tendrás todo, pero a la vez lo perder cosas.

Edén MaravillosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora