Instintos en el coqueteo [Hyunlix]

Bello de cualquier forma

Estar nervioso se quedaba corto para lo que Hyunjin sentía; sus manos sudaban, sus piernas temblaban y lo único que podía pensar era en la lista de "métodos de coqueteo" que le había obligado a anotar su padre. Esta consistía en una pequeña hoja que arranco de su libreta en la cual había seis consejos que el señor Hwang le había dictado.

[Tácticas de coqueteo]

□ Mostrar interés.

□ Hacerle reír.

□ Dar pequeños cumplidos que le hagan sentir bien y único.

□ Charlar mientras caminan juntos y si se puede y da la oportunidad tomarse de las manos.

□ Tener contacto físico (si a esa persona le gusta)

□ Hacer pequeños detalles que le alegren el día.

Si esos consejos no le ayudaban, nada lo haría, ¿qué esperaban? Confía plenamente en su padre y en sus habilidades de "romeo".

Si no piensan que es bueno, ¿de donde creen que nació él? Aunque bueno, su madre los había dejado apenas Hyunjin cumplio los cinco años. Pero eso no quita el hecho de que todo el tiempo tuviera chicas a su alrededor. Su padre era todo un casanova, sabía lo que era necesario para conquistar a alguien.

Parecieran cosas insignificantes, pero regularmente servían. Se dice que cuando una persona ve interés en ti, poco a poco empieza a sentir atracción y no solo físicamente. Muchos llegan a pensar que es totalmente al revés, que solo se tiene que demostrar que se pueden conseguir a cualquiera si no es con él, en este caso, Hyunjin no veía a Felix como ese tipo de persona, así que prefería seguir los consejos de su padre.

~♡~

Llego a la escuela y checo por última vez la lista, tenía que armar un plan para que todo saliera bien, si usaba solo sus "instintos" no podría formular ni un siempre hola.

Todo estaba sumamente planeado.

Empezarían a trabajar en su proyecto, diría uno que otro chiste y poco a poco se acostumbraría al humor del pecoso. No sabía como este podría reaccionar al doble sentido o el humor negro, era mejor ir de a poco.

Los típicos chistes de pepito no eran la opción, estos podian ser muy aburridos; tenía que ser algo más creativo, hablar sobre algún chisme de la escuela—sin dañar la reputación de nadie, ni meterse en temas delicados—sacar temas sobre personas en común y si veía buenas señales de parte del contrario seguiría con esa conversación sacando uno que otro chiste sobre el tema.