-Rodrigo o mejor conocido como Carrera por sus amigos y vecinos de la isla verde, es un joven explorador, bastante amigable con cualquiera a su alrededor, alguien muy simple a sus ojos. Tal chico tenía sus ojos en una damisela de su isla la cual hab...
Me desperté en medio de la noche de mi último díade exploración, me estaba hospedando en un pueblo lejano que encontré en mi camino, sin duda eran un amor de persona sus habitantes.
Solo desperté para acomodar mis cosas y irme de ahí temprano, no quería pero axozer no paro de mandarme tanto notas por medio de pájaros como casi explotar mi teléfono, lo único que me decía era "regresa", "hijo de puta ya me cansé de aguantarlos", "si no regresas iré a buscarte yo mismo" entre muchas más cosas que no conteste, no es que no quisiera simplemente olvide mi cargador.
–¿Ya te vas señor carre?–Hablo una chica si no mal recuerdo llamada Valentina, fue alguien súper linda conmigo sin duda quizás venga de ves en cuando por aquí de nuevo, ella estaba ahí para poder darle la medicina a su padre por lo que me contó y descubrí cuando quería ir al baño, de lo más normal conocer a un extrañó y le cuentas tus problemas.
–Claro, tengo algunos asuntos especiales hoy pero de igual manera gracias por la hospitalidad–Termine pagando la noche que pase ahí–Dios solo te pedí una chica linda no pretendientes.
Juan también me estuvo mandando mensajes el primer día preocupándose bastante por mi, Ari solo me mandó mensaje para saber si estaba bien y si necesitaba algo la llamara.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Llegue a mi pueblo y juro que en el momento que puse un pie ahí ya tenía a axozer encima mío abrazándome agradeciendo a los Dioses porque estuviera ahí.
–¿A ti que te pico?–Hable viendolo a los ojos notando que este mostraba alivio y como si no hubiera dormido en días.
–Carrera gracias a los Dioses que estás aquí, te juro que ya no aguantaba la insistencia de Juan al saber dónde estabas para hablar contigo, ni aguantar cada 5 minutos que Ari cuando se acordaba de ti viniera a preguntar si ya venías y peor aún el señor del otro pueblo que es como un oso muy temido quisiera saber tu ubicación para tener charla de negocios.
No sabía que responder a eso solo le pedí disculpas por aguantar eso y le expliqué todo lo que pasó en mis días de exploración, claro, no le hablaría de lo que encontré en todo esto. Conversé con el solo un rato ya que debía ir con su padre y yo necesitaba ir a guardar las cosas que tenía antes que alguien chistosito intentara estafarme o robarme.
–Bueno finalmente en casa–Abrí la puerta de mi casa y antes de entrar alguien me empujó adentro cerrando la entrada de esto, mi alma se salió en esos momentos, estaba desprotegido y sin espada–¡Te doy lo que quieras! ¡mi virginidad o dinero solo no me mates!