Indignación

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Cuando llegaron al departamento del a ojiverde, este ya se encontraba limpio. Era de noche por lo que Lex sacó pecho de su hombría para querer llevar al dúo latina a sus hogares, alegando que debía hacerse responsable de las damiselas en peligro, obvio que con este comentario el hombre se ganó unos golpes de parte de Sam y Lena. La castaña, Samantha, había tomado una pose de diva, demandando un "¡Ardientes Latina!" lo que comenzó con una pelea infantil, Lena cansado del ruido ya que había tenido un día con muchas emociones y de la forma más sutil, votó al trío de su departamento.


A regaña dientes las latinas aceptaron a que Lex fuera el que las llevara a su departamento. Samantha estaba imperativa por todo el alcohol que había consumido, por lo que se encontraba en el asiento de atrás, quejándose en todo el camino porque quería 'su noche de chicas' aprovechando que Ruby estaba en casa de su abuela. Luego de unos golpes (para nada discretos) por parte de Andrea, Samantha se tranquilizó, la argentina le prometió que tendría sus noches de chicas, pero entre ellas, adulando un 'dale un respiro a Lena, que ya está cansada de aguantarte todo el día'.


Lena apoyó su frente en la puerta, suspirando exhausta por el cansancio mental, al menos ahora solo le tocaba enfrentarse al dúo kriptoniano que se encuentra en su sala, no creía estar lista, pero debía hacerlo. Parada derecho hizo su camino hacia su ultimo reto de esta noche, mentalizándose 'eres Lena Luthor, joven empresaria y científica que se enfrenta todos los días a cosas peores como hombres machistas, personas que odian tu apellido, lidias con el infantil de Lex, la tensión de las latinas, a la juventud retrasada de Lillian y a la prensa amarillista...' musitando de camino hacia su mini bar en busca algo fuerte para darse más valor.


"¿Qué es prensa amarillista...?" Lena no pudo ocultar el gritillo de susto, tirando el vaso en el proceso, en su defensa, jamás sintió la presencia de la otra mujer y es que eran tan cautelosas que si se lo propusieran podrían matarla sin que se enterara. Sin embargo, el vaso nunca tocó el suelo ya que la rubia se había movido con una elegante velocidad para atraparlo. "Lo siento, no pensé que ibas asustarte" colocó el objeto en la mano de la ojiverde, Lena parpadeó cuando se dio cuenta que había mirado más de lo que se consideraba 'normal'


Lena se apresuró a tomar el contenido de su vaso con nerviosismo, tomando distancia de la rubia. "No hay problema" apresuró a calmar.


"Lo que pasa es que..." Kara se rascó la cabeza tratando de encontrar las palabras adecuadas "creo que también debemos irnos" sonrió apenada.


La ojiverde la miró con inquietud "¿Irse?" su voz se debilitó, la rubia le respondió con una sonrisa, Lena quiera o no debía aceptarlo y sabía que ese momento debía llegar, curvó sus labios obligándose a sonreír "está bien... ¿Puedo despedirme de Lara?" aunque no quiso, miró suplicante a la rubia.


Kara la miró con el ceño fruncido, la kriptoniana le costaba entender sobre las emociones de los humanos, la agente Danvers se lo explicó varias veces, pero al final se rindió. Y ahora, sentía que algo no estaba bien en la humana "No.." el rostro abatido de Lena la miró "digo... ¿te importaría si Lara se queda contigo?" sonríe apena Kara "es que ella insiste en quedarse, aunque le dije que debías descansar"


"¡Si, claro!" la respuesta de Lena es apresurada, sonriendo incrédula, no esperaba aquella petición, en su mente se preparaba para ser fuerte frente a la niña y no derrumbarse "digo, me encantaría tenerla conmigo" no sabía porque, pero la rubia era un imán para su mirada, en toda su vida había visto iris de diferentes colores, pero aquellos, eran unos azules indescriptibles, jodidamente hermosos e hipnotizante. No ayudaba a que Kara se quedara callada permitiendo que Lena estudiara su rostro.

Between the starDonde viven las historias. Descúbrelo ahora