-¿Yo contigo? ¿Nosotros?, te equivocas-. Dije seria.-Creo que ese tal "nosotros" se acabo cuando te estabas besando con Sophia.
-...-. Antes de escuchar alguna respuesta, un suspiro apagado se abrió paso, dándome a entender lamentación de su parte, o por lo menos eso creo.-Maya...yo lo siento-. Dijo con preocupación.- Yo...
-No, soy yo la que lo siente-. Dije antes de que el pudiera terminar lo que iba a decir.- Adiós, Samuel-. Colgué.
Toda la noche me la dedique a llorar y sentirme mal. No solo conmigo, si no con el. Tenia toda la noche para mi, para desahogarme, para sufrir sin que nadie me escuchara. En cambio mañana me darán de alta, eso significa que mama no me dejara estar tranquila ni un segundo.
Me quede dormida a las 5 am, 5:23 exactamente.
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Desperté gracias a mama que había llegado con la asquerosa comida de una clínica.
Solo falta que viniera el doctor a revisar mi pierna, y luego me iré.
Eran las 9:02 cuando el Dr paso por la puerta.
Me ayudo a levantarme y me dio las muletas, no se me hizo tan difícil caminar con ellas, así que toda estaba bien.
Mama había recogido ya todas mis cosas, estábamos listas para irnos. Caminaba por el pasillo hacia el ascensor. Cuando llego me subí sin visualizar a quien estaba en mi alrededor.
-Maya, hola; ¿Como estas?, supe lo de tu accidente, es mas, todo el mundo lo sabe-. Escuche la voz chillona de Sophia a mis espaldas, me dio me voltee para mirarle la cara.
-Hola Sophia, si ya estoy bien-. Esto era perfecto, aparte de encontrarme a la odiosa de Sophia, si no que también descubrir que todo el mundo sabia esto, como iba a ir al instituto asi? Sera para que me coman viva, "La inocente invalida, sufrida porque su mejor amigo ya no la trata" y si no es así, me van a tratar como con pena. Odio eso.
La puerta de ascensor se abrió de par en par, y no hubo otra palabra en mi boca que decirle "Chao" y salir en camino a la puerta que da hacia el estacionamiento.
Nos montamos en el auto y mama empezó a conducir hacia la casa.
Mañana volvería a estudiar y ir al instituto, perdí 4 días de clases, y ya no puedo seguir en ese relajo, no no.
Mi corazón se partió en pedazos cuando pasamos en frente a casa de Samuel, vi con desesperación como mama daba la vuelta hacia ella.- "No, no, no" -pensé antes de que ella dijera "Vamos un momento a casa de Samu".
Era obvio que mama no sabia lo que estaba pasando en este momento con Samuel, y mas obvio aun que no es conveniente verme con el justo ahora.
Mi cabeza se lleno de suplicas de que no estara en casa.
Mi mama se estaciono al frente y se bajo, luego le dio la vuelta al carro y me abrió la puerta. Yo me baje con la cabeza a nivel de los hombros, no queriendo ver lo que iba a pasar. Toco y espero a que abrieran.
La mama de Samuel, la Sra Doublas, abrió con una sonrisa como siempre, pero al ver a mi mama, la sonrisa se hizo mas grande y amplia, y las dos corrieron, literalmente a abrazarse predicamento.
Luego cuando, levanto la vista, y me vio, fue a abrazarme, repitiendo estas palabras una y mil veces "Ay cariño, estas bien? Vamos, pasa. Quieres algo? Estas en tu casa", no me podia quejar, la Señora Nara, era muy buena y tierna, y hacia ricos dulces. Me quiere mucho, mi mama y Nara son muy amigas desde el kinder, hace mil años, bueno quiza exagero, pero si desde Kinder.
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Navegando en Diciembre
Novela Juvenil-Te quiero. -Yo igual, pero quizá sea la ultima vez que te lo diga-. Exclamo seco, con un poco de melancolía en su voz. Desperté. Sudando y nerviosa. ¿Que clase de sueño es este? pensé mientras abrazaba con fuerza mis piernas contra mi pecho. En rea...