Un nuevo juego en High School DxD

Cap 36: Un entrenamiento especial

"Akeno, estoy segura que te has dado cuenta que si de verdad quieres proteger a tu amiga no puede solo utilizar tu poder demoniaco; eso no servirá contra el clan Phenex"

En la misma tarde en la que Hayate estaba entrenando con Yumi; por el lado de Akeno, ella estaba sentada alrededor de una mesa junto a su madre mientras ambas conversaban con respecto al duelo y entonces surgió el motivo principal por el que Shuri había venido a visitar a su hija.

Como Shuri esperaba, Akeno no se tomó de forma agradable las insinuaciones de su madre.

"¡Madre!"

Shuri por otro lado, seguía tomando su té de forma tranquila sin importarle el enojo en el rostro de Akeno, sabiendo que eventualmente su hija tendría que aceptar el poder que verdaderamente poseía en su sangre.

"He visto varios de los Rating Games de su oponente, sus limpias victorias invicto...no ha habido clan capaz de hacerle daño o gastar sus reservas de magia...así que, si era su plan, es tonto e ingenuo, sin considerar que la nobleza de Riser es fuerte y tiene experiencia en combate"

Shuri dio un golpe directo a la nobleza Gremory, si Rias hubiera estado presente se hubiera avergonzado de admitir que ese era el plan que tenían; Akeno por otro lado, solo pudo agachar la mirada mientras aceptaba que como un Demonio de sangre pura y uno de los 72 pilares, Riser, era un enemigo al que no se podían equiparar ni decenas de demonios callejeros.

"Eso"

Shuri no le dio tiempo de reflexionar a su hija sobre los tontos planes del nobleza Gremory, cuando decidió aparecer con las únicas soluciones que tenia Akeno a corto plazo, pues resultaba imposible equiparar la potencia de fuego de Riser en solo 8 días.

"Tienes dos opciones, utilizar tu poder como ángel caído..."

"¡Nunca!"

Akeno no dudo ni dos segundos en dar un grito llenó de enojo y un increíble resentimiento brillaba en los ojos de la joven pelinegra; y lentamente Shuri dio la última solución más simple para el problema de combatir contra el inmortal fénix.

"O puedo pedirle ayuda a Suzaku-chan, como sabes la facción sintoísta utiliza el poder de sus dioses utilizando como médium los talismanes, si logras utilizarlos de manera adecuada podrías ayudar a Rias-chan"

"..."

Akeno dibujó una mirada complicada en su rostro, no esperaba tener que pedir ayuda a los sintoístas sobre todo después de que fuera derrotada aplastantemente contra cierto joven de actitud irritante.

"Piénsalo bien Akeno, yo no puedo ayudarte en esto...no tengo contacto con los dioses sintoístas y Suzaku-chan recientemente se ha comprometido con alguien bastante fuerte, pueden conseguirte ayuda para que tu puedas pagar el favor que le debes a Rias-chan ¿No es eso lo que deseabas desde pequeña?"

"Lo entiendo, aprenderé los hechizos sintoístas"

"Hablaré con Suzaku, infórmale a Rias-chan que no iras a entrenar con ella"

Casi al ponerse el sol, Shuri abandonó la casa en donde habitaba Akeno, para empezar a caminar en dirección a la mansión de la familia Shimazu, sin que su hija se diera cuenta.

Akeno por otro lado, se concentró en comunicarse con Rias; y también fue ese momento en que se enteró que Yumi tampoco iría a entrenar con el resto del equipo y que ella tomaría otro rumbo para volverse más fuerte.

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"Aparentemente en este templo vas a estar por los siguientes 10 días y parece que hay una persona aquí incluso antes que nosotros"