Blood Magic and Other Drinking Games

Capitulo 16

Nota de la autora- ¡Gracias a todos por su preocupación! Me siento mucho mejor. Anticipo que el próximo capítulo se publicará el martes. Acabo de estar ocupado con una comisión de costura. Advertencia justa, Regulus se venga en este capítulo. 

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Tonks miró a Regulus, "¿Qué vas a hacer al respecto?"

"¿Qué crees que voy a hacer al respecto?"

Tonks hizo girar su varita en la mano mientras apoyaba la espalda contra la fría pared de ladrillos. Ella no podía estar involucrada. No directamente. Ella todavía era una Auror. Ella había hecho un juramento. Lo mejor que podía hacer era mirar hacia otro lado.

"Tengo que volver al trabajo pronto", ofreció.

Regular suspiró con resignación, "Sí, qué vergüenza. No importa. Vuelve al trabajo. Encontraré algo que hacer".

Tonks se encogió de hombros y se giró como si fuera a salir del callejón. Regulus la detuvo antes de que pudiera irse. "Sabes que si alguna vez no quisiste ser Auror, la familia podría darte un estipendio. Podrías ser una especie de Seguridad".

"No creo que a mi madre le gustaría mucho eso. Trabajé muy duro para llegar a donde estoy dentro del departamento"

"Sí, bueno, Andrómeda sabría todo sobre ir en contra de los deseos de sus padres. No tenía derecho a juzgar, pero es solo una opción. Piénsalo un poco".

Tonks lo miró con mesura. Quería asegurarse de que esta guerra terminara con el menor daño colateral posible. Ella vio cómo destrozó la generación de sus padres perder a tantos de sus amigos. ¿Podría realmente ser más útil fuera de su puesto actual?

Luego, estaba su propia familia a considerar. Aunque aún no estaban casados, ella y sus parejas habían estado discutiendo intentar tener un bebé. Uno de ellos tendría que despegar durante al menos un año. Bill estaba más que dispuesto, pero cuanto más lo pensaba Tonks, más deseaba estar en casa, al menos durante el primer año o dos.

"¿Crees que podrías darme un poco de tiempo para pensarlo?"

" Por supuesto que puedo."

Tonks asintió, "Está bien entonces. Tendré una respuesta para ti al final de la semana. Regresaré al Ministerio. No dejes ningún rastro de nada de lo que hagas".

Tonks extendió su mano, un pequeño papel entre sus dedos. Regulus lo tomó y lo abrió con cuidado. Decía: «Número 4 de Privet Drive-Little Whinging-Surrey». Regulus miró hacia arriba y asintió. Tonks salió del callejón con un guiño.

Regulus se calmó por un momento y se concentró en su vínculo con Hypatia. Podía sentir su felicidad de estar junto a sus amigos una vez más, y algo parecido a la diversión que definitivamente querría saber más tarde.

Nunca había estado más contento de que su ira se enfriara. De lo contrario, seguramente habría sido consciente de lo que estaba pasando. Tal como estaba, tendría suerte si lograba salir de su próximo encuentro sin alertarla de su ira. No vio forma de evitarlo.

Habían herido a Hipatia y tenían que pagar por lo que habían hecho. Todos lo harían con el tiempo. 

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La casa no era nada: pequeña, sencilla, olvidable. ¿Cómo podría esta insignificante casa, en este barrio muggle, contener a alguien tan magnífico como su esposa? Ella era regia. Este lugar era todo lo contrario.

Oyó los fuertes gritos de la que debía ser la prima adolescente de Hipatia. Era un chico mandón y maleducado. No es que su madre o su padre se molestaran en corregirlo. ¿Sabían dónde estaba Hipatia? ¿Les importaba que ella se hubiera ido? ¿O se alegraron de haberse librado de ella?