Capituló.2

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— Al menos fueron 2 semanas y no un mes, te imaginas un mes sin ti en el campo. — exclamó Samantha mientras sostenía una manzana en su mano.

— Estará frito durante las  dos semana.— dije mirando a Zack, quien estaba al otro de la cafetería junto a Mattew su mejor amigo y el chico quien es como un hermano para mi.

Mattew se levantó de la mesa y camino hacia la nuestras. Zack se le quedó mirando un momento pero luego le restó importancia.

— Así que la liaste con Zack de nuevo.— Mattew hablo mientras me abrazaba.

Matt es como mi hermano y un Kitsune, tenemos la misma edad, cuando recién llego al instituto era un niño muy tímido y asustadizo, Samantha fue la primera en hacerse su amiga con el tiempo los dos nos hicimos amigos también, siempre éramos nosotros tres, nos llamaban los 3 mosqueteros. Si lo se, que cliché el apodo. Matt es bastante algo, Sam y yo siempre habíamos sido más altas que el. Cuando entro a la adolescencia creció de un tiro, mide 1.79 ahora, su cabello castaño siempre rebelde, unos ojos color miel, tiene un rostro bastante inocente, no crecías que ese chico es un promiscuo rompe corazón y es parte del cuartel de inteligencia.

79 ahora, su cabello castaño siempre rebelde, unos ojos color miel, tiene un rostro bastante inocente, no crecías que ese chico es un promiscuo rompe corazón y es parte del cuartel de inteligencia

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— Yo no entiendo a ese chico.— rodee los ojos.

— ¿No será  que Zack te atrae, y como eres Rhea Johnson la chica que odia todo y a todos, no puedes aceptar que te gusta Zack? Es igual de fuerte que tú.— Sam comento.

— Estás diciendo estupideces.— Le lance una mira asesina.

— Está bien, esta bien .— Ella levantó sus manos en forma de rendición.— yo solo comentaba.

— Sam tiene razón, aparte de que Zack es muy sexy.— Mattew asintió con la cabeza. El se encontraba parado atrás de mi asiento.

— Y tú estas muy cerca de mis puños Matt, si siguen hablando de eso o del idiota de Zack los golpeare.

— Y ahí está la violenta.—Matt revoloteo mi cabello y agarre su muñeca, el sabe cuanto odio que me toquen la cabeza, el cabello o que me toquen en general.

— Por esto no haces amigos.— Matt me susurró al oído.

— No los necesito y mucho menos los quiero. con ustedes dos es más que suficiente .— le dedique una sonrisa por un segundo.

— No olvides que nosotros te adoptamos a ti.— Protestó Sam.

— Es lo que creen ustedes.— hable para luego darle una mordida a mi manzana.

— ¿A que te refieres?, explícate mujer.— Mattew tomo asiento a mi lado mirándome.

— Iré a entrenar.— me levante de la mesa dándole una palmada en su su hombro. Me despedí y camine  en dirección a la salida del lugar.

Mattew y Samantha se miraron el uno al otro por un segundo con expresiones indignadas.

— ¿Como es que somos sus mejores amigos?.— Mattew ladeó su cabeza mirando como Rhea cruzaba la cafetería.

Hibrida: El secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora