Akira Nakamura es una joven mujer de 22 años, mide 1.75, cabello negro desordenado hasta arriba de los hombros, su tono de piel ligeramente oscura y color de ojos amarillos, caderas anchas y busto pequeño.
Llegó el viernes, las clases de la universidad terminaron, y es de noche.
Akira tiene puesto un buzo negro y unas zapatillas de color blanco. Ella está feliz ya que está estudiando lo que en verdad quiere, la fotografía en el área de vida salvaje.
Al principio sus padres no estaban de acuerdo, que estudiara fotografía, querían que estudiara enfermería. Entre varias discusiones, ellos tuvieron que aceptar que su hija estudiara lo que le hacía feliz.
Lo bueno es que mañana, podrá descansar como se merece.
A Akira le queda una cuadra para llegar a su casa, un hombre la agarra por detrás, le pone un trapo en la boca y nariz, razón por la cual se desmaya. Aparece un auto y el sujeto sube con ella inconsciente al vehículo.
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.Akira despierta ve que está en un colchón, trata de levantarse pero no puede, tiene unas esposas en las muñecas y tobillos.
Observa que esta en una habitación, es de color gris, también no hay ventanas y solo hay una puerta. Lo único que ilumina esa habitación, es una ampolleta colgada en el techo.
Se abre la puerta y aparece un hombre, de cabello liso largo naranjo, hasta los hombros y su color de piel ligeramente pálido. También él color de sus rojos.
El solo tiene puesto un pantalón de pijama color rojo oscuro, tiene un abdomen marcado y brazos fuertes.