
Al fondo a la derecha del pasillo hay unas escaleras que conducen al primer piso de la casa. Y al fondo a la izquierda hay una puerta cerrada.
El sujeto de pelo azul que carga a Akira se dirige al fondo a la izquierda, donde está la puerta y la abre. Es un baño, sienta a Akira en la tasa del baño y cierra la puerta.
El la observa, —me llamó Souya— saca de su bolsillo un llavero en forma de argolla con una llave, —no hagas una estupidez—. Con la llave él le quita las esposas de las muñecas y tobillos, deja las esposas en el piso.
—Sacate el buzo y la ropa interior—.
—¿Puedes mirar a otro lado? ¿Por favor?—.
—No y apúrate, no tengo todo el día—.
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Souya baño y vistió a Akira con una lencería color rojo, le pinto los labios de color rojo y pinto sus ojos con una sombra oscura.
La lleva al primer piso de la casa y entran a una habitación.
Ella esta sentada en una cama y está esposada de nuevo, pero solo las muñecas, a su lado está Souya.
Akira está nerviosa y asustada, empieza a morder sus dedos. Solo espera que lo que suceda sea rápido, y no doloroso ni humillante.
Se abre la puerta, Akira le dió un escalofrío. Aparece Nahoya vestido con un buzo y descalzo. Tiene en sus manos una bandeja hay un sándwich de queso y jugo de naranja.
A ella, al oler el sándwich, se le hizo agua en la boca y su estómago crujió, Nahoya lo escuchó —Souya, sal—. Él se fue del lugar.
—Parece que tienes hambre, mi hermosa flor— Akira observa el sándwich que Nahoya mueve de un lado a otro, le extendió la mano donde tiene el sándwich. Ella no lo pensó dos veces, lo agarró y se lo comió. A él le dió risa y le dió el jugo a Akira.
Él se sienta al lado de ella y acaricia su cabello, Akira lo mirá a los ojos —¿Por qué?—. Nahoya mueve la cabeza a un lado, —¿Por qué me secuestras? —de pronto ella empieza a llorar— y ¿me forzar a qué te hiciera sexo oral anoche?- —.
—Jajaja ¿Yo, obligarte? No jodas—.
—¡Pero me dijiste que si no te obedecía matarías a mis padres!—.
—Ese no es mí problema y además fue consensuado—.
—¡Eres un asqueroso hijo de perra!—, Nahoya le dió una cachetada a Akira.
El la agarra del mentón—repite lo que dijiste —.
