𝟮𝟮:𝟬𝟬~𝐸𝑦𝑒𝑙𝑒𝑠𝑠 𝐽𝑎𝑐𝑘~(#𝟐 𝑯𝑶𝑼𝑹𝑺)

XX

-Lleva días ahí metido como si fuera un soldado en una trinchera-dijó Ann

-No te creas que pasábamos tanto rato ahí metidos, solíamos turnarnos-dijo Jack

-¡Eso da lo mismo!, La cosa es que Helen lleva días encerrado en su cuarto, no sale a trabajar y eso ya sabes cómo le pone a el...-insinuando al más alto de la casa

-Ann, a mi este artista me da igual, por si no lo recuerdas está intentando acercarse a ________ y juro por mi hija que si la toca, le arrancó las manos y empieza a pintar con los pies.

Jack se alejó de la escena, subiendo a su cuarto para ir por su hija.

-Hey pequeña, ¿Has dormido bien?

Una sonrisita se mostró en el rostro de la criatura, una criatura que crecía con rapidez pero esto era algo normal en los niños, o al menos eso había oído el castaño.

-Mirate, siempre contenta, ¿Por qué tienes que parecerte tanto a ella?

Jack agarró el pequeño conejo de juguete de su hija y se lo dió para luego bajar al piso inferior, seguidamente al jardín y finalmente a la lápida de la madre de la pequeña.

-Hey ________, quiero contarte más o menos como está avanzando Rose y también otras cosas...

Mientras el castaño "hablaba" contigo, desde la ventana era observado por algunos de sus compañeros.

-Se nota que la echa de menos-suspiró Ángel

-Claro que lo hace, mirale, como un idiota hablándole a una lápida-soltó Jeff

-¿No puedes mantener la bocaza cerrada?-le miró mal Jane-Si Jack te escuchará te quitaría el otro riñón.

-La cuestión es que el muy imbécil la sigue buscando y si la ha encontrado, se le está haciendo difícil hacerla recordar-se dejó ver Masky.

-¿Y que recomendáis?, ¿Ir en busca de esa mujer para verificar si es _______?-rió Jane

-Es una idea perfecta joder-rió Jeff

-No era una idea animal, además, Jack no deja de montar guardia sobre ella.

-Me importa una mierda sus guardias, voy a ayudar a mi amigo.

-No quieres ayudarle, quieres asustar a esa pobre chica.

-Quizás, pero lo primero es mi amigo, así que llama al duende y dile que busque la dirección de esa chica.

-No pienso hacer eso Jeff, y menos sabiendo que Jack quiere mantener su situación en la más absoluta intimidad, si te acercas a ella la asustaras y se irá, y si Jack se entera del por qué de ello...ninguno de nosotros te ayudará a comer cuando te arranque brazos y piernas.

-¿Ves a Jack capaz de dañar de esa forma a su mejor amigo?-de forma dramática

-Joder, Jack sería capaz hasta de arrancarte un pulmón por puro aburrimiento-exclamó Masky

Tras aquella conversación, se escuchó la puerta abrirse, Jack había vuelto a entrar.

-¿De que hablais?-los miró el castaño

-De nada...de que...Helen no sale de su habitación-soltó Jeff en busca de una excusa

-Vereis lo rápido que sale-dijó Jack

El de cuencas vacías le cedió su hija a una de las féminas de las que estaban presentes y seguidamente se dispuso a subir y golpear la puerta de Helen.

-Otis, abre y déjate de gilipolleces.

No hubo respuesta.

-Helen, llevas sin salir días y ya sabes cómo se pone él si bajas el rango.

Continuó el silencio.

-Que te jodan-abrió la puerta y vió al artista concentrado.

Estaba terminando un cuadro de distintos tonos de rojo de una mujer tirada en el agua y posiblemente ahogándose, aún así el arte a él no le interesaba tanto como para fijarse en el.

-Tu, imbécil, deja de hacer el subnormal y sal de esta pocilga.

-Sabes Jack, antiguamente solías ser menos amargado.

-Y tu menos raro.

-Solo déjame terminar el cuadro.

-Llevas días aquí solo para pintar a una tía tirada en el agua.

-No es por el tiempo, es por...-suspiró con una pequeña sonrisa.

-¿Por qué?.

-No lo entenderías-continuó su labor.

Jack se acercó enfadado y le arrebató el pincel para luego mirarlo.

-Deja esa puta mierda y...

Aquella charla se vió interrumpida por lo que llevaba Helen al cuello y parecía interesar a Jack, un anillo colgado con una cadena a su cuello, pero ese anillo lo recordaba de antes.

-¿Sabes?, Tienes razón Jack, voy a darme un respiro y salir un poco.

El de ojos azules salió de la habitación y a los pocos segundos salió Jack, volviendo abajo y tomando a su hija.

-Listo, ya tenéis al flipado fuera, por cierto, esta noche voy a salir, no os importa si os dejo a Rose unas horas, ¿No?.

-Claro que no, es un cielo de niña, yo me encargaré de ella-dijó Jane.

-Gracias Jane.

Llegaste tarde de la galería, había sido un día largo y había habido una exposición pero gracias a ello aquel mes cobrarías más.Fuiste directa a tu habitación para luego retirar tus tacones y entrar al baño dispuesta a darte una ducha ligera, tras ello saliste del baño ya preparada para dormir sino fuera por aquella oscuridad y la silueta al fondo de la habitación.Un grito escapó de tu boca.

-Shhhh, soy yo.

-Dios Jack...no hagas eso, casi me matas.

-¿Cuántas veces habré oído esa frase?.

-¿A que viene esta visita tan inesperada?

-Llevaba sin verte días, y quería ver cómo te encontrabas.

-Cansada la verdad-te sentaste en la cama-Pero nada más.

El castaño encendió la lámpara de tu mesilla dejando ver su máscara, se acercó a tu tocador viendo las joyas de aquella cajita de cristal.

-Ten cuidado con eso por favor.

-¿Por?.

-He perdido mi anillo favorito y no quiero perder otro.

-¿Y como era ese anillo?

-Pues tenía la forma de una sirena haciendo un círculo con su cuerpo.

-Comprendo-se acercó-¿Tienes el dibujo?

-Por supuesto.

Tomaste tu carpeta y sacaste aquel folio con este dibujo, el chico lo miró detenidamente.

-Mi nariz tampoco es tan grande.

-No busques excusas, ¿Eres así?.

Se hizo el silencio, el chico apagó la luz para después quitarse la máscara.

-Eres tan odiosa a veces...-soltó con cierta risa.

-¡Lo sabía!, Cumple con tu trato, enciende la luz.

-Tu misma, luego no me hago responsable de tus pesadillas.

Acercó la mano al interruptor con fuerza y encendió la luz de la habitación.