Zoe Allen

3-La actual realidad.

Entro a mi cuarto enfurecida y entristecida, pego un fuerte portazo que retumba las ventanas de mi habitación sin pensármelo dos veces y corro con lágrimas derramándose por mis mejillas hacia mi cama. Cojo la almohada y me tapo la cara intentando insonorizar mis sollozos, empapándola de lágrimas, pero sobre todo de tristeza.

Mi mundo se acaba de derrumbar todavía más de lo que estaba, no puedo parar de pensar en sus palabras, estoy ante una realidad que por mucho que me he empeñado a esconder ha salido a la luz y todavía más destructiva.

Siembras lo que recoges, dicen que así es la vida, que todo acto malo repercute, ¿pero ahora? ¿Qué es lo que cojones nos ha llevado a esta maldita situación? Mi padre no se habría merecido esto ni en un millón de años. Siempre he sido una persona que miraba hacia el futuro, que hacía planes, siempre me había gustado el futuro más que el presente, pero esto cambia todo, estamos en mitad de una cuerda, una cuerda que te expone a caer en el vacío por cualquier cosa, ahora solo importa este presente.

-¿Zoe?- oigo que alguien pregunta en un suave hilo de voz. Aparto un poco la almohada de mi cara y visualizo a Tyler entrando por la ventana- ¿Qué te...?

Tiro la almohada al suelo y me pongo frente a él mirándole a los ojos. Noto como se vuelven de un azul más oscuro y pone una mano sobre mi mejilla mientras con la otra me limpia las lágrimas que todavía resbalan.

-Tyler... -susurro todavía mirando sus ojos con expresión de no entender nada- por favor...ayúdame con todo esto.

-Zoe no tengo ni idea de que me estás hablando, solo sé que estas sufriendo-apoyo mi frente en su pecho y paso mis brazos por su cintura abrazándolo acercándome más a él, sintiendo su olor.

Él me abraza más fuerte refugiándome en sus brazos como si tratara de protegerme de todo, formando una barrera a lo exterior. Nos quedamos unos minutos en la misma posición, abrazándonos mientras sollozo en voz baja y él me acaricia suavemente.

-Nadie lo sabía...-sollozo de nuevo- nunca me atreví a decirlo porque no quería ser la típica chica a la que por su situación todos miren con lastima, no quiero ser la chica por la que los demás sientan compasión y lástima, no quiero ser la chica a la que algunos señalen por su estúpida idea de querer captar atención.

-¿A qué te refieres Zoe? ¿De qué cojones me estás hablando?- murmura asustado.

-Mi padre tiene cáncer Tyler, tiene- comienzo a decir en un tono más elevado- tiene un puto cáncer que va a acabar con su vida, ¿lo entiendes?- comienzo a gritar.

-Zoe...-me mira compadeciéndose. Justo lo que quería evitar, que la gente se compadeciese de mí, quería evitar esas miradas de lástima y pena. ¿Pero qué esperaba? Algo así es serio y la gente quiere mostrar su apoyo a través de esas miradas que para mí significan un signo de sentencia final, sin saber siquiera las fuerzas para luchar que tienes.

-No, pero no es solo eso, todo se ha complicado- me deshago de su abrazo y me siento en el borde de mi cama tapándome el rostro con las manos. Se sienta a mí lado y me observa.

-Ni siquiera te voy a obligar a contármelo si no quieres, solo quiero prometerte una cosa y es que voy a estar contigo-dice en voz baja y sujetando mis manos entre las suyas.

-No puedes prometer algo que nunca sabes si lo cumplirás, no sabes la situación en la que podemos estar en un par de meses, no sabes de qué manera puede cambiar todo en poco tiempo. Para mí todo ha cambiado en muy poco tiempo, todo se ha vuelto un imposible.

-Vaya, ya me estás diciendo que en un par de meses me darás un ultimátum - me da un pequeño empujón con el hombro lo que hace que me asome una pequeña sonrisa.