Una mano pasaba por mi cabello plateado, se sentía algo fría y escalofriante, también sentía un gran dolor en mi cuerpo, y entonces lo recordé, me había caído por el acantilado y seguía viva, al instante me levanté quedando sentada, mire a mi alrededor y estaba en una cueva, pero lo que me sorprendió fue ver a un chico de cabello negro y ojos color miel mirándome con su mano extendida hasta mi cabeza.
Nene: ¿qu-quien eres? -hable con miedo ya que nunca lo había visto, con su apariencia parecía más pequeño que yo, pero no era un niño
¿?: Soy tu salvador, tuviste una terrible caída -hablo y me sonrió, mientras se levantó del suelo y me alcanzó algo de comida- come, debes de estar hambrienta
Nene: gr-gracias -acepte la comida y empecé a degustar, no era la gran cosa, pero tenía que aceptar que tenía hambre, el solo sonrió de una manera muy cálida- ¿Que haces aquí abajo?
¿?: Yo vivo aquí, está es mi casa- abrí los ojos en grande en señal de sorprendida, no me imaginaba que alguien viviera debajo del acantilado, pero la misma pregunta de antes volvió a mi cabeza, ¿Como seguía viva? y ¿Quién es el?
Nene: disculpa, ¿te puedo hacer una pregunta?- el asiento con una sonrisa para después atenderme la verdad sus ojos eran hermosos, algo que nunca había visto, me concentre recordando lo que iba a decir- ¿Como es que sigo viva? y ¿Y quien eres tu encerio?- el chico solo me miró por unos segundos para luego mirar a otro lado
¿?: ¡Estás a salvo porque cuando caíste, lo hiciste sobre mi, osea, nunca tocaste el piso en ese momento!, y sobre mi nombre ¡no quiero hablar!
Nene: ¿pero por qué?- reproche haciendo un puchero al que a este le pareciera gracioso para empezar a reírse
¿?: Ok, puedes llamarme Hanako -lo mire un poco confusa, pero no me importó y solo acenti
Nene: entonces Hanako, ¿no te gustaría ir mejor a vivir al pueblo?, este lugar no es adecuado para alguien como tú -se sorprendió al escuchar mis palabras, pero solo apartó su mirada al mar como si estuviera tratando de evitar la pregunta para no responder- ¿es que no te quieres ir de aquí?
Hanako: ¡la verdad es que si!, pero tengo que cuidar de alguien y no puedo irme
Nene: entiendo - le doy una sonrisa tierna, mientras el seguía mirando al mar, pero volvería a mirarme para decirme algo, lo noté y solo lo mire con curiosidad por saber que diría
Hanako: ¿No crees que deben de estar preocupados por ti? - mi mirada cambio a confusión, no sabía de lo que estaba hablando y a quien se refería, solo ladeó mi cabeza en señal de no saber- ¿no venías acompañada con alguien? cuando caíste oí unas voces llamándote- en ese momento me levanté rápido del suelo, se me había olvidado por completo de Aoi y Sousuke, pero había un problema, como iba a volver a la superficie
Nene: es inútil, no hay forma de llegar arriba
Hanako: claro que sí la hay -me hizo señas de que lo siguiera y llegamos a un elevador viejo y abandonado, no parecía ser seguro subirse en esa cosa, pero en su mirada se veía confianza- no tengas miedo, no te pasará nada
Nene: seguro, es que no lo parece
Hanako: confía en mí -me dio una sonrisa se confiado, tenía miedo de que mientras estuviera subiendo el elevador se rompiera y callera al suelo, y acabara muerta está vez, pero no veía otra forma de subir, así que solo me quedaba aceptar
Nene: está bien, lo are -me dio una sonrisa de alegría, me señaló que subiera al elevador y así lo hice, lo mire dudando ya que no quería morir, el tomo una soga y empezó a alar con fuerza de ella, el elevador empezó a subir haciéndome notar la gran fuerza que tenía esté
Mientras subía mire al océano hermoso, la luna se reflejaba en el y le daba un gran brillo a la noche, mire otra vez al chico viendo cómo este brillaba bajo la luz de la luna, solo pensaba que si mis padres se llegarán a enterar de que salí del castillo sin permiso y caí por un acantilado no me dejarían salir más.
Llegue a la sima del acantilado poniendo mis pies en el pasto verde, donde después salieron luciérnagas volando a mi alrededor, quedé hipnotizada por el momento que parecía tan mágico hasta que escuche dos voces llamándome, mire al lugar de donde venía y como me lo imaginé eran Aoi y Sousuke.
Aoi: Nene chan, menos mal estás bien -dijo esta agitada por tanto correr para después abrazarme
Sousuke: ¿como sobreviviente a la caída?
La pregunta de Sousuke me hizo pensar, como les explico del chico, y si lo echan del acantilado, y si no lo dejan vivir en paz o algo más, muchas preguntas me llegaron a la cabeza de si tengo que responder o no, la voz de Sousuke me hizo volver a la realidad, negando saber algo, solo se miraron entre si y me arrastraron al castillo.
Ya dentro del castillo, logramos escabullir nos sin que nos notarán, Mitsuba reviso los pasillos asegurándose de que no nos hubieran visto, mientras que Aoi seguía llenándome de un mar de preguntas para asegurase de que estuviera bien, Mitsuba termino de revisar y se acercó a nosotros para seguir con su mar de preguntas.
Aoi: estás segura que estás bien, es una gran caída
Nene: no te preocupes, estoy bien, solo unos rasguños y ya -reí un poco para calmarlos, algo que no funcionó mucho, en ese instante la puerta de mi habitación se abrió de golpe para ver después a Sakura con un rostro preocupante- solo fue una mirada, estoy bie- pero mis palabras fueron interrumpidas por un abrazo que me había dado esta, su abrazo me daba señal de consolación, como si algo malo había pasado, me separé del abrazo para mirarla, sus ojos estaban humedecidos, lo que me dio más curiosidad- ¿sucede algo Sakura?
Sakura: es mejor que no te lo diga yo, pero se fuerte princesa Nene, todos estamos contigo -por cada palabra que decía me traía más preocupación, Mitsuba, Aoi y yo nos levantamos de la cama para seguir a Sakura hasta la sala de trono donde estaban todos los sirvientes, sus miradas hacia mi me mostraba lo mismo que Sakura, tristeza y preocupación -ya esta aquí Tsuchigomori
Tsuchigomori: princesa Nene, tengo que darte una noticia, pero ante siéntase por favor -confundida me senté en uno de los escalones observando a Tsuchigomori con atención, este se quitó sus lentes observando hacia el suelo con una mirada perdida, tanto como Mitsuba y Aoi, yo estaba confundida, al principio pensé que era sobre mi escapada, pero esta situación ya parecía muy grave
Nene: Tsuchigomori, ¿que sucede, me tienen preocupada?
Tsuchigomori: princesa... hemos recibido un reporte sobre el carruaje real donde iba sus padres
Nene: ¿Que paso? -pregunte ya más preocupada que antes, me levanté del suelo exigiendo a Tsuchigomori que me contará lo que pasaba, este trataba de calmarme, pero no lo lograba -por favor, díganme que pasó con mis padres
Tsuchigomori: ellos, tuvieron un accidente... Vieron algo en la carretera y se desviaron del camino... cayeron por un acantilado y no sobrevivieron, unas personas que vivían cerca de allí avisaron a los guardias
Sentí como mi corazón se rompía en mil pedazos, las lágrimas salieron de mía ojos demostrando a todos como me sentía, no emitía ningún sonido, solo miraba hacia el suelo escuchando la voz de Tsuchigomori tratando de consolarme, todos los recuerdos con mis padres salieron en mi mente de golpe haciéndome estallar por un mar de gritos y sollozos, sentí como todos los presentes se me acercaban y me abrazaban, el dolor de perder a mis padres fue tan fuerte, que de la nada empezó a llover, esa noche el pueblo estaba de luto por la pérdida de su rey y reina.
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Capitulo triste, pero vamos avanzando, no se si actualice seguido porque reviso los errores y cambio cosas aveces.
Espero que les haya gustado.
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El acantilado
ParanormalYashiro Nene es la princesa de un reino muy hermoso, pero por un terrible accidente sus padres murieron, ahora tiene que gobernar el reino aún siendo joven. Pero una noche que se escapó del castillo junto con sus amigos, logro ver a un chico misteri...