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Una relación de apenas tres años era envidiada por muchas personas.

¡ojala y terminen!

Nadie entendía a esas personas.

Yami merece a alguien mejor.

Y bueno gente que por algo sabían lo que decían.

◟﹘◞ ⋆︙

-porque? No soy lo suficiente para ti?-
Sollozos de parte del peli rubio, tapando su rostro y cubriendo sus ojos
Sus mangas empezaban a empaparse de lágrimas, la gente empezaba a voltear algo que ponía demasiado nervioso al peli morado. [Yami]

-no es eso... solo es que no te veo de forma romántica, perdón...- tratando de explicar dando pasos hacía atrás con nerviosismo y temblor en su cuerpo, nunca nadie en su vida se le había declarado y no sabía de que manera reaccionar.
Pero era verdad, a gogo solo lo veía como un amigo lamentablemente no lo veía como una pareja y eso llegaba a afectarle al otro.

-Dices que me quieres pero me tratas asi?
Quien trata asi a una persona que quiere!-el peli morado retrocedió más por el tono en que le grito el pelo rubio, empezando a temblar, bajo la mirada más que solo escuchando los sollozos del otro.

No sabía que decir sinceramente, gogo nunca le había gritado entre lagrimas pidiendo un "si" de su parte, no sabía si alejarse o pedirle perdón.
No sabía el porque se encontraba en esa situación.

Sentía las miradas de desagrado a su persona, gente empezaba a murmurar sintiendo lastima por el Rubio y haciendo sentir mal al peli morado.

Sin pensarlo dos veces salió corriendo de ahi, la tarde era lluviosa por lo que empezaba a empaparse se fue de ahí sin mirar atras, escuchando solo su nombre.

MIKU!- su nombre entre llanto y un horrible grito.

◟﹘◞ ⋆︙

-yami-unos dedos tocaban su espalda queriendo despertarlo, se quito la sabana de su cara y vio ahi a su mamá quien le sonreía dulcemente esperando que ya se despertara, sonrió de vuelta.- ya es tarde hijo, y tienes que ir a la escuela, vamos ven a desayunar- asintio, su madre solo sonrió y dejo la habitación dejándolo completamente solo.

Veía el techo, estaba nervioso de ver al peli rubio claro que si pero estaría mas nervioso si lo regañaran por no entrar a clases.

Dejando a un lado sus pensamientos, se levanto tomo algunas prendas y entro al baño a darse una ducha.

_

-el día de ayer estuvo muy pesado!- veía como su compañera estiraba su cuerpo y hacía muecas de cansancio, bajo la mirada
No tenía tantas ganas de hablar ni menos de preguntar el porque, por lo que obtuvo por emitir un sonido de afirmación "mmm"

Y claramente su amiga notaba lo sospechoso y callado que actuaba su querido amigo, agarro una silla y se sentó a lado de el.

-no a venido gogo a saludarte como usualmente lo hace-

De nuevo un silencio, de reojo vio como el pelimorado se veía muy pensativo sin si quiera prestarle atención a sus palabras solo escribiendo en su libreta que siempre lleva al colegio.

-Paso algo entre ustedes?- preguntó intrigada.

Gogo todas las mañanas iba al salon de yami, ya sea para dar los buenos días o molestarlo y después darle cariño, para la castaña no era normal verlos lejos uno del otro así que tendría que haber pasado algo muy grave, penso.

-El... se me confesó- por fin solto el lapiz dando una mirada al frente, lo dijo en murmuro pero si fue escuchado por la castaña que en ese momento se encontraba en boca abierta y con los ojos como platos.

-Yo sabía! Sabía que le gustabas- hizo un chillido de emoción haciendo espantar al pelimorado, ahora mismo sentía que fue mala idea contarle sus compañeros se le quedaban viendo raro, tomo sus cosas y salio del salón sin importar ahora sus maestros o clases, sentía que se ahogaba en la ansiedad al ver tantas miradas sobre el como lo fue hace 2 días.
La castaña al ver la acción tomo su mochila y fue a perseguirlo.

-Espera yami! Y que mas paso?! No me dejes con la duda- sabía que yuu iba detrás de el persiguiendo y dandole sonrisa de oreja a oreja, esto iba a ser pesado...

Contaba lo que había pasado hace apenas 2 días, con tranquilidad pero aún se preocupaba por todo ¿y si estuvo mal? Nunca pensó en como se sentiría gogo pero no tenía la culpa, el simplemente no sabía que hacer ni tampoco sabía si tenía sentimientos por el Rubio, lo veía como su mejor amigo de la infancia.

Gogo SIEMPRE cuidando de el en todo momento, pero extrañaba su presencia aunque entendía que ya no sería lo mismo.

Seguía hablando hasta que una conversación en especial se oía entre los pasillos.

Era un peli rojo y un rubio.
Siempre los veía junto a gogo, era muy raro no verlos juntos.

-No te preocupes yami, tal vez gogo no llego a la escuela porque le da vergüenza mirarte, te traere un jugo para que estes feliz vale? Esperame aqui- volteo de nuevo hacía su amiga y no le dio tiempo de dirigirle la palabra porque yuu ya se encontraba corriendo a la maquina de bebidas, tenía razón tal vez gogo le daba vergüenza.

Pero aún esa conversación cada vez mas se hacía mas grande, llegando a sus oidos incluso si los tenía a mas de 7 metros.

-Su madre me aviso, gogo esta en el hospital asi que lo mejor sería ir a verlo-
Hablaba el peli rojo con una mano en la nuca, tocando su ojo y sobando el tic nervioso que tenía en ese momento por el estres.-se tomo un frasco lleno de pastillas y lo encontraron en la bañera con el agua helada, el estaba frio en ese momento.
Pero por ahora no hay noticias de el, tal vez paso algo demasiado grave el nunca había tocado tan fondo...-

MANIPULACIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora