Antes de la historia, me gustaría dedicársela a una de las personas más importante de mi vida, a quien quiero con locura, Ainara_Leonn 💕💕 Ahora si, historia, espero que os guste 🥰
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Llovía a cántaros desde las doce del mediodía. Debido a la lluvia, mi madre no me dejó salir esa mañana, por lo que esta tarde quedaría con mis amigos para dar una vuelta por la mejor feria de España, la de Albacete.
Termino de ponerme un poco de gloss y me miro al espejo. No me he arreglado mucho, nunca he sido de ir súper arreglada, y mucho menos a la feria de mi ciudad. Voy con un top azul, unos tejanos negros y mis Converse del mismo color.
–¿A qué hora volverás? – pregunta mi madre.
–Sobre las nueve , aunque quizá vayamos a cenar.
–Recuerda que mañana iremos al partido.
Asiento. Me despido de ella y de mi hermana y salgo de casa.
En mi portal, Noe y Alex me esperan. Van con un paraguas porque todavía chispea un poquito, aunque no tanto como esta mañana.
Les saludo con dos besos y comenzamos a caminar mientras charlamos de la vida en general.
–Dicen que los del Alba están por la feria – comenta Alex, mirando el móvil distraído.
–¿El equipo? – pregunta Noe. Alex solo asiente y su rostro cambia –. Donde que voy corriendo.
–Donde las atracciones – dice Alex, y mi amiga hecha a correr como si no hubiese un mañana. Es muy fan del equipo, como yo y Alex. Pero lo suyo es superior. Conoce a media plantilla de todas las veces que se ha encontrado con alguno.
Cuando llegamos a su altura, porque se ha parado para respirar, ya que mucho correrá, pero a los dos segundos ya esta hiperventilando.
Ella toca mi hombro.
–Te voy a presentar a Bernabé. Si está claro.
Nos pasamos media hora entre atracción y atracción y buscando al portero del equipo. Por suerte, lo encontramos, pero estamos subidos en una atracción y cuando nos bajamos, no está.
–Menuda putada – murmura Alex.
Asentimos.
Al cabo de una media hora, vemos una pequeña agrupación de gente.
–Está ahí.
Nos acercamos, efectivamente, hay varios chicos del equipo.
–Tía está ahí – dice Noe emocionada, y yo sonrío.
Me acerco a él.
–Hola em, ¿podemos hacernos una foto? – pregunto, muerta de vergüenza.
–Sí claro – sonríe y yo tengo ganas de morirme de vergüenza y nerviosismo.
Nos hacemos la foto y sonríe. Adoro su sonrisa.
–¿Irás al partido de mañana? – pregunta.
Bernabé. Hablando conmigo. Esto es un sueño.
–Em sí. No me pierdo ni un partido – digo orgullosa.
¿No habré sonado mal no?
Esperemos que no.
–Me alegro. Si puedo, te daré mi camiseta. ¿Cómo te llamas? – dice, y yo sonrío.
–Ainara, y no es necesario, pero mil gracias.
Él sonríe.
Charlamos un rato con él, incluso le pedimos que nos haga el BeReal y todo.
.............................................
Estamos en un restaurante de la zona, hemos decidido cenar. A mi madre por suerte le ha parecido bien que llegase un poco más tarde.
–Tía girate disimuladamente.
Me giro y le veo, entrando al restaurante. Nos hemos cruzado toda la tarde, y hemos ido hablando. Es un chico majísimo.
Cruzamos miradas y él sonríe. Se acerca y yo me muero de nervios.
–Ey que pasa – nos saluda a todos con dos besos en las mejillas –. No te di mi número antes, por lo de la camiseta y eso.
El chico se ha empeñado en darme su camiseta, o al menos lleva así media tarde.
Me da un papel doblado con su numero de teléfono.
Cuando se va, mis amigos alucinan.
–Esto es un sueño – murmuro.
.............................................
El día del partido. Anoche hablé con él hasta las tres de la madrugada. Y creo que me he pillado, pero es demasiado pronto
Llegamos al estadio, el ambiente es como siempre, digno de una fiesta. La gente con tambores o dando de palmas, cantando el himno del club.
Cuando le veo salir, mi cuerpo se tensa, en el buen sentido.
Él parece buscar algo, y cuando cruza mirada conmigo sonríe. Imito su acción y le saludo con la mano.
El partido acaba con lluvias, pero cuando veo que él se acerca hacia la grada donde estoy, sonrío como una tonta. La gente al ver que se quita la camiseta va hacia el final de la grada para ver si consiguen cogerla. Yo me acerco, él me mira y asiente.
–Lo siento gente, pero se la prometí a esta chica ayer en la feria – dice, disculpándose con la gente y entregándome la camiseta. Mi felicidad está al máximo, mis mejillas sonrojadas y tengo una sonrisa de oreja a oreja.
Oigo a gente criticar mientras salgo del estadio, pero no me importa en absoluto.
Justo cuando ya estoy fuera, recibo un mensaje suyo.
"Esperame fuera, tengo que hablar contigo"
Le respondo.
"Mientras no tardes mucho, perfecto. Empieza a apretar la lluvia y tengo que volver a casa andando"
A los cinco minutos, le veo aparecer con un paraguas y una bolsa negra deportiva.
–Hola – dice –. ¿Tengo el coche enfrente, vamos a dar una vuelta? – pregunta.
Quien diría que al aceptar terminaría besándole en el portal de mi casa.
.............................................
Han pasado dos meses, dos meses desde que Bernabé y yo nos besamos. Llevamos menos de un mes saliendo, desde aquel beso la cosa fue a más.
–¿En que tanto piensas? – pregunta.
Hemos venido a pasar el fin de semana a Oliva, en Valencia. Estamos sentados en la playa viendo el atardecer.
–En nosotros.
Él sonríe y toma mi mentón. Planta un beso lento en mis labios.
–Te quiero – murmura.
____
Espero que os haya gustado. Intentaré subiros otro esta semana, no sé si podré pero lo intentaré <3
