El miedo es para humanos

Capítulo 7

Eileen y Gally se adentraron aún más en el laberinto, aún sin encontrar ningún penitente.

-Que raro- pensó Gally

Eileen miró la reacción de Gally, estaba ansioso y no dejaba de mirar de un lado a otro, como buscando algo.

-¿Estás bien?

-Sí es solo que...

-¿Qué ocurre?

-No he visto aún a ningún penitente

-¿Penitente?

-Es una criatura horrible y despiadada, es rápida y asquerosa. Si te pincha y no tienes el antídoto, date por muerto

Eileen guardó silencio, solo esperaba no encontrarse con un penitente, caminaban hombro a hombro sin decir palabra. Ambos tenían solo una cosa en mente, el beso. Su beso.

-Pero ella ama a Newt...

-¿Amo a Newt?- esa pregunta se proyectó en su mente sin saber que había llegado hasta el pensamiento de Gally como un eco

-Ella... ¿no lo ama?

Volvió su mirada hacia Eileen, quien solo observaba hacia el frente con la mirada pérdida. ¿Podría ser? ¿Podría tener una oportunidad? Su corto momento de felicidad fue interrumpido por el sonorífico aullido de un penitente.

-¿Oíste eso?

-Sí...

-¿Qué fue...?- Gally colocó su mano sobre la boca de Eileen

-Shhh... no hagas ruido... Por aquí

Tomó la mano de Eileen y la condujo por un pasadiso, el sonido del penitente se hacia cada vez más fuerte, estaba muy cerca. Pararon frente a un enorme muro cubierto de lianas.

-Sube, sube

Eileen tomó las lianas y comenzó a trepar, al llegar a la cima permanecieron callados y agachados para evitar ser vistos por la criatura.

-Tengo miedo Gally...

El penitente apareció doblando la esquina desplegando sus brazos metálicos por su piel viscosa, Eileen tuvo que volver la mirada hacia otro lado reprimiendo las arcadas que las naúseas le provocaban. La criatura siguió de largo su camino, el resto de la noche la pasaron ahí mismo, al primer rayo de luz que cayó sobre el rostro de Gally hizo que éste abriera los ojos con dificultad, frente a él el rostro pacífico de Eileen, se habían quedado dormidos.

-Buenos días... Ah claro... no me escuchas

-Sí lo hago y deja de mirarme, me pones nerviosa- una sonrisa se proyectó en el rostro de Eileen

-¿Qué? ¿Puedes oírme?

-Ahora sí ¿asustado?

-Más bien sorprendido. ¿Por qué no despiertas y nos vamos? Ya es de mañana

-Bien pero con una condición...

-¿Cuál?

-¿Me cargarías en tu espalda? Quiero dormir otro poco

-Bien pero levántate ahora

-Okey- sonrió satisfecha

Ambos bajaron del enorme muro, Eileen subió a la espalda de Gally y quedó profundamente dormida.

-Te daré indicaciones

-Bien...

Gally fue siguiendo las indicaciones que Eileen le daba para regresar al Área, a menos de 10 metros Eileen despertó y bajó de la espalda de Gally para seguir caminando.

-Gracias... lo necesitaba

-Sí, claro

-Ya casi llegámos. Anda

Eileen corrió sonriente, Gally seguía caminando con la mirada baja, ella volvió su mirada hacia él confundida.

-¿Gally?

-¿Eh? Ah, no ocurre nada. Continuemos

Sonrió ligeramente, Eileen regresó a su lado y besó suavemente su mejilla. Sabía que no estaba bien y al igual sabía muy bien por qué.

-Es mi corazón... sólo dame tiempo para pensar

-Está bien

Gally tomó su mano y siguieron caminando, a lo lejos divisaron la enorme puerta abierta, Eileen soltó su mano y corrió hasta llegar a la puerta y Gally tras ella, al entrar se encontraron con varios Habitantes arrimados ante la puerta para verlos llegar. Gally miró sonriente a Eileen hasta que algo inesperado se hizo presente. Un golpe certero se enganchó a su mejilla tirándolo al suelo con un dolor punzante, miró hacia arriba y ahí estaba Newt con rostro furioso.

-¡Newt! ¿Qué te ocurre?

-¿Qué me ocurre? En lugar de detenerte este shank te siguió

-Él fue el único que confió en mi ¿sabes?

-¿Y crees que yo no lo hice?

-¡No por lo que escuché! ¡Tú le dijiste a Alby que no permitirias que me convirtiera en corredora! ¿Acaso me tienes tan poca confianza?

-¿Qué no lo entiendes? ¡Trato de protegerte! No como éste shank

-Bueno pues ese "shank" es el único que ha creido en mi, él también quiere protegerme, pero aún así apoya mi desición porque sabe de lo que soy capaz... Y no lo duda

Gally se irguió poco a poco con el labio sangrante, Newt lo miraba con rencor.

-¿Sabes que ocurrió aquí mientras no estuvieron presentes?- escupió las palabras dejándo a todos mudos- ¡Se llevaron a Alby! ¡Los malditos penitentes se lo llevaron!

-Alby...

-¡Tú cállate garlopo! Esto es tu culpa

-¡Newt déjalo!

Newt bajó su puño y se retiró, Eileen cayó al suelo cubierta de lágrimas, Gally corrió hacia ella arropándola con sus brazos.

-Newt tiene razón... Soy un imbécil

-Tú no tienes la culpa Gally, está frustrado

-No llores... No lo hagas

-Soy una idiota...

-Tú no lo entiendes. Tú eres una linda chica, de sentimientos tan sinceros y particularmente bellos. Tú eres única

-Gally...

-Siempre serás feliz... Te lo prometo

Por el rostro de Gally se deslizaron algunas lágrimas traicioneras, provocadas por el mismo dolor de Eileen...

-Eileen... Te amo...

-Gally...

Ambos lloraban en el suelo, Eileen encondía su rostro en el tórax de Gally mientras que este dejaba caer sus lágrimas al suelo, levantó el rostro de Eileen y la miró a los ojos.

-Estás sangrando...

-Eso es lo de menos...

Acercó con ternura sus labios a una de sus mejillas y plantó un corto beso, no le importó el dolor o la poca sangre que dejara sobre ella. En la obscura entrada del bosque un par de ojos obscuros miraban con recelo y tristeza aquella escena.

-Me las pagarás Gally... Lo juro