Introducción

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  Su nombre era una bendición, y sus actos eran milagros

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  Su nombre era una bendición, y sus actos eran milagros. Su nombre era Elí pero para todos ellos era nada más ni nada menos que el hijo de una buena familia y heredero del último Shane.
  Su don con las babosas era único, y era una de las cosas que el clan sombra admiraba del muchacho. Aparte de ello era bastante hermoso, bello, una excelencia traída del supuesto mundo ardiente, leyenda de mitos, lugar de fortunas y riquezas.
  El hijo de Shane estaba destinado al Clan sombra y viceversa. Cada ocasión en la que se veían era absurdamente conveniente o lógicamente desagradable.

Su primera cruzada fue inapropiada, y bastante escandalosa.

Pero ahora debían estar más cerca que antes, no era una admiración lo que sentían ellos hacia el Shane, era un deseo. Un deseo intenso y bastante ocurrente en ciertas épocas del año.
La belleza del Hijo de Shane se veía más detallada, mucho más brillante y más hipnotizador que antes. A veces su descaro lo hacía ver atrevido e incluso desafiante para el Clan, pero eso era lo de menos, ¿verdad? .

El clan sombra decidió llevarse al Shane, y con ello cumplir con el deseo que tenían, darle la  »Marca Oscura« y hacerlo oficialmente miembro del clan.

—Bueno, ya estoy aquí. ¿Para que me quieren? —. Pregunta el Shane.

El adolescente era actualmente el centro de atención, como si de una elemental se tratase todos hicieron una reverencia ante el, Eli también hizo una reverencia ante ellos, se puso el Sombraductor para así poder entenderlos, y así comunicarse con ellos y miro al líder de todos ellos.
—Haz logrado superar obstáculos imposibles para los de tu especie, es por ello que te otorgó el poder de la Marca Oscura, una marca sagrada con la cual recibirás el poder de comunicarte con nosotros sin usar el infame Sombraductor y gozarás de muchos de nuestros dones a su debido tiempo—.recitó el líder del clan.

El resto del clan se acercó al Shane, entre ellos se escuchaban los murmullos de deseo ante el chico, el cual no pudo comprender lo que decían. El Shane sonrió tímidamente, estaba orgulloso de si mismo.

Una iniciación había empezado, todos alrededor del joven Shane. Todos allí tenían una fandango en sus manos, menos Elí y el Líder del clan, el cual recitó unos susurros mientras camino hacia el Shane, el cual estaba nervioso.

—Dame tu mano—, Elí dio su mano derecha, y dio un leve suspiro. La bestia recitaba susurros en la mano del Shane, el cual empezó a sentir un pequeño dolor de cabeza. Ese dolor de intensificó a medida que los susurros se escuchaban más fuertes, ya no eran susurros eran como alabanzas. Sentía que algo lo quería tirar al suelo pero no iba a ceder, sus piernas parecían perder la fuerza y no podía ver bien. Sintió una punzada muy fuerte en su mano derecha, y el dolor aumentaba. Al momento de recitar las últimas "palabras" el Shane al fin cayo desmayado.

•••

Despertó un tanto confundido, no sabía que había pasado luego de aquella especie de rito. Su cabeza dolía y su mano derecha no dejaba de arder,
—Elí, ¿estas bien? —, pregunto la pelirroja a su lado.
El Shane miro al alrededor, veía las cosas aún más cercanas de lo que estaban y sentía su cuerpo arder. Soltó unos pequeños quejidos del dolor, a lo cual la pelirroja se alarmó.
—No te esfuerces mucho, deberías descansar —. Escucho esa voz proveniente de alguna dirección.
—¿Junjie?—, buscó por todos lados con la mirada al asiático, hasta que miro a su lado.
Se dio un susto al verlo tan cerca. Su mano empezó a temblar, el ardor se convirtió en una apuñala directo al centro de su mano.
—¡Auch!, eso si duele—, su visión estaba incrementándose, las cosas que estaban aparentemente lejos de el, lo tenía en la cara. Empezó a asustarse aún más, su visión lo tenia confundido sintió un remoto escalofrío sobre su espalda.

Cuando se sintió mejor y más controlado, decidió bajar las escaleras como normalmente suele hacer, pero la gravedad tenía otros planes. Al dar el primer paso en la escalera, su visión  de golpe, aumentó. Al percatarse de aquello retrocedió.
—¿Eli?, ¿que tienes? —, la voz del asiático lo saco de si. Al momento en el que Junjie se acercaba a Eli, el adolescente podía sentirlo, podía sentir sus pasos en el suelo.
En un paso en falso, el Shane cayó de las escaleras, al tratar de retroceder.
—¡Eli! —. El descendiente de Yang miro al Shane, un poco apenado por lo que le paso.
—¡Lo siento!—.

 —¡Lo siento!—

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➤; ʟᴀ ᴍᴀʀᴄᴀ ᴏsᴄᴜʀᴀ.↶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora