Capítulo 4

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Lorenzo salió de la casa tan rápido como podía ir, ayudaba a Guido a caminar que casi no podía sostenerse en pie. La herida del puñal le había echó botar mucha sangre y estaba muy débil. Lorenzo le tapo la herida como pudo, no era un experto en primeros auxilios. Fue hasta una casa del pueblo sin que nadie lo viera y robo un caballo, comenzó a cabalgar a toda prisa hasta el puerto. Le faltaba poco y noto como Guido perdía el conocimiento. Noto como su piel se calentaba, por dios, la temperatura de su cuerpo empezaba a subir. Había llegado al pueblo, ahora solo tenía que llegar al muelle donde estaba el barco con sus compañeros. Corrió por todo el muelle montado en el caballo y subió al barco. Estaban todos reunidos ahí haciendo chistes y bebiendo ron.

-Lorenzo, no vez que acabamos de arreglar el barco-Bromeo Massimo por el caballo sin darse cuenta de la situación.

-No es tiempo para bromas-Lo reprocho Lorenzo.

Se bajó del caballo y bajó con mucho esfuerzo a Guido que no podía sostenerse y respiraba muy agitado.

-Qué le pasa?-Pregunto Bianca.

-Está envenenado, debemos ir al otro lado de la isla-Dijo muy rápido.

Todos comenzaron a hacer preguntas sobre lo que había ocurrido. Se encontraban muy asustados.

-No es el momento. Que alguien ponga el barco a andar. Ya os lo contare todo.

Todos reaccionaron y comenzaron a trabajar para llegar lo más rápido posible al otro lado de la isla. Mientras que Lorenzo entro en la habitación de Guido y lo acostó en la cama. En unos minutos el barco ya estaba rodeando la isla, Lorenzo salió del cuarto y fue abordado por Bianca.

-Qué paso?-Le pregunto a punto de explotar.

Lorenzo no contesto y bajo la cabeza. Sabía que todos iban a protestar por el echo de que fueran solos. Bianca lo tomo por la camisa y lo jalo hacia ella.

-Dime que fue lo que paso-Grito tan alto que se oyó en todo el barco. Pero nadie se atrevió a meterse en la bronca, solo Massimo. Paso su brazo por su estomagó y la aparto de Lorenzo tranquilizándola.

-Venga Lorenzo, que fue lo que paso?-Está vez fue Massimo él que pregunto.

Lorenzo comenzó a relatar lo ocurrido y mientras lo iba haciendo era constantemente interrumpido por Bianca que no paraba de reprocharle sus acciones.

-Pero como se te ocurre hacerle caso e ir los dos solos a matarlo.

-Era una buena idea. No debíamos llamar la atención.

-Claro, y salió tan bien que ahora Guido está muriendo.

-Pero serás tonta. Ya te he dicho que no debíamos llamar la atención y con un grupo grande de nosotros por la ciudad lo hubiésemos alertado.

-Tú eres él tonto. No vez lo que paso, está ahí a punto de morirse y fue por hacerle caso con sus locuras. Es que me dan ganas de.

Entonces Lorenzo vio el golpe que venía y logro desviarlo con su mano. Bianca no paro, siguió lanzando puñetazos hasta que estuvo tan cerca que cuando Lorenzo lanzo un golpe ella logro sujetarlo y lanzarlo al piso. Se posiciono encima de Lorenzo, pero él puso sus piernas en su estomagó y la hizo bolar por encima de él. Massimo que se había quedado paralizado los veía rodar por el suelo dándose golpes y corrió hasta ellos, tomo a Bianca mientras otro chico logro sujetar a Lorenzo.

-Basta ya, no parecen compañeros. Estoy seguro de que Guido les pondría un castigo por esto.

Seguían enojados, no iban a perdonarse tan fácilmente. Bianca se fue a la habitación de Guido echa una furia, entro dando un portazo.

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