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El pequeño despertó de golpe debido a la gran pesadilla que estaba teniendo, sintió su garganta seca y decidió ir a la cocina a por un vaso de agua.

En el pasillo empezó a escuchar unos ruidos que provenían de la habitación de sus papás, algo realmente lo perturbo.

Ya no quiero... Detente...

Estas loca, regrese y Baek estaba dormido, así que te toca a ti.

Por favor.. Me duele... --sollozo.

No me importa.

El pequeño corrió hacia su habitación para hacerse el dormido y finalmente caer en un sueño profundo, a las 8:30 de la mañana sonó la alarma de astronauta que tenía el pequeño haciéndolo despertar.

Restrego sus ojos con sus pequeñas manos para bajarse de la cama y ponerse sus pantuflas de tigre, abrió la puerta y bajo al comedor en donde estaba su madre haciendo el desayuno.

-Hijo...

-Buenos días.

-Ven quiero hablar contigo, siéntate a comer.

El pequeño obedeció y comenzó a comer mirando a su madre preocupada ¿Qué le ocurría?

-Verás... A partir de ahora no puedes dormirte antes de que venga tu papi.

-¿Por qué?

-Porque cuando tu duermes papi lastima a mami, y tu no quieres que me lastime ¿verdad?

El pequeño negó.

-Entonces tendrás que quedarte despierto.

-Esta bien --respondió.

-Ahora sigue comiendo.

En la tarde el pequeño salió al parque junto a su madre, se encontraba jugando hasta que vio que hablaba con un hombre, intrigado bajo del tobogán y corrió a abrazar a ésta.

-Baek... Te presento a Sunoh, Sunoh él es mi hijo Baek.

-Así que él es.. Mucho gusto pequeño.

-Hola --dijo el menor.

-Sigue jugando corazón, en un ratito nos vamos.

-¿Quién es él?

-Él es... Un amigo.

-¿Amigo? ¿Le dirás eso al niño?

-Kang..

-Yo soy el novio de tu mamá --sonrió.

-¿Y papi? --preguntó el pequeño confundido.

-Él... Mi amor, necesito que me prometas que no le dirás a nadie, ni a tu papi --se agachó a su altura.

-¿Él nos sacará de su casa? --preguntó ilusionado.

-Sí, pero hay que mantener esto en secreto en lo que seguimos ahí ¿si? ¿Se lo prometes a mamá?

-Ajá --asintió con una sonrisa.

De repente una mano empuja a la azabache haciéndola caer al suelo, el pequeño asustado socorre a su madre hasta ver de quien se trataba.

-Así te quería agarrar maldita perra --grito molesto.

-Amor, puedo explicarlo, el es un amigo nada más...

El peli negro la pateo para después empujar al desconocido para que se largara, agarro a ambos del brazo para llevarlos a casa, entrando empujo a la mujer contra el sofá comenzando a desabrochar su cinturón, el pequeño aterrorizado corrió a su habitación cerrando su puerta con seguro.

Ágape || Baekmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora