Un chico con el corazón hecho trizas gracias a un pasado desastroso, conoce a lo que parece ser su salvación en lo que ante sus ojos era una biblioteca abandonada.
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~Historia totalmente mía cualquier similitud con alguna otr...
"Buenos días Binnie". Hablo mientras cierro el broche del casco.
"Hoy no vayas rápido".
"Claro". Digo y él se monta.
Llegamos y antes de abrir la librería me golpea con el casco en el hombro un poco enojado debido a que a mitad de cuadra se me ocurrió acelerar.
"Un día de estos vas a matarme".
"Nah, te amo demasiado para eso". Digo y él se sonroja furiosamente.
Me acerco y junto nuestros labios en un suave beso, mientras con mis dedos acaricio sus mejillas, creo que definitivamente son lo que más me gusta de él.
"Tengo que irme Binnie". Digo al separarme.
"Pero aún no es hora". Sus labios forman un puchero y sus ojos me miran suplicantes.
"Lo siento Bin pero Chan necesita ayuda para cambiar las luces del estudio". Él baja su mirada y asiente. "Saldré antes de acuerdo".
"¿De verdad?". Alza su cara un poco más animado haciéndome sonreír también.
"Lo prometo". Doy un corto beso en sus labios y me dirijo a la moto, lo miro una vez más y arranco.
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"Deberías contratar a alguien para que haga esto".
"No necesito que nadie venga a hacer algo que yo puedo hacer solo".
"Claro que puedes hacerlo solo, por eso estoy aquí". Digo con fastidio, Bangchan suele ser muy testarudo.
"Cállate y pasame el otro bombillo ya veras como pronto tenemos luz". Le paso el dichoso bombillo mientras que le sostengo la escalera. "Por cierto ¿qué tal vas con Changbin?".
"Normal supongo".
"Normal eh, sí suenas enamorado". Ruedo mis ojos ante su comentario.
"No sé que quieres que te diga todavía no llevamos tanto tiempo para saber si somos la pareja perfecta o no".
"La pareja perfecta no existe pero si es cierto que desde que estás con él tu ansiedad de las paletas a disminuido". Suelto la escalera y toco mi boca, llevo mi mano al bolsillo y lo siento lleno de los dulces, en circunstancias normales ya me abría comido tres. "¡Felix joder! no hagas eso". La voz asustada de Chan hace que lo mire. "Casi muero".
"Perdón". Digo y vuelvo a agarrar la escalera para que deje de tambalearse. "La verdad no me había dado cuenta".
"Lo sé, pero llevas como tres días sin meterte nada a la boca". Sus palabras me sorprenden y hacen eco en mi cabeza. "Listo esto ya está, prende el interruptor". Hago caso y me dirijo al botón, apenas lo toco y el estudio vuelve a iluminarse. "No pongas esa cara y alégrate hace sólo unas semanas casi gastabas todo tu salario en esos dulces".
"Lo sé pero nunca imaginé que tendría ese efecto en mí". Pego mi espalda a la pared y me recuesto en esta. "Con él me siento...en calma pero de una forma diferente yo...nunca me sentí así con nadie". Digo despacio buscando las palabras correctas para que mi amigo me entienda.
