Nueva normalidad

1.6K 87 98
                                    


[Espacio válido para tirarle lo que quieras a la escritora por tardar tanto en subir capítulo]

*Sale de debajo de todo lo que le arrojaron mientras intenta limpiarse un poco*

Bien, no creí que tirarían tantas cosas, ¿en serio pasaron casi más de seis meses desde que actualice esto? Ok, eso es un nuevo récord de inactividad en esta cuenta.

Así que sin más preámbulo, comencemos.

Notas abajo: Importante leer

°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~

La mañana había empezado caótica si Wukong tenía que ser honesto, que el rostro de tu ex-mejor amigo, pasando a ser tu ex-enemigo y después convertido en "realmente no sabemos que somos ahora pero nos llevamos lo suficientemente bien para no matarnos entre nosotros" éste a una distancia razonable de tu cara y sea lo primero que ves al despertar era desconcertante por si solo.

Fácilmente podría haber saltado, gritado y haber exigido respuestas a Macaque, despertandolo en el acto, sobre el porqué estaban tan cerca el uno del otro, si no fuera por que se dio cuenta del bulto que estaba en el medio de ambos, bajó la mirada hacía el humano dormido en su regazo, preguntándose que hacía hay. Notó las características físicas que más parecían destacar de él, cabello rojizo, una de sus cejas partidas y algunas pecas esparcidas por su cara.

Aún sin estar muy consciente de que hacía hay, Wukong dio un vistazo rápido a su alrededor, recién notando que estaban acostados en el piso de la tienda de Pigsy, el pequeño reloj del local marcaba que eran casi las seis de la mañana, también vio que junto a Nezha y Mk había un pequeño grupo de adolecentes y un anciano aún durmiendo, su mirada rápidamente volvió hacía Macaque y al niño acostado a su lado, y como si le hubieran tirado un balde de agua fría, recordó todo lo que sucedió ayer, la búsqueda, llegar a Pigsy Noodles con las manos vacías, el encuentro repentino, conocer a su hijo.

El adolescente acurrucado entre él y Macaque era su hijo, y estaba aquí, con ellos. Todo era algo desconcertante, lo habían estado buscando durante un tiempo éso es verdad, pero ahora que lo entraron Wukong no estaba muy seguro de que hacer después, maldijo un poco su pereza por no leer ése libro sobre "Integrarse a la vida de su hijo si no estuvo en ella" que Sandy y Tang le dieron, admite que sería útil ahora porque, realmente, no sabía por dónde empezar, bueno, tal vez el entrenamiento que el pequeño príncipe solicitó anoche, pensando más en la interacción de ayer.

Habían acordado que hoy empezaría el entrenamiento a primera hora y todavía no tenía absolutamente nada planeado, ya era agotador tener que pensar en lecciones, ejercicios y ser un buen maestro únicamente para Mk, sin contar los casi ataques al corazón cuando en niño se pone en en demasiado peligro, ¡¿y ahora también tenía que ser un buen maestro para Jay?! ¡Apenas podía con uno y ahora eran dos!? No, Wukong calmate, recuerda lo que dijo Sandy, no tiene que hacer todo solo, estaba bien pedir y recibir ayuda, debe al menos intentar aceptarla. Quizás podría preguntar a Mk si podría ayudar en el entrenamiento del príncipe mono, al menos hasta que ambos estén en el mismo nivel y de hay avanzar normalmente tanto con Mk como con Jay. Ese parecía un buen comienzo.

— ¡Muy bien, todos arriba! ¡Tengo una tienda que atender!

Wukong casi había saltado de la sorpresa cuando Pigsy apareció gritando, entrando al local por lo que asumió era la puerta trasera que daba al callejón, el grito fue suficiente para despertar de golpe a todos los presentes y más de uno se quejó por ser sacado tan abruptamente de su sueño, siendo él y el anciano, que curiosamente tenía un nombre parecido al suyo, los únicos que se levantaron sin problemas. A su lado Jay y Macaque también comenzaron a despertar, sorprendiendo lo un poco cuando notó que ambos hacían gestos y estiramientos similares mientras se levantaban quejumbrosos del piso.

Un momento. . . ¡¿Mis Padres Son Monos?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora