Pedro
Lo iba a matar.
El cabronazo de Raúl ya se a fijado en mi conquista, era evidente con ese "beso" en la oreja que le dio al vega.
Yo lo besaría mejor.
Y en otros lugares.
Mierda concéntrate Pedro.
Al ver que el vega iba para el baño decidí seguirlo , no se iba a librar tan rápido de mí .
Al entrar lo ví y antes de que pudiera cerrar la puerta del baño senté y la cerré detrás de mí.
-¿Qué mierda haces?-me dijo volteandose a mí.
-Estar a solas con lo que es mío -le di una de mis mejores sonrisas coquetas y eso le puso nervioso.
Guapísimo.
-Yo...- no soy ...tu-tu...yo-susurró temblando pero a la vez queriendo demostrar que no lo está.
-Oh...claro que si , y métete esto en tu jodida cabeza , no quiero que se te acerque Raúl.
-Raúl...-dijo en un leve susurro sonrojado.
-El mismo, así que no te le acerques mí tilín -lo mire de arriba a bajo y me agaché.
-Y créeme, yo te puedo causar diarreas más fuertes que con un solo simple beso en la oreja...
Me pegó una patada y caí en el suelo mientras esté salía corriendo .
Iba a ser mío
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VEGA
Oh Dios Pacheco mío.
No me había puesto más nervioso en mi vida, solamente quería desaparecer.
Ya (por fin) llegué a la clase de pachequismo y evidentemente me regañaron.
Me senté otra ver al lado de la niña rata esta.
-¿Tú crees que el dios pacheco nos escucha?-preguntó está.
Ya estaba arto de esta chica.
-Estamos en pleno siglo XXI, el dios pacheco no existe.
Toda la clase me miró.
-¿QUÉ DIJISTE? -gritó uno.
-La verdad pacheco no exist-...
Me tiraron una silla.
Y la esquivé.
-¡MATEMOSLO!
-SIIIIIIII-exclamaron todos a la vez.
Mierda.
Debía de salir de esta clase.
Corrí rápidamente por los pasillos sin apenas aliento en los labios, estaba muy nervioso, podrían matarme con esas sillas y todo por un estúpido Dios que nadie cree.
De repente alguien me tiró del brazo y me metió en un aula donde no había nadie.
-Te salvé vegita.
Mierda.
Raúl.
