♬ Sweet Bad Boy ♬ Louis Partridge ♬

-𝟏𝟕- 𝓡𝓾𝓶𝓸𝓻𝓮𝓼

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A pesar de que siempre sonreías...casi nunca me daba cuenta cuando sufrías. Porque tú sonrisa es lo que te caracteriza ¿Verdad,_____?

Cuando entré a la escuela y te vi nuevamente no estabas sonriendo como siempre lo hacías, al contrario estabas sombría y el día nublado no ayudaba para nada, parecías una presa buscando un escondite. Me pregunté que es lo que te pasaba y te observé con un nudo en la garganta porque temía que en cualquier momento lágrimas salieran de tus ojos y yo iría de inmediato a limpiarlas.

Te sentí tan lejana a mí que tenía la necesidad de acercarme y abrazarte. Pero en ese momento no podía entender por qué tú sonrisa no se asomaba siquiera un poco.

Lo pensé demasiado.

Hasta que lo descubrí todo.

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Los chismes vuelan, dicen por ahí. No podría estar más de acuerdo, sinceramente, pero aún así me sorprende demasiado la manera en la que a la gente le encanta enterarse de la vida de los demás aún si no los conocen en absoluto.

Jared le había contado a algunos de sus amigos que se encontraban en mi escuela sobre nuestro supuesto "encuentro amoroso", esos amigos le contaron a otros amigos y estos otros amigos a otros amigos y así hasta llegar a esto que titulo: El chisme del día~

Y como dije antes aunque nadie me conociese realmente, de cualquier manera les importaba y daba mucha curiosidad que la chica totalmente irrelevante de su escuela mediocre tuvo relaciones con uno de los chicos más relevantes de otra escuela mucho más importante. El chisme del día~

Aún así toda este absurda polémica me estaba quitando mi ritmo cardíaco normal. Antes de ir a la escuela me encerré en mi baño y no pude dejar de llorar porque estaba experimentando miedo real. Un miedo tan grande que no podía ni respirar con normalidad. Y aunque tenía miedo me obligué a ir a la escuela simplemente para aparentar tranquilidad con mi hermana y mi madre.

Entonces llegó el momento en el que tenía que entrar por la puerta principal llena de gente. Evité el contacto visual, mantuve mi mirada en el piso y traté de no salir corriendo, aún así creía escuchar los murmullos y risitas burlonas de la gente. No sabía si era mi cabeza jugando conmigo, pero en ese momento nuevamente las lágrimas se apoderaron de mí.

Cuando entré a mi salón todos voltearon, incluido Louis ¿Se habrá enterado de ese rumor absurdo? Seguramente sí. No podía ver a nadie a la cara, estaba muerta de la vergüenza, estaba avergonzada por algo que no había hecho y eso me hacía sentir aún peor.
Me imaginé a mi misma gritándole a todos que todo lo que dijo el imbécil de Jared era mentira, pero, al igual que yo mi voz no podía salir de su escondite.

Me senté en mi pupitre y empecé a reflexionar, ayer mi padre se había ido de casa para irse con su otra familia y hoy trato de lidiar con esta mierda. Ya decídete maldita vida ¿Por qué no me das problemas por separado? No necesitaba un dos por uno.

— ¿Como te encuentras?— preguntó Samantha sentándose en el pupitre de en frente. Cuando subí la mirada para verla se veía realmente preocupada.

— Nada bien— dije simplemente.

No quería dejar salir mis lágrimas.

Llorar y que me vieran todos no era una opción.

— Qué piensas hacer?— preguntó.

— En este momento no tengo la menor idea, tengo ganas de golpear la estúpida cara de Jared, pero siento que en este momento no tengo las fuerzas, simplemente quiero...— En ese momento el profesor de matemáticas entró al salón y no pude terminar mi frase, Samantha se fue a su asiento.— Correr— dije para mí misma y en voz baja.