HAIKUS 🎌 (ERURI)

Capitulo 5: Gota de lluvia 💧

Buenas, bueeenaaaas!!! acá les dejo este capitulo lleno de HARTO DRAMA jejeje

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Levi estaba en verdad ansioso al llegar al hospital, en cuanto Zeke se estaciono el pelinegro fue el primero en bajarse del vehículo. El Dr. Grisha se adelantó para checar junto con el médico de Kuchel los resultados de los estudios del día de hoy. La lectura del electrocardiograma salió con leves alteraciones, aun así, el medico autorizo sin problema la visita del menor.

Al caminar rumbo a la habitación de su madre, Levi comenzó a sentirse realmente nervioso, Zeke lo noto así que lo detuvo un momento en el pasillo antes de entrar.

- Tranquilo, Carla hablo con ella hace poco, ya sabe que vendrás a verla – dijo para intentar tranquilizarlo. Levi lo miro sorprendido al escucharlo.

- Ya veo, gracias – dijo en voz baja el pelinegro.

- Pasa, tu mamá te espera – Zeke le sonrió mientras abría la puerta del cuarto.

Cuando entro al cuarto vio a su madre sentada en aquella cama. Se veía realmente hermosa usando un lindo suéter rosado sobre sus pijamas de hospital. En cuanto lo vio ella abrió sus brazos con una gran sonrisa.

- Cariño ven! Abrázame - Levi sintió sus ojos cristalizarse y sin más corrió para abrazar a su querida madre.

- Mamá te extrañe mucho – soltó con una voz llena de añoranza.

- Yo también mi amor. Aunque no estuviéramos juntos, todos los días te tuve presente- en eso Kuchel saco un trébol de cuatro hojas enmicado. En cuanto Levi lo vio, recordó el día que lo encontró en aquel basto campo. Para el menor aquel trébol era en verdad su valioso amuleto, asi que se lo dio a su madre el día que se mudó a Japón.

- ¿Aun lo guardas? – pregunto con sorpresa el menor.

- Por su puesto. También guardo cada artículo de tus torneos de Kyūdō. Zeke y Eren siempre me ayudan para buscarlos en internet. Cariño estoy tan orgullosa de ti – Al escucharla Levi no pudo mas y derramo unas lágrimas.

- Gracias mamá, escucharte decir eso me hace enormemente feliz – Kuchel beso la mejilla de su hijo mientras acariciaba su cabello.

- Hijo mio, ser tu madre ha sido lo más maravilloso que me ha pasado en la vida

Levi sonrió con melancolía al escuchar aquellas palabras. Durante 13 años no paso ni un solo día en que él no anhelara el amor de su madre. De igual manera, Kuchel había sufrido tanto por el hecho de no poder ver a su hijo. A pesar de no verse durante todos esos años, ellos guardaban grandes sentimientos de amor y anhelo el uno al otro.

Después de un par de horas, una asistente entro a la habitación para verificar la lectura del electrocardiograma conectado a Kuchel. Por orden de su médico se tenían que tomar varias veces al día dichas lecturas para verificar que todo estuviera en orden.

- Mr. Ackerman, el Dr. Jeager me pidió que le recordara que ya es hora de la comida

- Amor ve a comer tranquilo, esto tomara algo de tiempo – dijo Kuchel refiriéndose a la revisión con los aparatos.

- Está bien, nos vemos en un rato mamá – dijo a su madre con una tierna sonrisa.

Cuando salió del cuarto se topo con Zeke, tenía puesto una clásica bata blanca de doctor. Al verlo, Levi no pudo evitar reírse. Aún seguía sin poder creer que aquel molesto rubio que conoció de niño fuera ya todo un médico cirujano.