Mi Juego de Heroes

Capitulo 58: Lección 54

Traté de ignorar el choque y el sonido de espada contra espada detrás de mí. Native estaba muy por debajo de cero HP cuando llegué. Solo un aspecto de su talento Quirk fue lo que lo mantuvo no solo vivo sino consciente. Si hubiera llegado dos minutos después, estaría muerto. Había algo más que el profundo corte en su estómago. Eso fue en realidad múltiples cortes parcialmente superpuestos. Y había docenas de cortes más pequeños por toda la cara, el pecho y los brazos. Contó una historia. Incluso después de que Native debería haber caído, el Héroe se mantuvo despierto. Y Stain siguió cortándolo, tratando de obligarlo a bajar. Native no se había dado por vencido hasta que su HP estaba profundamente en los negativos, y su Stamina se agotó.

Tuve que pellizcar las venas y los huesos de Native, incluso mientras inundaba su pecho con energía curativa. No me había dado cuenta, esa vez en el Calabozo de Mordred, pero Ki Healing no funcionó tan bien en alguien con el estado Moribundo. Esa habilidad sobrecargó efectivamente la curación de una persona con mi Ki. Y alguien que se estaba muriendo... Efectivamente no se estaban curando. O su cuerpo estaba tratando de sanar, pero el daño lo había abrumado. Así que temía no tener suficiente energía para que Native volviera a cero o más. Alcancé una bolsa en mi cinturón. Hice la pantomima de abrirlo, para ocultar que estaba sacando una poción de resistencia de mi inventario. Lo bebí rápidamente. Pero todavía no estaba seguro de si sería suficiente.

Todavía tenía mi poción curativa de la mazmorra del Auricular. Quería guardarlo para uno de los Caballeros, o Nezu. Alguien que ya sabía sobre el Gamer. O para Eri. Pero si tuviera que hacerlo, lo usaría en Native. Me ocuparía de las consecuencias después.

Pero todavía estaba distraído. Mordred gruñó de dolor o molestia. Abrí la ventana de la Fiesta y vi que su HP había bajado un poco.

Ella era buena. La había visto pelear en clase, en las Mazmorras. Y había mejorado notablemente en los últimos dos días. Di lo que quieras sobre Torino-sensei y sus métodos de entrenamiento, fueron efectivos. Y Mordred debería haber tenido la ventaja de los números simples. Tenía tres espadas flotantes, además de sus pesados ​​guanteletes. La armadura de su disfraz se había mejorado después del ataque de la USJ, y los guanteletes que cubrían sus manos y muñecas deberían haber podido bloquear las espadas de Stain. A menos que su Quirk de alguna manera mejorara las cuchillas.

Pero este era Mancha. Había matado a once Pro Heroes y deshabilitado permanentemente a otros ocho. Eso sin contar Ingenium ni ninguno de los ataques no confirmados que se creía que eran el Hero Killer. Ingenium era un velocista y ocupaba el puesto 43 en el ranking de héroes japoneses. Y Stain pudo derrotarlo sin que Iida-san determinara cuál podría ser el Quirk de Stain. Las víctimas de Stain abarcaron toda la gama; cuerpo a cuerpo a largo alcance, rápido a fuerte a resistente. El único tipo que el asesino no había atacado eran los Héroes de tipo telepático o presentiente. Al menos que yo fuera consciente.

Además de eso, Mordred todavía sufría la condición de exceso de confianza. El hecho de que él pareciera ser un espadachín y tuviera dos espadas contra ella tres, probablemente solo la incitó.

Necesitaba estabilizar a Native lo más rápido posible para poder ayudar a mi amigo.

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Las tres espadas flotantes salieron de la sombra, pero Stain las bloqueó con facilidad. El número hizo cosquillas en la memoria del asesino, pero por el momento estaba demasiado ocupado defendiéndose. Pero solo por un momento. Luego empujó hacia atrás. Lanzó el cuchillo en su mano izquierda a la figura femenina que parecía estar controlando las cuchillas voladoras. En una sola y suave continuación del movimiento, sacó otro de los cuchillos de combate que cubrían su cuerpo y bloqueó el kukri que apuntaba a su garganta.