Sonrisas amargas y verdaderas

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La ciudad de Musutafu se encontraba a oscuras debido a las nubes de tormenta en el cielo, los edificios destrozados daban una vista de ciudad post-apocalíptica.

Un villano fue azotado en el suelo de tal manera que el concreto se agrietó y el sujeto quedó inconsciente. El responsable del acto esperó a la policía y tan pronto como llegaron los uniformados él se fue.

Ya habían pasado varias semanas desde su último encuentro con la clase A, y lo único que podía hacer ese vigilante de cabello verde era pelear sin descanso para intentar devolver la ciudad a como era antes, pero tal y como había dicho su novia, no podía cambiar todo de la noche a la mañana.

Sin embargo, él no podía descansar, había usado el 100% de su poder para atrapar a criminales de menor rango en la ciudad por 5 minutos seguidos, pero por más que intentara luchar contra los criminales con experiencia de Tartarus, él siempre acababa agotado, no importaba cuanto porcentaje de poder usara.

No era una sorpresa ni para ningún héroe ni para la fuerza policial, él muchacho llevaba varios días sin comer y sin descansar bien, pero todo lo hacía creyendo que hacia un bien en la sociedad, ayudando a las personas que lo necesitaban, cuando el que más necesitaba ayuda en ese momento era él.

En ese momento se estaba enfrentando a un viejo rival y enemigo más grande que había escapado de prisión.

Muscular: No creas que porque me derrotaste la última vez podrás hacerlo de nuevo - dijo de forma burlesca activando su don.

Midoriya no dijo nada y simplemente fue hasta él con su quirk activo y lo molió a golpes en unos segundos, lo tomó con los látigos y lo lanzó hacia arriba antes de colocarse debajo de él y propinarle un puñetazo certero en la columna vertebral, dejándolo caer al suelo inconsciente por el dolor.

Midoriya: Te dije que te dejaría paralítico - mencionó mientras esperaba a la policía.

Izuku podía encontrarse debilitado, pero eso no le quitaría la fuerza que le daba la ira cada vez que miraba a ese sujeto.
Al poco rato los de azul llegaron, Deku estaba a punto de irse cuando el jefe de policía lo llamó.

Tsukauchi: Espera Deku

Midoriya: ¿Qué es lo que pasa? - preguntó mirándolo.

Tsukauchi: Escucha, en verdad agradecemos que te estés esforzando mucho por atrapar a los villanos sueltos, pero creo que ya es suficiente. Debes tomarte un descanso - dijo preocupado.

Midoriya: Agradezco tu preocupación, Tsukauchi, pero no puedo hacerlo, no mientras aún haya personas a las cuales salvar - dijo dándose la vuelta para empezar a caminar.

Pero eso le causó un gran mareo y vértigo que lo obligó a detenerse y sujetar su cabeza.

Midoriya: ¿Qué me pasa? - se preguntó confundido mirando su mano temblorosa.

Nana: Ese hombre tiene razón Deku, debes descansar un rato - dijo seriamente.

Leader: No salvarás a nadie en ese estado - cruzó los brazos.

Ellos me hicieron cambiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora