𝑻𝒉𝒆 𝑵𝒊𝒈𝒉𝒕 𝑾𝒆 𝑴𝒆𝒕 | 𝖡𝖾𝗅𝗅𝖺 𝖲𝗐𝖺𝗇

03

No soy el único viajero
Que no ha reembolsado su deuda

Narrador pov.

Abrió la puerta de su armario para agarrar una sudadera con capucha, y ponérsela, miró de nuevo la fecha: 13 de septiembre.

Solo una cosa podía significar, el cumpleaños de Bella. Por lo que agarró su cuaderno de bocetos, arrancó una hoja, lo enrollo y lo
guardo en mi bolsillo trasero antes de alcanzar a su hermana.

-Te llevo al instituto.-explicó Jeremiah ante la mirada confundida de Angela.

Ella sonrió y rodó los ojos.

-Si, claro. Se que quieres a ver a Bella por su cumpleaños.-repuso Angela con diversión.

-¿Como adivinas?.-inquirió Jeremiah tratando de no sonreír y fallando en el intento. Durante el verano Bella había ido de visita varias veces a la casa de los hermanos Weber, incluso se habían convertido en amigos cercanos.

-Tenemos que apresurarnos si quieres felicitarla.-Jeremiah asintió de acuerdo con su hermana.

Al llegar al instituto, bajó rápidamente del auto mientras su hermana reía por el entusiasmo de Jeremiah.

-¡Feliz cumpleaños, Bella!.-la felicitó Jeremiah al tiempo que la abrazaba.

-¡Shhh!.-Bella desvía la mirada con las mejillas rojas mientras miraba alrededor del aparcamiento para
cerciorarse de que nadie lo había oído.

Él le ignoró.

-Oye.-dice, levantando sus manos.-no es mi culpa que tu no me hayas advertido.-agregó Jeremiah haciendo reír a Bella.

-cierto, debí decirte que no me gustan los regalos y celebrar mis cumpleaños.-comentó Bella con una leve sonrisa.

-La verdad es que Angela me había comentado algo.-admitió Jeremiah encogiéndose de hombros.

-Agradezco que vinieras a felicitarme, ahora tengo que entrar a clases.-dijo Bella en tono resignado, la verdad era que quería pasar tiempo con Jeremiah, él asintió en respuesta.

-Pero antes tengo que darte tu regalo.-dijo Jeremiah agarrando la mano de Bella para que no se fuera.

-No tenías que comprarme nada.-repuso Bella soltando un suspiro.

-¿Quien dijo que lo compré?.-inquirió Jeremiah elevando una ceja. Él saco él dibujo que había hecho y le entregó a la castaña, ella sonrió enternecida por el detalle.

En el dibujo estaban ellos dos. En la  pequeña mano de caricatura de Bella
había un globo en forma de luna, la parte superior estalla y cientos de estrellas salen de él, rodando a través de la página hacia Jeremiah.

-Es hermoso Jeremiah, gracias.-la castaña volteó a verlo y sonrió.

Él pudo ver un brillo peculiar en los ojos color chocolate de Bella. Lo que hizo que él corazón de Jeremiah latiera más rápido al sentirse tan conmovido.

A Bella le pareció de un detalle de lo más lindo. Todo ese momento especial entre ellos desapareció en cuanto Edward apareció.

El cobrizo carraspeo molesto, pero no podía hacer nada para alejar a Bella de Jeremiah.

-Tenemos que ir a clases Bella.-dijo Edward tratando de ignorar la presencia de Jeremiah.

-Voy en un momento.-Le avisó la castaña.

-Después de clases ¿podemos pasar un momento juntos?.-preguntó Jeremiah algo nervioso, Bella lo miró confundida.-quisiera despedirme de ti, mis padres al fin me dejaron viajar y esta noche me voy.-agrega con una leve sonrisa.

Mientras que Bella hace una mueca de tristeza pero entendía que eso era lo que quería Jeremiah.

-¿Cuando volverás?.-pregunta Bella levantando la vista.

-No lo se pero vendré de visita a Forks.-Jeremiah sonrió dulcemente, le frotó los hombros con cariño.-No te vas a deshacer tan fácil de mi.-bromeó.

-Esta bien, pasa por mi después del instituto.-dijo Bella.

Jeremiah asiente.

No es que le desagradara Forks al contrario le gustaba vivir ahí, solo que deseaba poder conocer varios lugares antes que de su enfermedad lo matara algún día.

En cierta forma le preocupa un poco meter en problemas a Bella, no era ciego sabía que Edward estaba celoso. Él no entendía el porque cuando la castaña ponía a Edward en primer lugar en su vida antes que a los demás o incluso de ella.

-¿Estas seguro de irte?.-preguntó Bella mientras ambos daban una caminata por el bosque.

-Me gustaría viajar por el mundo y realmente poder verlo, ¿sabes? No solo el interior de los hospitales. Algún día moriré y bueno me gustaría hacerlo antes de que eso sucediera.-respondió Jeremiah bajando la vista y deteniéndose.

Por un momento se sintió con la dificultad para respirar.

-Lo entiendo solo que te extrañare.-expresó Bella poniendo su mano en el hombro de él.

-En cuanto vuelva a Forks prometo visitarte.-dijo Jeremiah agarrando las dos manos de la castaña.

-Tiene que hacerlo y hablar conmigo de vez en cuando.-Mencionó Bella sintiendo una opresión en su pecho, extrañaría hablar con él, su compañía, la manera en que el le sonreía. En realidad extrañaría todo de él.

Jeremiah la miró por un segundo antes de pasar sus dedos por su cabello. Él es el que se siente demasiado cómodo con la compañia de la castaña. Por un momento se imagino como seria viajar con ella, miro a Bella a los ojos y sonrió.

-Tu cabello tiene reflejos rojos.-dice Jeremiah señalando la luz del sol que entraba por una parte del bosque a su alrededor.-No lo sabía hasta que los vi a la luz del sol. Pensé que era castaño oscuro completamente.

Él corazón de Bella latió con fuerza en  ante sus palabras, y la forma cálida en que la miraba.

-Tus ojos son bonitos.-dice Jeremiah un segundo después, un débil rojo
se arrastra hacia sus mejillas. Él baja de nuevo la mirada y aclara su garganta- Quiero decir, como para dibujarlos.-agregó para que Bella no se sintiera incómoda.

Bella se muerde el labio inferior para ocultar su sonrojo.

-Procura, seguir tu tratamiento.-le recordó Bella sin poder evitarlo lo abrazó, Jeremiah le correspondió disfrutando la calidez de la castaña.

Al separarse él hace un saludo militar.

-Claro que lo haré.-prometió Jeremiah.

Sin embargo él no se fuera ido de Forks al saber lo que pasaría después, ¿Cómo podía imaginar que Edward terminaría abandonando a Bella? Si tan solo se hubiera quedado definitivamente las cosas fueran sido distintas.

Sin embargo Jeremiah volvería para convertirse en alguien demasiado importante en la vida de Bella.