Nacidos en la desgracia y desigualdad. Los caídos fueron maldecidos en los comienzos de la historia de Alteria.
Se dice que el primer rey los condenó a vivir entre la miseria, mugre y muerte. Tan grande fue su traición, que recibieron el peor castigo que ha habido y que existirá: No poder progresar. Ser tratado igual o peor que un animal. Sobrevivir con las sobras de los alterianos.
No se puede vivir así, jamás.
Dandara lo sabe.
Desde pequeña vio lo crudo y malvado que puede llegar a ser el humano. Creció entre la envidia y rencor. No tuvo padre ni madre. Fue criada por un caído hundido en la sed de venganza y el odio hacia la familia real. En la miseria no se conoce el amor, ni la bondad.
Los planes están listos. Los caídos están listos.
La muerte de la reina significa esperanza. Todos saben que el príncipe Archibeld es un hombre asustado, jamás reinará.
Su asesinato no tendrá ni dolor ni lágrimas, ni siquiera sus hermanos lo llorarán.
Con la confianza a su favor, con las estrategias correctas. Los caídos saldrán victoriosos. Dandara está segura de eso.
Pero, ¿qué pasa cuando una llama se enciende en el corazón?. Una emoción reprimida por siglos, nace.
El amor es poderoso, intenso. Pero la venganza y la traición lo son mucho más.
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La maldición de los caídos
Viễn tưởng"En los libros existe una historia de la vida anterior. Así como habrá otra historia de esta vida en la siguiente" -Archibeld Constantino