The Wanted +18 [Completada]

26

Natasha

Desperté en la cama de Jimin, un dolor de cabeza me golpea haciendo que me acueste de nuevo.

—¿Te duele la cabeza? —veo a Jimin entrar y preguntar.

—Solo me duele la cabeza, ¿Y Jungkook? —me inclino hacia adelante.

—Te iré a buscar una pastilla para tu dolor de cabeza —él sale de la habitación y mientras el busca la pastilla, me levanto para ir al baño. Él vuelve y me da la pastilla.

—Gracias, ¿Jimin? —él me mira— ¿Me odias?

Jimin se acerca a mí y me abraza.

—No estoy molesto contigo, Natasha, lo que pasó no fue tu culpa y no te culpo por no contarme, para tí seguramente solo somos un hombre que me paga por sexo así que me supongo que no me dijiste por eso, y a Jungkook y tus amigos seguramente pensaste que te iban a juzgar, por eso no te culpo —él me separa un poco para mirarme a la cara.

—¿Jimin, por qué me tratas así de bien? —él limpia las lágrimas de mis mejillas.

—Porque me gustas, Natasha —lo miré fijamente— Hasta creo que te amo.

Él se acerca y me besa, sus besos tocan algo en mí que pensé que estaba muerto y que K había destruido pero ahora está volviendo a latir. El beso crece cada vez más, quiero sentirlo, quiero y lo necesito en este momento así que también sigo el beso. Nos separamos por falta de aire, él me mira y una sonrisa se forma en su rostro fue tan hermosa que yo tampoco pude evitar sonrojarme.

—Tengo miedo a enamorarme, Jimin y que me vuelvan a herir, no es que no sienta nada por tí pero solo creo que ese miedo no me permite entrar en el romance —los dedos de Jimin me acarician mis mejillas de una manera muy tierna.

—Dame una oportunidad, Natasha, no voy a lastimarme, déjame enseñarte cómo se trata a una mujer, cómo amar a alguien y cómo alguien debe amarte —no puedo evitar llorar en su pecho.

Él no dice nada solo acaricia mi rostro y limpia mis lágrimas.

—No tienes que contestarme en este momento, trata de descansar un poco más, son las 2pm yo te despierto cuando esté la cena, ¿Vale?

Yo simplemente asiento y vuelvo a acostarme, dormí hasta que Jimin me despertó.

—Bella, necesitas comer, no has no desayunado ni almorzado, necesitas cenar al menos —yo me levanto y asiento.

Caminamos hasta la cocina y allí nos sentamos en silencio a comer, él no dice nada ni me pregunta nada sobre lo que pasó, por una parte lo agradezco ahora no quiero hablar de eso la verdad.

—Hablé con Jungkook, mi padre de dijo a ese hombre que estás aquí en Corea pero seguramente mi padre le dirá más o si no es que ya le dijo, mandé a Tae a qué investigara las llamadas que ha hecho mi padre, está noche me traerá información, Jungkook vendrá a cuidarte mientras estoy fuera, mataré a mi padre Natasha, debo hacerlo, ya sé cómo hacerlo, mis manos tampoco están limpias, por eso es que no te juzgo porque sé lo que se siente que lo hagan.

—Jimin... —en sus palabras puedo notar que está más interesado en mi bienestar que en el suyo.

—Quiero que te mudes conmigo a Busan hace poco compré una casa y mi padre no sabe de ella, podemos escondernos allí por un tiempo, puedo traerte aquí a que pases tiempo con tus amigos los fines de semana, solo quiero que estés a salvo —su mirada está conectada con la mía.

—Ok, primero Jimin no quiero que salgas herido, ¿Estás seguro que matar a tu padre es lo correcto? —sujeto su mano.

—Lo tenía pensado si no quería aceptar mi divorcio, hace meses atrás, ya tengo todo planeado, tranquila no te preocupes por mí —yo asiento.

—Está bien, confío en tí, y acerca de lo segundo, me parece buena idea, quiero alejarme un tiempo así no expongo a los demás al peligro.

—Si Tae averigua qué mi padre no habló más con él, puede que K venga a Corea pero no sabe dónde estás, pero si es inteligente sabrá buscar en la cuidad dónde mi padre vive, que es aquí en Seúl así que quiero que vengas conmigo por un tiempo, ¿Sí?

—Acepto, gracias por cuidar de mí, solo tenemos que llevarnos algunas cosas que son importantes para mí de mi apartamento —él asiente y procedemos a terminar la cena.

—Vamos a ver una película, así te despejas un poco —ella asiente haciendo un puchero adorable.

Coloco palomitas de maíz en el microondas para entonces me acuesto a su lado y escojo la película, para cuando la escogemos, ya las palomitas estaban listas, coloco las palomitas en medio de los dos y colocamos la película. Todo era tan romántico, de vez en cuando me sorprendía con un beso en la boca o se robaba la palomita que iba a meter en mi boca, solo podía reír ante eso, él solo hacía cosas para levantarme el ánimo, a veces me tocaba los dedos de los pies haciéndome reír.

Lo abracé varias veces viendo la película y nos quedamos así por un rato, después que la película termino decidimos ver otra ya que yo no tenía sueño, pero a mitad de esta Jimin se quedó dormido, termino la película y me abrazo a él y lo escucho suspirar, no pude evitar mirarlo por unos minutos hasta que me quedé dormida.

Al día siguiente me levanto y Jimin aún está dormido, decido prepararle yo el desayuno y llevarlo hasta su cama, al terminar todo, llevo la bandeja en manos hasta la habitación donde Jimin aún duerme plácidamente, coloco la bandeja a un lado y me subo en la cama, metiéndome por debajo de las sábanas, con cuidado bajo su pantalón deportivo, él se mueve un poco pero no despierta.

Un suspiro de alivio deja mis labios para luego bajar el bóxer, le daré el mejor buenos días que un hombre puede pedir.

¿Quién quiere leer la continuación?