Recuerdos

Confianza Mutua.

Definitivamente en ese momento en el cual Nathan me contaba algunas cosas de las que me había perdido, no lo podría creer, en serio, como había pasado tantas pero tantas cosas en solo unos cuantos años y pues de las cuales yo ni me había enterado, me sentía (en ese momento) un mal amigo, comparado con Nathan, y después de lo que siguió diciendo de sus otros misterios que me había ocultado. Todo aquello erá un caos -pensé-. Todavía no era capaz de asimilarlo todo. Pero bueno, poco a poco fui capaz de entender todo lo que en ese tiempo había pasado, además de intentar brindarle mi ayuda a ese personaje lleno de misterios ocultos del cual yo aprendía mucho de el y sin mencionar que lo amaba como el hermano que nunca tuve.
Otra cosa que se presenciaba aquella noche ,era el hecho del cual no me acordaba de una de las personas que fueron importantes para mi ,en la infancia ,si, hablo de Oliver , era algo extraño que no me acordara de el , y bueno y en el transcurso en el que hablaba con Nathan, habían varias cosas de las cuales, yo, no podía creer , y no lo hubiera creído ,si no hubiera salido de los labios de Nathan.
Falta añadir que en ese fue el primer instante (después de tanto tiempo) en el que Nathan y yo hablábamos como los mejores amigos que eramos ,era un momento magnífico como excelente y ya extrañaba hablar con el así.

***

-Claro, aunque no veo porque sentarme. -dije un tanto nervioso-

-Pero estarás más cómodo -dijo mientras en si rostro se veía una sonrisa- además creo que es mejor pues lo que te voy a contar demorará un poco ,por cierto, ¿Quieres que empiece con lo de mis padres o con lo de oliver?

-Bueno pues si insistes. -dije mientras me sentaba al frente de el-. Y comienza con lo que desees contarme, con lo que te sientas más cómodo.

-Bueno , aunque las dos historias encajan , o bueno se entrelazan. -dijo el-
Estaba ancioso o algo nervioso por lo que tal chico me contará -Pensé-.

-Esta bien, estoy listo para escuchar lo que tengas que decir. -dije un tanto nervioso-

-Ok... ¿Bueno por donde empezamos?...Emm. -Hizo una pausa-
Mis padres, bueno mi padre se fue de la casa después de haber tenido una discusión conmigo y con mi madre, una moche a causa de un problema que yo había causado, creo que lo tomo muy mal y se puso todo furioso y pues se fue, no le puse mucha importancia puesto que no tenía nada que ver con lo había pasado esa noche o bueno una pequeña parte si, pero no tanto para que el hubiera hecho eso, estaba muy histerico... -hizo una pausa-.
-¿Y tu madre? ¿Qué pasó con ella? - pregunte con algo de miedo, por ver su rostro a ver a como reaccionará con lo que había preguntando-
Las ideas se iban aclarando, según como avanzaba la historia, ya tenía presente porque su padre no había vuelto pero y su madre ¿Que había pasado con ella? - pensé-

-Wey dejame acomodar mis ideas para poder continuar. -dijo mientras se mostraba un tanto pensativo, era muy obvio que estaba intentando acomodar sus ideas para así decir todo lo que tendría que decir.-
-Esta bien. -era lo único que yo podía decir en ese momento -

-bueno va. -dijo entusiasmado-. Mi madre ahora tiene un trabajo en el cual le toca pasar mucho tiempo por fuera de la cuidad. La mayoría del tiempo me la paso solo en casa, y pues esta vez ella no llegará hasta dentro de dos días.

-Idiota, me lo hubieras dicho desde el principio, tenía miedo de que me dijeras que había muerto o algo así... Y además ¿Que tiene que ver Oliver con todo esto? -pregunte ahora un poco más calmado-.

-Trato de llegar a eso pero no cooperas. Emm... Haber... Bueno ya sabes como conocí a Oliver. -Asentí- después de varios días de estar hablando, jugando, molestando y haciendo cosas locas como dos adolescentes rebeldes, creo que nos teníamos la suficiente confianza, como para llegar a ser buenos "Buenos amigos", pues al sentir eso, una noche en mi casa, mis padres (en ese momento ya juntos y todo muy feliz y eso.) no estaban, y yo andaba en un restaurante con unos amigos, cuando recibo una llamada, la cual provenía de Oliver diciendo que si podía ir a mi casa hacer cualquier tontería y siendo el uno de eso amigos en los que se puede confiar y divertir, le dije que claro que en media hora lo vería allí, siendo verdad, a los veinticinco minutos yo ya estaba en mi casa acomodando todo para la llegada de Oliver, que no tardó demasiado ya que más o menos diez minutos después (para ser exactos) ya estaba tocando mi puerta, lo deje pasar, nos saludamos, nos dirigimos a la sala, puesto que mi habitación en ese momento no estaba del todo hecha, le faltaban unas cosas, entonces decidí que fuera en la sala, fui a la cocina le serví un vaso de soda de naranja, se lo di... -Hizo una pausa y suspiro, como si las palabras no quisieran brotar de su garganta, no quise interrumpir esta vez, así que solo deje su espacio para pensar y que me lo dijera cuando ya estuviera seguro de lo que diría.-... y antes de empezar a jugar me dijo...
-Nathan... -empezó diciéndolo y como que se arrepintió, entonces solo se detuvo.-
-¿Si? -pregunte, aunque la verdad no sabía por que no siguió-
Te puedo jurar Jayden, que tuve el presentimiento de lo que diría o lo que fuera hacer, además se le notaba los nervios, le temblaban las manos, y por la soledad de esa noche, casi pude sentir sus latidos del corazón, eran mil veces más rápidos y no sabia por que.
-¿Pero entonces que paso? -esta vez estaba impaciente por lo que me contaría-

-espera dejame pensar como soy capaz de expresar bien lo que iba a ocurrir y lo que tenía en mente Oliver. -Dijo en un tono pensativo-.

-De acuerdo. -Era lo único que podía decir, puesto que tenía que darle su espacio para que empezara otra vez con la historia-.
Pasaron casi diez minutos y Nathan todavía no conseguía como decirme lo que había pasado aquella noche, además ¿Qué tenía que ver sus padres, su separación, sus vidas, con Oliver? -pensé- era algo extraño (mucho para ser sincero). Pero al cabo de un minuto continuó con su historia...

-Oliver no sabía cómo expresarse en ese momento y lo único que dijo fue...
-Yo...
No fue capaz, ahora si que estaba confundido, me dieron ganas de pegarle con el control, habían pasado casi nueve minutos y nada que el respondía o decía, así que no dijo nada, pero... Me cogió el hombro, lo mire y estaba al frente mio así que dije...

-¿Qué pa... -Algo impidió que yo pudiera seguir con tal pregunta y sin darme cuenta, ya tenía los labios de el, junto con los míos, era algo extraño, podía verlo, como tenía sus ojos cerrados, mientras me besaba apasion...

-¿Qué? ¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee? ¿Cómo carajos? ¿Por qué? es imposible... No lo puedo creer -interrumpí a Nathan mientras contaba aquella historia, es que no lo podía creer, como es que mis dos amigos se habían besado y yo ni sabia, era algo completamente ilógico, algo imposible, no estoy contra los homosexuales, pero en verdad eso que me estaba contando, me estaba dejando pasmado en el sillón.
-Wey déjame acabarlo y después responderé todas tus preguntas, pero espera yo termino. -Dijo mientras continuaba la historia-. Entonces seguía viendo como lo hacía, así que lo cogí de la cintura para separarlo, pero en ese momento mis padres llegaron, y por el simple hecho de tener a Oliver cogido de la cintura, ya lo estaban mal interpretando, no te imaginas que alboroto hizo mi padre por ese simple beso que ni yo quería, me enfrente a el para aclarar las cosas, pero ni me dejo hablar y solo decía puras estupideces homofóbicas que ni yo le prestará atención, intento pegarme, pero no lo deje y le dije que se fuera si no quería que llamara a la policía, en ese momento se fue y mi madre ni yo, supimos nada de el.
Por otra parte mi madre me escucho y se tranquilizó, nos despedimos de Oliver, y esa noche volvió hacer normal, me fui a mi cuarto y vi que Oliver me había escrito me dijo.
*-perdón no quería causar problemas entre tu familia, en verdad fui un tonto y es que solo me gustas. *
Le dije que no pasaba nada y que bueno no podía estar con el, por que me gustaban las chicas y hasta ahora todo va muy bien, hasta creo que ya conseguío pareja no se.
-Termino con un suspiro puesto que quería desahogarse. -
Ahora pues todo encajaba, sus padres separados por culpa de Oliver , pero ahora Nathan vivía mejor, no sabia que hacer o que decir en aquel momento, así que mejor le di un abrazo y le dije...

-A que no me vences en Mario Karts.
-Pues averiguemoslo.

Dañamos aquel momento en el que hablábamos y nos pusimos todos ridículos a jugar más o menos 3 horas Mario Karts, con 5 partidas jugando 3 apuntaban a mi, mientras que a él sólo dos y sin contar que en una le deje ganar por que ya estaba algo frustrado.

Ya eran las 4 de la madrugada, cuando me llego un texto y entredormido pude notar que era de Emily.