Recuerdo esa llamada muy bien, pues todas las noches la intentaba recrear, pues fue como si estuviera soñando, (en serio) nunca pensé que esa simple llamada cambiará tantas cosas entre Emily y yo, lo primero que se me vino a la mente, cuando vi que era ella la que llamaba fue que quizás estaba mal, y necesitaba desahogarse, estaba aburrida, puesto que ese mismo día hace cinco años había muerto una persona muy importante para ella, el cual era su padre. Debe ser un sentimiento feo saber que alguien de tú familia (padre) muera, y que después de cinco días otro familiar ( madre) también muera -pensé-. Y bueno eso fue lo que quería interpretar -estaba sola y necesitaba desahogarse -, pero después que conteste esa llamada duro solo 5 minutos y fue eso lo que hizo que ese día para ella se convirtiera en un bonito recuerdo -suponía, pues porque para mi lo fue- esa noche fue el mejor recuerdo que tuve de nosotros dos, tal vez los sentimientos encontrados de nosotros dos saldrían a la luz -aunque a mi, ya me gustaba desde el día en que la conocí- no estaba seguro si ella también, hasta esa noche.
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-¿Si? -dije al contestar-
- Hola Jayden, soy Emily -respondió-
-Hola Emily, ¿Cómo estas? ¿Mejor?
- Si claro, mucho mejor.
- Que bueno, y... ¿A qué se debe tú llamada? -mierda pensé, como había preguntado eso, tal vez se enojaría, es decir, ella me llama para (tal vez) desahogarse y le pregunto algo tan sínico-
-P-pues, era solo para decirte, si hoy podríamos ir al restaurante que mencionaste la primera vez que hablamos ¿e-es muy tarde para haber respondido. -lo dijo un tanto nerviosa-
No lo podía creer, es decir, el primer día que la veo, le pregunto que si quiere salir y me responde que no y hoy ella quiere salir ¿esto será el comienzo de algo diferente entre los dos? Ahh no lo puedo creer -en verdad estaba emocionado, yo saliendo con la chica que me tenía loco, era algo imposible.-
-Emm, claro dejame arreglarme y te recojo faltando 15 para las 7 ¿Vale? -dije un tanto nervioso-
-Claro, aquí te espero.
Al colgar tenía la dirección en donde ella vivía, puesto que cuando hablábamos en la cafetería del instituto, vivía a sólo unas cuantas cuadras de donde yo vivía así que no me demoraría mucho en llegar.
Cuando termine de arreglarme cogí las llaves del auto que mis padres me habían regalado por un logro que había ganado en el colegio anterior (era un mazda 6 negro), me monte en el faltando 5 minutos para recoger a Emily y llevarla a su restaurante favorito el bordenline, era una sorpresa, pues ella no sabia que la llevaría a dicho lugar.
Faltando poco para las 7, ya estaba en la entrada de la casa de Emily, salí del auto, toque a su puerta, después después varios segundos salio ella. -se veía excelente, más linda de lo que ya era- pensé.
-¿lista? - pregunte -
- Si claro.
La cogí de la mano suavemente y la lleve hasta el auto, le abrí la puerta, ella se sentó, cerré la puerta, y me monte en el asiento del conductor.
-¿A dónde iremos? - preguntó -
-Es una sorpresa, ya verás.
El camino de la casa de ella al bordenline, escuchamos varias bandas pop, rock, y música variada, no alcanzamos a intercambiar palabras, pero sabía que música le gustaba, y con eso la complacía en todo el viaje.
Cuando nos estábamos aproximandonos al bordenline, Emily ya se hacía la idea de a donde estábamos llendo.
-No lo puedo creer. - dijo ella en un tono un poco emocionada -
-¿No puedes creer qué? - pregunte aunque ya sabía la respuesta.
-No me digas que vamos para el bordenline? - pregunto ella mirándome a la cara -
-Exactamente allí es a donde vamos. -dije con un sonrisa en mi rostro.
Cuando llegamos al restaurante, Emily eligió una elegante mesa, bajo un candelabro de cristal, y con unos árboles decorados con luces de navidad, color amarillos, al parecer era la mesa que más le gustaba. Se veía tan linda, con ese elegante vestido, bajo estas hermosas luces, ella era la mujer perfecta -pensé-
-¿Qué desean comer? -dijo el mesero-
Su voz me resultaba familiar , cuando lo vi, claro, era el idiota de Nathan atendiendonos, le di un fuerte abrazo y le dije.
-No sabia que trabajas aquí
- Trabajo de medio tiempo, ahora ¿Que desean? - volvió a preguntar -
Como trabaja, no podía hablar mucho y habían varias mesas que necesitaban ser atendidas, así que le dije.
-Desearía que la linda chica que esta al frente mio, me regalará un beso. -se me notaba un poco de nervios en la voz, no se como carajos se me ocurrió decir eso, y me volví para ver su rostro, estaba ruburizada, se vea tan linda con esos cachetes rojos, creo que fue imprudente haberlo dicho, pero en verdad lo quería.-
-Claro pero eso no lo puedo hacer, depende de ella, solo puedo servir lo que hay en el menú. -dijo Nathan-
-Yo quisiera y sándwich de jamón por favor y luego le concederé el deseo al joven sentado al frente mio. -dijo Emily-
No podía creer lo que acaba de escuchar, ¿en serio esas palabras salieron de la boca de ella? No lo creía había dicho que luego concederá mi deseo, estaba totalmente feliz al escuchar eso, pero no podía demostrarlo en ese momento, sería incómodo.
-Claro. - dijo Nathan.-
-Para mi, dame un sándwich de atún, y un plato especial para el deseo. - dije con vergüenza, pues había dicho una estupidez-
-claro, ya se los traigo. - dijo Nathan -
Cuando Nathan se retiró, pude darme cuenta que el resto que pasa, Emily y yo éramos mirándonos fijamente a los ojos, era como ese juego de niños, en el cual retas a tu oponente a ver cuanto dura sin parpadear, bueno pues era así, pero este momento hay diferente, sentía como si ella y yo fuéramos los únicos humanos en la tierra, era algo fabuloso, parecía como si el tiempo estuviera quieto y... ¿los dos? Bueno nosotros dos sentíamos como nuestro sentimientos se entrelazaban, como eran encontrados, y por un momento los dos estábamos intimidados por las personas que teníamos cada uno de nosotros al frente, era otra cosa del universo.
Después de varias horas, y que comieramos nuestros sándwiches, nos la pasamos contando bobadas, haciendo tonterías, jugando como niños, y ese instante era el más hermoso de todo, se podía ver en nuestros rostros como disfrutábamos estar acompañados uno del otro y como nos sentíamos cuando estábamos juntos.
Llegamos a su casa, la lleve hasta la puerta.
-Gracias por esto Jayden, en serio gracias, me hiciste olvidar todo la malo que tenía este día, Te quiero. - lo dijo un dulce tono, muy cariñoso -
-De nada sabes que siempre estoy para ti te quiero.
Al decir eso, estuvimos a punto de darnos el beso que desee en el bordenline, nuestros labios estabas tan cerca, que pude sentir el calor que emanaba de ellos, pero, salió su tía y no pudimos besarnos, así que solo me lo dio en la mejilla, aunque hubiera sido solo ahí, me sentía emocionado, me despedí y cuando llegue al auto arranque y ella seguía en la puerta esperando que me despidiera de ella, lo hice y me fui.
Al llegar a casa no podía dejar de pensar en aquella noche que tuvimos hoy, fue tan especial, y por si fuera poco, casi nos besamos, esa mujer me tenía como un completo idiota. En ese momento en mi cuarto ya me había dado cuenta de que en serio la quería y quería estar con ella en una forma diferente, en ese momento encontré lo que era el amor.
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Recuerdos
Fiksi RemajaA Jayden solo le quedan unas cuantas semanas de vida, según los doctores, el decide usar el tiempo que le queda para recordar, todas aquellas cosas que hizo en el pasado, en que fallo, que hizo bien, el amor fue uno d esos recuerdos con Emily, esas...