LA OBSESIÓN DE UN MAFIOSO

LA OBSESION

RYAN

-Creo que una de las obsesiones más grandes que tengo es elayne, la conocí en un antro cualquiera de la ciudad, casi no concurro esos antros ya que no estaba a mi altura. 

-La vi llegando al antro y la quería solo para mí, llevaba un vestido azul, con zapatillas negras, altas. Era la primera vez que me interesaba alguien, así que me obsesione, investigue...

-Vi aquella chica de cabello largo, sentada con sus amigos.

-Mientras yo iba hacia la parte VIP del antro, vi de reojo todo a mi alrededor y vi aquella chica.

-Eran como a las dos de la mañana, sentí como una mano toco mi hombro, mi personal de seguridad rápidamente la quitaron. 

- Me giré a ver, que estaba pasando, vi a mi pequeña obsesión.

 - ¡Suéltenla! - dije con voz alta. - anda de mal humor había tenido un mal día-.

- La tome del brazo y la senté en uno de los sillones, me acerque a ella y puse mi mano en el muble, mientras la miraba fijamente.

- Pregunté- ¿Que necesitas? - sentí la tensión, ella no bajaba la vista y yo tampoco, al mismo tiempo me sentí nervioso, solo soltó una risa y se levantó del mueble. 

-La quede viendo, ella andaba un poco pasada de tragos, sabía que no iba a terminar nada bien, pero termino mejor de lo que yo pensaba.

-Elayne solo camino hacia a mí, puso sus manos en mi cuello y me beso

-Pregunte ¿Está segura? - ella afirmo con un sí, la cargue hasta el baño y la senté sobre el lavamanos, la mire a los ojos y sabía que sería mi obsesión. 

-Rompí sus medias y metí mis dedos sobre su cuerpo, ella solo soltó un gemido, seguí metiendo y sacando mis dedos. 

-Tenía tiempo que no me la pasaba tan bien con alguien.