Un amor entre las hierbas [Asa Butterfield Fanfic]

Capítulo 5: Noche de chicas

*Dejadme narrar un poco a mi, ¿no? -Paige*

Bien! Ahora narro yo un trozo de la historia. Conozco a Susan desde que nació, más bien, fui yo la que estuvo esperándola en la clínica cuando vio el mundo por primera vez, es un decir. Soy unos meses mayor que ella y la quiero como a una hermana. Pero no me voy a poner cursi ahora.
Susan, o Susi, como la llamo yo a veces (cosa que ella odia) hemos vivido toda la infancia prácticamente juntas, y nuestra parte actual de la adolescencia. Que no se me malinterprete, que si la llamo Susi no es para molestarla, y si la molesto no es con mala intención, eh.

Bajo al comedor aproximadamente a las cuatro y allí está mi padre , hablando por teléfono. Vive en un piso un tanto pequeño situado en un barrio de Londres. Está un poco lejos de mi instituto, y por eso tengo que ir normalmente en coche cuando me toca pasar unos días con él.

-....Ok, perfecto. Sí, tranquila Margaret. Sí. Muy bien. Mañana.... Mmm... A las cinco supongo. -me ve y me sonríe levantando un poco la cabeza como saludándome- ...Luego te llamo. Sí. Adiós.
Y cuelga.
-Buenas, dormilona. Ya te despertaste de la siesta? -me pregunta.
-Sí papá. Estuvo bien. Mmm.. Quién era?
-El teléfono? Ah! Era tu madre -contesta- mañana vuelves con ella, vale?
-Ya?
-Sí.
-Pero... -sigo- solo hemos estado tres días juntos. Y ni eso. Dos y medio. Porque hoy no duermo aquí..
-Paige... -dice él en tono entristecido- yo te quiero mucho, pero ya acordamos que tu madre era con quien tenías que pasar más el tiempo. Recuerdas?
Suspiro. Mis padres se separaron cuando yo tenía diez años. Últimamente paso más tiempo con mi madre puesto a que mi padre también trabaja hasta tarde, y a parte tiene que estar con su novia y el hijo de ésta. Su hijo es un auténtico mimado y malcriado. Al menos papá no me lleva muchas veces a verlo. Ni a su novia, por suerte. Es una jovencita "bonita" pero a mi no me cae nada bien.

Como esta tarde vienen la novia y el hijo a cenar, yo me voy a dormir a casa de Susan. Y, como no, al abrir el móvil tengo unos cuantos mensajes suyos... Y de mi madre.

✉Susan: Ey! Estás?
Paige: Hola Susi! :)
✉Susan: Llámame otra vez así y ya no vienes >:)
Paige: Okok. Hola Susan :) Mejor?
✉Susan: Claro que si. Tengo ganas de que vengas. Tengo que contarte un montón de cosas.
Paige: K cosas?
✉Susan: Cosas ;)
Paige: No me las puedes decir ahora?
✉Susan: No, que para eso hemos quedado por la noche. *-*
Paige: Oooooc...... :(

✉Mamii: Cariño, qué tal estás?
Paige: Bien, mamá.
✉Mamii: Te echo de menos :(
Paige: Mañana nos vemos.
✉Mamii: Pero yo quiero verte ahora. Qué tal está tu padre?
Paige: Genial. Si le acabas de llamar.
✉Mamii: Ya, pero solo era para decirle que mañana te vengo a recoger a casa de Susan a las cinco.
Paige: A las cinco?! Mamá, dejáme más tiempo ._.
✉Mamii: Pero si vas a dormir ahí! Vas a estar más de 10 horas con ella!
Paige: Pero tiene que contarme muchas cosas.
✉Mamii: No creo que con más de 10 horas aun no haya tiempo de explicaros cosas...
Paige: ... Hasta mañana
✉Mamii: Te quiero.

La tarde pasa muy lenta. Necesito que sean ya las siete, que es cuando mi padre me lleva a casa de Susan. Qué será eso tan importante que tiene que decirme? Qué cosas serán? La razón por las cual he decidido irme a su casa a dormir a parte de lo de la novia de mi padre, es porque ya que no hemos podido comer barbacoa juntas porque he tenido que pasar la mañana con mi padre, ambas queríamos recompensarlo cenando y durmiendo juntas.

-Y bien? -pregunta mi padre dentro del coche cuando está a punto de dejarme en casa de Susan -Diviertete.
-Gracias.
Ya estoy a punto de subir las pequeñas escaleras de delante de la puerta de su casa cuando me interrumpe:
-No me vas a dar un beso?
Rodeo los ojos. Me giro y lo miro con cara de "Ya basta, papá". Pero es imposible poder estar tranquila si no le doy un beso.
Me acerco y desde fuera del coche le doy un beso rápido en la mejilla.
-Y ahora sí, adiós. -digo sonriendo volviendo a rodear los ojos.
-Pásatelo en grande, te quiero. Mañana te llamo, ok?
-Que si.. Adiós.
Y ahora sí, llamo al timbre y dentro de unos segundos me abre la misma de mi mejor amiga, con una sonrisa enorme en la cara.
-Por fin llegaste! -dice excitada.
-Y esa sonrisa? Es más grande que tu cabeza -le digo mientras entro.
-Tengo que contarte unas cosas.... Vas a alucinar. -sigue ella.
Entonces sale su madre de la cocina.
-Buenas tardes, Paige. Qué tal va todo? -pregunta.
-Mmm.. Muy bien, gracias.
Su madre es como.. Una segunda madre para mi, si así se puede decir.

Subimos al cuarto de Susan y nos sentamos en la cama. Yo dejo la mochila pesada donde traigo el pijama, el maquillaje, entre otras cosas.
-Cuéntame.
-No te lo vas a creer... -empieza ella- hoy hemos hecho barbacoa en el jardín, y entonces mi madre ha tenido que irse a llamar a un cliente o no sé qué. Entonces, la carne ha empezado a humear pero sin llamas ni nada... Y he conocido a un chico.
-En la carne? -pregunto medio en serio medio en broma.
-No, tonta. En el jardín de al lado. Estaba tosiendo por el humo de mi barbacoa y entonces hemos estado hablando un rato. Dios Paige, ni el alzéimer hará que me olvide de esos segundos que he estado hablando con él. Ha sido taan... Especial.
-Como era? Describe!
-Ojos azules, cabello oscuro, piel blanca... Era guapísimo. Me encanta.
-No está mal... Sabes su nombre?
-Asa. Asa Butterfield.
-Vaya nombre.
-Da igual, es único. Como él -dice Susan.
-Claro... Vive aquí?
-Sí! Es mi nuevo vecino. Dice que se ha mudado con su padre. Necesito volver a verlo. -exclama.
-Tengo una idea -digo- porque no vamos a verle?
-Ahora? Pero... Ahora está mi madre abajo.
-Y?
-No sabe lo de Asa. Ni quiero que lo sepa. A saber qué va a decir.
-Nada malo, seguramente. Bueno, pues vayamos luego de cenar.
-Será oscuro.
-Y si nos colamos en su jardín y entramos en su casa?
-No! Voy a parecer una psicópata!
-Oye... Un poco ya lo eres -concluyo yo- si ya le has intoxicado con el humo!
-Eso no es ser psicópata! Ha sido un accidente...
-Que era broma, Susan. Luego vamos, vale?
-Ok...
-Cuéntame algo más.
-... No sé... -piensa ella- ... Que me he enamorado sin remedio?