Un amor entre las hierbas [Asa Butterfield Fanfic]

Capítulo 7: Procesando

*Narra Asa*

No entiendo exactamente qué pasa. Por qué estoy aquí. O por qué la he conocido a ella. O... Por qué me siento tan extraño cuando la veo. Es una sensación estraña, y bonita. Muy bonita. Me gusta.
Es agradable verla ahí delante tuyo, pero no tan agradable no poder tocarla, ni poder oír su voz más cerca. Hay un límite. Las vallas. Esas vallas blancas de madera que nos separan el uno del otro. Qué pasaría si un día ella pudiera entrar en mi jardín... Y.. Poder sentir su piel tocando la mía...
No puedo pensar así. No puedo. Es demasiado... Precipitado. Y si estuviera.. Enamorándome? Y si me gustara esa chica? Susan.
Pero no le puedo decir nada, y menos después de lo de Hailee. Sería muy cruel, y como he dicho, precipitado. No hace ni 24 horas que la he visto ahí plantada en la hierba de su jardín, levantando la cabeza por encima de las vallas y mirándome con esos ojazos verdes que tiene. Simplemente hermosa.
Estoy enloqueciendo. Me quedó sin palabras cuando estoy cerca suyo. Es como si el oxigeno que respiramos ambos fuera solo hacia ella, pues yo me ahogo.

Me quedo mirando la puerta por donde acaban de entrar ella y su amiga. Su amiga es completamente diferente a ella. No digo físicamente, sino psicológicamente. O eso parece. Susan es tan... Parece tan tímida y tierna, y la otra es como... Más atrevida y alocada. Pero es simpática.
¿Qué hacían ahí a esas horas?
En realidad, yo no había venido para tomar el aire. Para eso habría preferido estar en mi habitación leyendo o hablando con Aramis. La verdad es.. Que quería ver si me la encontraría. Ahora ya no habría barbacoas, ni humo, ni haría tanto calor.
Podría hablar con ella fácilmente. Tenía la esperanza de encontrarmela, y así ha sido. Bueno, no exactamente. Primero he visto a su amiga ahí plantada sonriendo, y al cabo de un rato es cuando la he visto a ella. Me ha dado un ataque de pánico.
«Qué hago? Qué hago?» estaba pensando todo el rato.

Hemos empezado a hablar, y luego se han oído unos gritos desde dentro d el a casa y las dos han salido corriendo. He notado como me miraba antes de entrar. Solo un segundo, o quizás menos. Pero lo he notado y se ha quedado en mí durante un rato más. Estaba procesando lo que acababa de pasar. Aun estoy procesándolo.
Deslizo mi mirada hacia el cielo, oscuro pero claro. Y ahora sí que noto la brisa un tanto helada que me rodea. Ahora sí.

Entro a casa sin mirar hacia atrás.

-Y bien? -dice mi padre, que está mirando la televisión -Encontraste los libros?
-Eh... -pienso en los libros. "Voy a buscar los libros que me he dejado mientras leía por la mañana en el jardín" es la excusa que le he dado para que me dejara salir- No. No están.
-Como es que has estado tanto rato? -dice mirándome ahora.
Pienso.
-No sé. Pensaba... Que se vería la luna.
-Hoy no se ve desde aquí. De verdad Asa, que hiciste?
-Observaba el jardín. Creo que he visto una luciérnaga.

Parece una escusa estúpida, pero me cree.
Me mira y vuelve sus ojos hacia la pantalla.
-Buenas noches, papá. -le digo.
-Que duermas bien.

Subo arriba y me pongo el pijama. Pienso en todo lo que ha ocurrido hasta ahora.
Un día. Una chica. Un jardín. Una barbacoa.
Me he enamorado.

✉Aramis: Hola tío, k tal estás?
Asa: Hey. Tengo que contarte algo.
✉Aramis: Lo k kieras.
Asa: Mira, hoy por la mañana he conocido a una chica.
✉Aramis: Si? Kien es?
Asa: Es mi vecina. Se llama Susan. Tío, creo que me he enamorado. De verdad.
✉Aramis: ?! De verdad? Pídele el num!
Asa: Mañana. Todo ha empezado cuando estabamos en el jardín y entonces ella hacía barbacoa y no sé. Nos hemos conocido. Ella ha salido de entre las vallas que separan los jardines y hemos hablado. Y hace poco la he visto en el jardín con su amiga.
✉Aramis: Oye, cuenta mejor Asa. Te llamo, ok?
Asa: Vale.

Mi móvil suena y lo cojo.

-Aramis. -digo.
-Asa -contesta él.
-Mira...
-Cuenta.
-Yo estaba en el jardín por la mañana y he pesado a toser por el humo que salía del jardín de Susan. Me sigues?
-Sí! Sigue!
-Entonces me ha preguntado que me pasaba, y la he visto. Es.. Muy guapa.
-Tienes foto?
-Qué dices! No saco fotos así como así...
-Okok. Sigue.
-Entonces se ha presentado y yo también y estábamos hablando y... Por la noche la he vuelto a ver.
-Es decir, ahora.
-Sí. Ha traído a una amiga suya.
-Entonces... Habíais quedado para veros?
-No! Ha sido casualidad... Bueno yo quería verla pero ellas ya estaban allí cuando he salido. Y hemos estado hablando de nuevo.
-Qué guay. Mañana la vas a ver?
-No sé. Saldré para verlo.
-Bien. Oye... Cambiando de tema..
-Dime. Qué tal vas tu?
-Bien.. Pero.. Hailee no.

Me hundo. Recuerdo lo de Hailee.

-...Qué le pasa a Hailee? -pregunto nervioso.
-Emm... Está desesperada por ti. Hoy me ha llamado llorando diciendo que te echa demasiado de menos.
-Dios... Luego la llamo yo.
-No... Mejor que no. Creo que le gustas.
-Ya.
-Lo sabías? -pregunta él.
-Sí.. Me lo dijo en la fiesta. Mientras comprabais bebidas.
-Qué? No dijiste nada.
-No sabía que hacer. Lo peor fue... Que le dije que ella a mi también me gustaba.

Silencio en la llamada.

-Asa! -me grita.
-Aramis! -le grito yo.
-Pero... Ahora de cree que es verdad. Porque ella no te gusta, no?
-No! Era para no hacerle daño...
-Pero que ahora se piensa que la quieres!
-Ya! Pero a mi me gusta Susan!
-Pues no la llames. No le digas nada. Que no se entere. Le diré que... Que he hablado contigo y estás bien y la echas de menos etc. Pero nada de la chica esa, Susan.
-Vale... Gracias tío. Pero y si llama?
-No lo cojas. Tu intenta que esto no vaya a más.
-Vale. Adiós.
-Adiós.

Colgamos a la vez.
Tengo un problema: Hailee.
Aunque no puede ser tan problema, no? Porque ella no está aquí. No me puede decir nada. Pero... Y si viene a visitarme? Qué pasará entonces? Estoy hecho un lío.

Resumiendo:
Nueva vida. Nueva casa. Nueva chica. Dos chicas. Los mismos amigos. La misma familia. Un problema... Y Mr.Queso.
Algo más?