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Vicky Gago
Apenas me desperté me estire en la cama para taparme pero Boss no me dejó seguir durmiendo porque supongo que el pobre animal quería salir por lo que me levanté y me puse un conjunto deportivo para salir del edificio con el y caminar un rato bastante largo hasta que el gordo no pudo más y quería volver.
Eran algo de las doce del mediodía y River jugaba en unas tres horas y media por lo que nuñez era un mundo de banderas rojas y blancas, si bien no tengo que aclarar que no soy hincha ni menos simpatizante de River, pero si tenía que aclarar que el fútbol argentino tenia esa cosa de familia que era hermoso, ver cómo padres llevaban a sus hijos en hombros o nenes que apenas aprenden a caminar y que es un ritual de generaciones como los que estaban adelante mío que llegaba a ver un señor de unos setenta y pico acompañado por uno de cuarenta o cuarenta y cinco que tenía de la mano a un nene de unos ocho o diez años todos con la camiseta de la banda caminando para ver al club de sus amores.
Ese sentimiento de que tu papá te lleve a la cancha no es algo muy común para alguien que tiene un padre futbolista porque en ese momento el siempre estaba concentrando pues es su trabajo y si bien vas tomando cariño a los clubes por donde pasa no logras generar ese vínculo total con ninguno, sonreí mientras seguía caminando con la mirada de varios hinchas que empezaban a dudar sobre mí persona, algunos empezaron a subir a la vereda mientras yo apuraba el paso con Boss que prácticamente corría, esa media cuadra que me faltaba para llegar a la puerta del edificio parecía eterna.
Caminaba con la tensión de saber que esto no era boca y también que este era un partido importante para River si quería seguir en la pelea por el campeonato que si lo tenía un poco alejado no eran muchos puntos que necesitaba para mantenerse, apenas subí las escaleras de la entrada del edificio el de seguridad me abrió y yo ingresé para sentir como mí alma volvía a mí cuerpo mientras entraba al hall caminando al ascensor para poner mí piso con mí clave haciendo que esté suba únicamente hasta mí departamento. Apenas entre empecé a buscar que cocinarme mientras veía a los medios hablar del partido de River contra estudiantes y el como llegaban los jugadores tanto física como mental y anímicamente después de quedar eliminados en la copa argentina pero nada más, cuando termine de cocinarme me fui a sentar al sillón para seguir viendo ahora como hablaban de boca, mí celular se iluminó haciendo que lo agarre para ver un mensaje de las chicas que me hacen entrar a wpp pero no para contestar sino para mandarle un mensaje a Giovanni

Suerte mí vida 🖤

Si no era muy original pero no había más que poner porque el ser hincha de boca hacia que el momento que estaba viviendo River me hiciera muy feliz, verlo sin objetivos profesionales y que no haya podido mantener el único titulo local que ganó en 10 años era algo sumamente satisfactorio pero bueno no iba a alegrarme de su desgracias porque no, mí celular suena dándome la notificación de Giovanni que todavía seguía agendado igual que la primera vez solo que ahora tenía un emoji "Simeone🫀"

Que raro vos con una muestra de
cariño antes de un partido

¿Que cagada te mandaste?

Porque me tendría que
haber mandado una cagada
Para hablarte

Porque generalmente no deseas
suerte y menos antes de un clásico

Bueno estoy intentando cambiar

🤌🏻🤌🏻🤌🏻Lo único que cambias
vos es de posición

Ay que malo sos juro que
lo intento

Pero vos no ayudas

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