· ─ ❨ 𝗲𝘅-𝗯𝗼𝘆𝗳𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱 ❩
¿al final podré tener
mi historia de amor?
Nyoko siempre creyó que su relación de secundaria con Tōru podría durar muchos años más al salir, pero lamentablemente no fue así. Tantas cosas que tuvo...
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capitulo diecinueve "paso uno: enseñarle a okamoto"
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Además de tener un nuevo prospecto para mánager del equipo de voleibol masculino del Aoba Jōsai, Nyoko sabía que las cosas serían diferentes a partir de ese momento. ¿Cómo sería tener que enseñarle todo lo que conocía a Okamoto Akihiro? Porque sí bien, ella ya tenía conocimientos del deporte, no era lo mismo ser jugadora a ser una mánager, y esperaba pudiera darles una oportunidad, porque solo imaginaba a ella en el puesto a pesar de recién haberla conocido.
Cuando pudieron acordar que al día siguiente Okamoto iría a la práctica para que los viera, Nyoko se sentía demasiado nerviosa. Todas las horas de clase y en el receso se la pasó repasando los apuntes que había elaborado para que ella leyera y pudiera comprender sin problema, justo lo que ella había investigado cuando se convirtió en mánager en la secundaria. Sabía que podía ser un poco tedioso al inicio, así que había intentado simplificarle todo.
—En verdad estás nerviosa —le dijo Ima, cuando ya casi finalizaban las clases. Nyoko iría por Okamoto a su edificio, así que sí lo estaba.
—No la puedes culpar, es comprensible que esté así. Pero, Nyo, seguro todo resulta bien y Okamoto acepta —trató de darle ánimos Dai, sonriente y acariciándole la cabeza—. Eres buena mánager, seguro nota tu amor y se decide en aceptar.
—Si no lo hace, dejaré desamparada al equipo —murmuró ella con pavor, poniéndose a pensar en múltiples escenarios en donde todo salía mal. Rápidamente se palmeó con fuerza las mejillas, asustando a los que se encontraban sentados cerca de ella; había quedado la marca roja, pero no le importó—. Es decir, sé que aún me queda mucho tiempo. Cuando esté en tercero puedo retomar la búsqueda con los de primero y seguro sale bien, pero algo dentro de mí me dice que es mejor hacerlo desde ahora.
—Si lo dice tu instinto, hay que hacerle caso —secundó su amiga—. Tu no te preocupes, Nyo, todos saldrá bien.
Asintiendo repetidas veces, quiso creer en sus palabras. En ese momento llegó el último profesor y se dirigieron a sus asientos, aunque Nyo no pudo prestar mucha atención porque se encontraba perdida entre sus pensamientos. ¡Era tan difícil! Su mente no dejaba de trabajar, aún cuando quería intentar tranquilizarse. Hundió su cabeza entre sus brazos para que nadie la viera, mientras respiraba tranquilamente con un intento de relajarse; la única persona que lo notó fue Oikawa, que, aunque en ese momento se preocupó y se preguntaba qué estaría sucediéndole, cuando Nyo llegó a la hora al entrenamiento con una chica desconocida y de primer año, supo el por qué.
