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—¡Jungkook!— Gritó haciendo que el antes nombrado diera un pequeño saltó, causando que cayera del sofá.
—¡¿Qué!?— Espetó furioso al ser despertado de esa manera ¿Qué le costaba ser amable?
—Te he estado llamando desde hace más de una hora, además ¿Por qué dormiste en el sofá?
El menor rodo los ojos levantándose del suelo, se estiró haciendo que algunos de sus huesos crujieran y se quejara un poco por el dolor del cuello. Se hizo un recordatorio mental para no hacerlo la próxima vez.
—¿Qué se te ofrece, YoonGi hyung?— Por fin habló de manera educada, incluso sorprendiendo al pálido por la manera de dirigirse hacia él, porque casi nunca lo hacía, al menos que... Quisiera algo.
—¿Qué hiciste o qué quieres, Jeon?— Enarco una ceja cruzándose de brazos preparándose ante cualquier pedido.
—Nada.— Alzó los hombros restándole importancia. —Solo estoy... De buenas.
Y con una gran sonrisa comenzó a caminar hacia las escaleras dejando a YoonGi un poco confundido y con la boca levemente abierta olvidando por completo lo que iba a decir.
[...]
—Kookie ¿Estas listo?— Dejo un par de golpecitos en la puerta esperando pacientemente. Segundos después la puerta fue abierta dejando ver a un desaliñado Jungkoook pero manteniendo aquella sonrisa, parecía estar tan feliz.
—¿Listo para que, Jin hyung?— Ladeó levemente la cabeza.
—¿Acaso lo olvidaste?— Cuestionó el mayor cruzándose de brazos fingiendo enojo.
Jungkook miro detalladamente el rostro de SeokJin, en todo momento era tan hermoso, debía concentrarse en lo que le estaba diciendo pero por más que lo intentará su atención se centraba en lo apuesto que era, en aquellos hombros tan anchos, en lo perfecto que aquel pelirosa era, pero en cuestión de segundos su mirada cayó por completo en aquellos labios, tan esponjosos, su color tan bonito, tan apetecibles como para querer morderlos y no soltarlos... Tan parecidos a los labios que lo besaron la noche anterior.
Jin no pasó desapercibido que el menor lo miraba atentamente, al menos a sus labios, comenzando a ponerse nervioso. Se sonrojo y por inercia relamió sus labios dándole un pequeño brilló. No supo que fue exactamente lo que le causó ver a Jungkook morderse los labios de manera inconsciente, solo quería una cosa, besarlo.
—¿Van a tardar demasiado?— Aquella voz sacó a cada uno de su pequeña burbuja girando sus miradas de dónde provenía.
—¿Tardar para que, Hoseok hyung?
—Le dije a Jin que te preguntará si irías con nosotros, pero llevo más de diez minutos esperando alguna respuesta. Y entonces... ¿Irás?
El pelirosa dio un paso hacia atrás, como si mantenerse cerca de Jungkook le cortará la respiración.
—Tengo planes, pero espero que ustedes se diviertan mucho.
Y su sensación de nerviosismo combinado con esas irresistibles ganas de besarlo se esfumaron ¿A qué se refería con "ustedes"? ¿De verdad lo había olvidado?
—¿Tienes planes con alguien más?— El tono de voz de el mayor sonó tan indiferente.
—En realidad tengo algunas cosas que hacer, pero más tarde saldré. Diviértanse mucho hyungs.— Dicho eso volvió al interior de su habitación cerrando la puerta.
—Seok, vamos. YoonGi se pondrá de malas si lo hacemos esperar más.
No dio respuesta alguna, miro la puerta de aquella habitación que conocía a la perfección, quiso entrar para averiguar con quién saldría el menor pero eso solo causaría confusión. Varios segundos después miró a Hoseok y asintió comenzando a caminar para poder salir de casa.
Su pequeño kookie había olvidado su "día especial", aquel día donde usualmente pasaban tiempo los dos juntos.
Y eso le hizo sentirse herido porque alguien más estaba atrayendo toda la atención del castaño.
[...]
—YoonGi hyung~ Beso— El rubio señaló sus propios labios, abultándolos un poco en espera de recibir lo que quería. El pálido sin pensarlo tanto se acercó a su lindo novio juntando sus labios en un tierno beso.
Al principio Jin había creído que acompañarlos sería una gran idea, así no se la pasaría todo el día pensando en la situación con Jungkook pero si lo pensaba mejor en ese momento tal vez quedarse en casa no hubiese sido tan malo.
Desde que habían salido de casa YoonGi y Jimin habían estado demasiado melosos, el mayor de ellos dos no solía demostrar tanto afecto hacia otras personas pero cuando se trataba del rubio solía ser el más cariñoso, ese era el "efecto Jimin".
En lo que llevaba conociendo a YoonGi ni siquiera podía conseguir un mensaje extenso, todo se resumía en respuestas cortas y mensajes de menos de una línea. Aunque no estaba molesto por eso, de hecho le gustaba ver como aquella pareja era feliz, solo que le era un poco extraño presenciar tanto amor.
Porque no habían sido la única pareja melosa durante todo el camino, Hoseok y Taehyung también. Pero a diferencia de los dos primeros en cuanto habían llegado a la plaza como por arte de magia desaparecieron.
Gracias a Namjoon había logrado desaparecer esa extraña sensación de vacío, porque se mantuvo a su lado, haciendo bromas, ayudándole a elegir algunas cosas que necesitaba, al menos se habían mantenido de esa manera hasta que la pareja del mayor apareció, Jackson, robándose por completo la atención del moreno. En ese momento se preguntó algo a si mismo.
¿Siempre había estado así de solo?
Se sintió un mal tercio con los demás, se sintió nuevamente vacío, como si algo o alguien le faltará. Lo pensó por un par de minutos hasta que lo descubrió.