De camino a casa vino un recuerdo del pasado en el cual la imagen de Adriana se hacía presente, era en la época cuando eran niños, Alex estaba llorando en el parque y una niña se le acerco, conversaron un tiempo después se divirtieron mucho jugando, en ese entonces ninguno pregunto el nombre del otro pero parecían que ya se conocían, todos los días se encontraban en el parque mientras sus madres conversaban ellos jugaban.
-Esa niña la tengo presente en todo momento, nunca supe el motivo de por qué se fue, pero desde entonces nunca la volví a ver. Me parece extraño que piense que Adriana me parezca conocida, creo que lo sabré en su debido momento.
Alex siempre trata de recordar ese momento ya considera que es un escenario muy importante de su vida.
Al día siguiente Alex llego a la escuela diferente, ya no era alegre o expresivo como era antes, todavía estaba asimilando el hecho de haber perdido la carrera y no saber cómo actuar enfrente de Valentina, sus amigos que parecían perdidos de todo lo que había ocurrido se acercaron a conversar como si nada hubiera ocurrido, Alex solo disimulo estar alegre conversó con tranquilidad sin mostrar algún gesto de tristeza.
De esa manera pasaron los días, Alex se alejaba más de las personas ya no quería interactuar con ellos, poco a poco también dejaba de tener platica con Lorena, con el tiempo entendió que lo que sentía por Valentía no era algo cercano al amor, solo sentía una ilusión y eso no era suficiente para decir que estaba enamorad, comprendió que no en todo momento las cosas saldrán como uno quiere.
Su momento de reflexión fue interrumpida por una chica muy alegre, que con solo verla sentía las ganas de cuidar de ella.
-¿Puedo sentarme a tu lado?
-Claro puedes sentarte está desocupado
-oye ¿me puedes ayudar?
-si claro, que necesitas
Hablar con Lucia le pareció algo divertido, no había tenido interés de hablar con ella en los años anteriores pero hacerlo ahora fue algo agradable.
Cada vez se sentía más cómodo la interacción, aunque nunca se estableció eran buenos amigos, Alex ayudaba a Lucia en lo que necesitaba y viceversa, Lucia era muy extrovertida cambio mucho la vida de Alex, sus días eran muy alegres aunque no sea de los mejores esos momentos alegres lo compensaban.
Llegaron las vacaciones tan esperadas por los alumnos, era el momento de relajarse y quitarse el estrés de las tareas, pero los profesores eran muy considerados y para no perder la costumbre nos dejó una última tarea, realizar un proyecto que determinaría su nota final. Mis compañeros y yo nos disgustamos un momento pero cuando sonó la campana todos nos alegramos, ahora tocaba disfrutar de las vacaciones.
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Momentos Fugaces
Historia CortaHay una etapa de nuestra vida en la que deseamos regresar atrás, sabemos que eso es imposible, por eso es que debemos disfrutar del momento, lo que le sucede a nuestro protagonista es algo similar, se da cuenta que hay que disfrutar lo buenos moment...