Harry Potter El Protector de la Magia

Capítulo 15

En la mansión Greengrass, un tal Cyrus Greengrass estaba sentado en uno de los sofás de la sala de estar mirando los muchos archivos que tenía en su mesa de café. El señor esperaba pacientemente a que regresaran su esposa y su hija menor. Su esposa, Roxanne Greengrass, llevó a su hija Astoria a un chequeo en St. Mungo. No podía evitar estar preocupado ya que la familia del infierno tenía que lidiar con una maldición de sangre. Esa maldición le costó a su tío y esperaba desesperadamente que sus hijas nunca la atraparan.

Daphne dio negativo ya que demostraba que no lo tenía, eso fue un alivio para él. Ahora solo tenía que preocuparse por Astoria. Merlín estaba rezando para que se saltara a sus niñas, ya había enterrado a su tía y no estaba preparado para enterrar a ninguno de sus hijos.

Cuando se abrió la puerta principal, se puso de pie de un salto para ver a su esposa e hija. Al verlos, vio a Astoria, la niña tenía el cabello de su padre y los ojos de su madre, pero estaban rojos y llenos de lágrimas. Ella ni siquiera dijo nada cuando pasó corriendo junto a él y subió las escaleras hacia su habitación. En cuanto a Roxanne se veía tan pálida como un fantasma y de inmediato supo lo que estaba mal. ¡Astoria tenía la maldición!

Cyrus la abrazó de inmediato, ya que era lo único que podía hacer en este momento. Cuando ella se apartó, él la miró "los curanderos confirmaron que tenía el virus pero está inactivo". Dijo mientras lo miraba "tenemos que decirle a Daphne" concluyó.

"Lo sé" inclinó la cabeza avergonzado porque sabía cuánto se amaban Daphne y Astoria. Aunque pueden molestarse entre sí, comparten un fuerte vínculo de hermanas. Justo cuando estaba a punto de ir a escribir la carta, una idea se formó en su cabeza 'Severus'.

Si hubiera alguien en el mundo en quien confiaría este asunto, sería él. Los dos no solo eran mejores amigos, sino que Severus tenía un dominio en pociones y defensa, tal vez pueda ofrecer algo de ayuda. Resignándose, subió las escaleras hasta la habitación de Astoria para tratar de consolarla.

(0^0)

Durante el almuerzo, los cuatro estaban sentados en la mesa de Hufflepuff con Susan Bones y Hannah Abbot comiendo en silencio. La primera era sobrina del actual jefe del Departamento de Cumplimiento de la Ley, durante la guerra sus padres y su tío fueron asesinados, dejando solo a ella, Amelia y su abuelo. Potters and Bones tenían un tratado mágico entre ellos, por lo que no estaba mal, ya que, aunque eran de casas diferentes, seguían siendo aliados.

Cuando estaban terminando su almuerzo, se acercó una lechuza y parecía haber estado llevando dos cartas cada una pegada a sus patas. Uno para Harry y Blaise, ambos niños tomaron las cartas y enviaron a la lechuza a buscar algo de comida. Al ver que venía de Japón, instantáneamente pensaron en Miwa. Harry abrió la carta y vio que estaba escrita en japonés.

Miwa le agradeció los regalos que le envió y le preguntó. Ella escribió que participaría en las competencias de duelo tanto con él como con Blaise, diciéndoles que estuvieran listos. Además, dio a entender que ella estaba esperando que él regresara a Japón ya que no ha tenido a nadie contra quien competir. Sabía que ella extrañaba tenerlo cerca, ya que la vida debe haber sido horrible según Emily. Terminando la carta, la puso en su túnica y miró a Blaise. El chico instantáneamente supo lo que estaba pensando y asintió.

Terminando sus almuerzos, todos se fueron a sus clases. Harry y las dos chicas hufflepuff tuvieron herbología con la profesora Sprout y fueron al invernadero 2. Al entrar al invernadero, se sentaron al final de la mesa y esperaron pacientemente a que llegaran los demás.

La profesora Sprout pronto entró junto con el resto de la clase e inmediatamente comenzó su conferencia sobre la trampa del diablo. Harry estaba más concentrado en su tarea branquialgas, cuando se come le permite a la persona respirar bajo el agua durante una hora. Granger, por supuesto, siguió levantando la mano para responder preguntas que no eran nada nuevo. Lo que sorprendió a todos fue que Neville Longbottom también respondió preguntas y parecía tener un pulgar verde cuando se trataba del tema.